El Gobierno oculta la agenda de los jefes de gabinete que se reunieron con la trama Ábalos

El Gobierno oculta la agenda de los asesores y jefes de gabinete que se reunieron con los protagonistas de la trama Ábalos. La mayoría de los encuentros que mantuvo Koldo García, asesor de José Luis Ábalos cuando estaba al frente del Ministerio de Transportes, concluyeron con intercambios de favores y anticiparon grandes adjudicaciones y concesiones de ayudas públicas que hoy están bajo lupa. También se produjeron reuniones de asesores del Gobierno con el comisionista Víctor de Aldama y con Claudio Rivas, su socio en la trama de hidrocarburos.

La opacidad, similar a la que tiene que ver con los nombres y sueldos de este personal de confianza, se justifica en que la publicación de estas agendas no es obligatoria. De esta forma, asesores y jefes de gabinete se pudieron reunir para tratar cuestiones diferentes a los que tienen fijadas sin tener que dar explicaciones. Sobre el asunto se han pronunciado Transparencia y el Tribunal Supremo. Ambos defienden que se dé a conocer la máxima información y toda la actividad relevante relacionada con este personal designado a dedo.

El Partido Popular se ha interesado, a través de una pregunta parlamentaria a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, por las reuniones mantenidas entre Juan Ignacio Ruiz Bidart, exdirector de gabinete de la exministra Reyes Maroto, y el empresario Claudio Rivas, socio de Víctor de Aldama en la trama de hidrocarburos. Los populares también han interrogado sobre si informó a Maroto de las gestiones que se hicieron y si Aldama y García recomendaron a más personas.

Ábalos, Koldo, Aldama y Rivas

El Gobierno, en una escueta respuesta, no responde a la mayoría de las cuestiones y se limita a decir que los jefes de gabinete no tiene obligación de dar publicidad a sus encuentros. «La normativa vigente relativa al personal directivo, entre ellos los jefes de gabinete, no establece la obligatoriedad de llevar agenda de sus actividades ni su correspondiente publicación». Preguntado si la ministra se reunió con Aldama o con Koldo García, se asegura en la respuesta que su agenda oficial es pública y se cuelga en la web de Moncloa.

La opacidad del Gobierno con respecto a la agenda de los jefes de gabinete contrasta con la trasparencia de buena parte de los grandes ayuntamientos y gobiernos regionales. En el caso de los sueldos de los asesores, el Ejecutivo de Pedro Sánchez oculta su identidad y, por tanto, no es posible saber la remuneración real. En este caso, son muchas las comunidades las que dan la información, por ejemplo el País Vasco como publicó THE OBJECTIVE. Las negativas del Gobierno se basan en una interpretación muy restrictiva de la normativa, que tanto Transparencia como el Supremo aseguran que debe ser mínimamente restringida.

Criterio de Transparencia

Las numerosas reclamaciones de datos referidos al personal de confianza, obligaron en 2016 al Consejo de Transparencia y Buen Gobierno (CTBG) y a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) a establecer un criterio de interpretación uniforme. El CTBG señala que estos datos tienen carácter de información pública. Además, asegura que esa publicidad contribuiría al mejor conocimiento del funcionamiento de las instituciones, a la asignación de los recursos y al conocimiento de cómo se toman las decisiones que afectan a los ciudadanos.

«En el ámbito de las Administraciones Públicas, teniendo en cuenta el artículo 6.1 de la LTAIBG [Ley de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Buen Gobierno], cabe considerar que la identificación de los titulares de los órganos directivos y sus asimilados «desarrolla(n) una actividad de ejecución esencial en la estructura de la Administración General del Estado», señala. Esto justificaría el acceso a la información identificativa de tales personas. «Así, cabría considerar amparado en la LTAIBG el acceso a los datos identificativos de los participantes en las reuniones que tuvieran, al menos, la condición de subdirectores, presidentes de entes públicos y subdelegados del Gobierno», destaca el texto.

Personal eventual

Respecto del personal eventual al que se refiere el artículo 12 de la Ley 7/2007, de 12 de abril, por la que se aprueba el Estatuto Básico del Empleado Público «debe favorecerse el acceso a los datos identificativos de aquellos que desarrollen funciones que incidan en el proceso de toma de decisiones de la entidad». En definitiva, aboga por que se identifiquen las personas asistentes a reuniones que sean miembros del Gobierno y altos cargos. En cuanto al personal de confianza o asesoramiento especial, «debe favorecerse el acceso a los datos identificativos de aquellos que desarrollen funciones que incidan en el proceso de toma de decisiones de la organización».

Así, según el artículo 5.1 LTAIBG, los sujetos obligados habrán de publicar de forma periódica toda aquella información cuyo
conocimiento sea «relevante» para garantizar la transparencia de su actividad. Si el sujeto obligado concernido considerase que la información retributiva referente al personal eventual es «relevante, a estos efectos, la LTAIBG no impediría su publicación». Por su parte, el Tribunal Supremo en su sentencia de 16 de diciembre de 2019, ratifica todos los criterios del CTBG.

Las reuniones con jefes de gabinete

Koldo García, Víctor de Aldama e incluso el empresario Claudio Rivas mantuvieron numerosas reuniones con el personal de confianza de numerosos ministerios, desde Hacienda a Industria, pasando por Agricultura y Medio Ambiente. En ocasiones tenían lugar en el ministerio, pero también utilizaron bares, cafeterías y restaurantes. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha revelado dos reuniones en el departamento de Industria en febrero de 2021 con los responsables de la trama de hidrocarburos.

Sin embargo, esas no fueron las primeras que tuvieron lugar en el ministerio para gestionar la concesión de un título de operador de hidrocarburos a la empresa Villafuel. El primer encuentro fue en diciembre de 2020, apenas dos meses después de que la empresaria Carmen Pano realizara los pagos de 90.000 euros en la sede del PSOE en Ferraz. La cita se produjo a instancias de Koldo García, en nombre del ministro de Transportes, José Luis Ábalos, pero el primero que abrió las puertas de la Administración al entramado destinado a defraudar el IVA fue el número dos de la entonces ministra Reyes Maroto, Juan Ignacio Díaz Bidart.

Deuda con Hacienda

Otro de los encuentros relevantes de la trama Ábalos con asesores del Gobierno tuvo lugar con responsables de Hacienda. Koldo García se reunió con Carlos Moreno, jefe de gabinete de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para que le explicara cuál era el «protocolo» para «pedir un aplazamiento a una empresa», ya que «lo desconocía». Tras la conversación y ya a punto de salir de la cafetería aseguró que casualmente se encontró con Víctor de Aldama. De esta forma, el exasesor de Ábalos justificó que Moreno pudo verse con Aldama.

Por su parte, Aldama presentó un escrito en el Tribunal Supremo en el que aseguraba que Moreno le solicitó que «le facilitara oportunidades de inmuebles» y que, a raíz de eso, el empresario le pidió un favor para aplazar un embargo a una de sus sociedades, algo que se acabó concediendo, según transmitió.

Los encuentros del exasesor de Ábalos con jefes de gabinete de distintos ministerios han sido numerosos. En algunos casos, en la etapa de la pandemia, momento en el que surgió la trama corrupta asentada a partir de los contratos de mascarillas. En algunas de las citas recogidas en la agenda telefónica del asesor aparecen reuniones con los jefes de gabinete de Sanidad, Agricultura -llamada telefónica- y Justicia en 2020. Mientras, aparecen reuniones en 2021 con asesores de Medio Ambiente e Industria. También figuran encuentros para comer con Carlos Moreno en mayo de 2021 y para «tomar algo en Latina con Carlos Moreno» en noviembre de 2020.