La paradoja vasca de los arrestos por llevar cuchillo: la Ertzaintza no puede, la Policía local sí
La Ertzaintza ha emitido una instrucción que prohíbe a los ertzainas detener a quien porte o amenace con un arma blanca
Los ertzainas no podrán detener a quienes porten o amenacen con armas blancas. Los policías locales vascos, en cambio, sí que podrán seguir haciéndolo. Es la paradoja que ha desencadenado la instrucción que emitió, a finales de la semana pasada, José Bujanda, jefe de la Ertzaintza. Según esta última, la comisión de delitos de amenazas leves con uso o porte de arma u objeto potencialmente peligroso no conllevará la detención del autor. Una medida que ya instauró en Álava y que la policía vasca ha extendido ahora, dos semanas después, a las otras dos provincias vascas: Vizcaya y Guipúzcoa.
La orden ha recibido el rechazo rotundo de los principales sindicatos policiales (Erne, San y Sipe). Estas organizaciones, en unidad sindical, advierten de que la no detención del potencial delincuente permitirá que este tipo de actividades peligrosas sigan incrementando en la comunidad autónoma. «Beneficiamos al criminal, damos la espalda al ciudadano y nosotros quedamos totalmente expuestos», critican. Lo que ha sorprendido también a los agentes, no obstante, es que este criterio sea distinto en el caso de los cuerpos municipales, que, salvo cambios en los próximos días, seguirán aplicando la legislación de igual forma.
«Criterio judicial»
La polémica instrucción no ha llegado a ninguna de las policías locales del País Vasco. Según remiten a THE OBJECTIVE portavoces de distintos cuerpos municipales, el criterio sigue siendo «judicial». «Se aplican de manera rigurosa los artículos 169 a 171 del Código Penal que regulan el delito de amenazas, así como la jurisprudencia al respecto. La actividad de la policía municipal, como la de todo cuerpo policial público, esta sujeta a la supervisión judicial, y de momento no se ha recibido ninguna instrucción en uno u otro sentido», explican.
En este sentido, fuentes policiales señalan que, en estos casos, los agentes siempre detienen a un supuesto delincuente si hay una amenaza con arma blanca hacia una o varias personas. Y una vez el detenido pasa a disposición judicial, es el juez quien valora la gravedad o credibilidad de la amenaza. Este es el criterio que sigue también la Policía Nacional, indican las mismas fuentes.
Las razones del Gobierno
La nueva forma de actuación de la policía vasca obedece al criterio de dos jueces de instrucción consultados por los mandos de la Ertzaintza, que advierten de que esa es la interpretación correcta que debe hacerse del Código Penal. Consideran que no debe haber detención siempre que no medie contacto o agresión física, al considerar este supuesto un «delito leve». De este modo, ante la posibilidad de recibir denuncias por «detención ilegal», los ertzainas solo podrán identificar al autor, retirarle el arma y dejar el expediente en manos de la justicia ordinaria.
No será así cuando concurran supuestos de violencia de género y doméstica o cuando el agresor carezca de domicilio conocido. Tampoco cuando la amenaza se califique como grave, según la jurisprudencia. Casos en los que sea «seria y creíble por ser potencialmente esperando un comportamiento agresivo», señala la instrucción. De no ser así, portar un arma o amenazar con la misma no se considerará como grave y por tanto no se podrá llevar a cabo la detención del autor.
«Alegran a los delincuentes»
Desde el Sindicato Ertzainen Nazional Elkartasuna (ErNE), mayoritario en el cuerpo, su secretario general, Sergio Gómez de Segura, critica que este tipo de desiciones «no pueden estar al albur de lo que digan los jueces y los jefes políticos de la Ertzaintza». «La ciudadanía demanda unas actuaciones conformes al clima de inseguridad ciudadana que padecemos. Con esta instrucción los únicos que se alegran son los delincuentes. No es de recibo que después de que se produzca una amenaza con un cuchillo o una navaja, el ciudadano tenga que ver cómo el delincuente no es detenido y pueda seguir amedrentándole», censura Gómez de Segura.
Los agentes de la Policía autonómica llevan más de año y medio realizando cacheos preventivos cada tarde y también las noches de fin de semana en Vitoria, e incautando las armas encontradas. En los últimos meses se han producido varios ataques con arma blanca en la capital alavesa, como el del pasado 18 de julio en una reyerta en el parque Molinuevo que dejó un herido por arma blanca. Peor no es un caso aislado, días antes, el 5 de julio se produjo una amenaza con un arma blanca a una mujer en Vitoria porque no vende droga y, el 8 de junio un varón resultó herido de gravedad por arma blanca en las inmediaciones de una discoteca de Vitoria-Gasteiz.