La concejal de Cangas que dio positivo en un control de alcoholemia se da de baja del PSOE

La concejal socialista de Iria Malvido, teniente de alcalde de Cangas (Pontevedra), se ha dado de baja este miércoles del PSOE gallego tras dar positivo en un control de alcoholemia. Malvido fue sorprendida el pasado fin de semana por la Policía Local cuando conducía por la localidad tras las fiestas con una tasa de alcoholemia de 0,80 miligramos por litro, muy por encima del límite penal. Pese a su baja del partido, por el momento, mantiene su acta de concejal.

La concejal ha hecho público este miércoles un comunicado en el que pide disculpas «desde la más absoluta humildad» por su «terrible error». «Soy consciente de la magnitud de mi error y renuncio de antemano, dada mi condición de cargo público, a cualquier circunstancia atenuante para justificar mi conducta», ha dicho la edil, tras reconocer que superó «holgadamente» la tasa de alcoholemia permitida al volante.

Malvido irá a juicio al haber arrojado una tasa que superaba los 0,80 miligramos por litro. La edil presenció la actuación de la Orquesta Galilea durante la noche del martes, cerca de la plaza de Abastos, según informó Europa Press. Posteriormente se dirigió a las naves de Ojea, en el entorno del Ayuntamiento, donde pinchaba un DJ.

Sobre las 2 de la madrugada cogió el coche y, cuando se disponía a abandonar el lugar, Malvido fue interceptada por la Policía Local, que le realizó un test de alcoholemia en el que dio un resultado positivo que superó los 0,80. En general, se considera ilegal todo lo que pase de 0,60, por lo que la edil tendrá que someterse a juicio por un delito contra la seguridad vial.

Iria Malvido fue candidata del PSOE a la Alcaldía de Cangas en las elecciones municipales de 2023 y actualmente es la ‘número dos’ de un gobierno local tripartito que dirige la regidora Araceli Gestido (BNG) y en el que también está presente Esquerda Unida. Por el momento, el BNG y EU no han comunicado su postura, mientras que el PP ya ha emitido un comunicado en el que exige su dimisión porque que la conducta de los representantes públicos «debe ser ejemplar».