El Tribunal de Cuentas alertó a Muface del descontrol en pisos como los de los Gómez
Detectó «deficiencias en la forma de adjudicación» de los inmuebles y en la «realidad de la ocupación»

Habitación del ático de Muface realquilada por la familia de Begoña Gómez. | THE OBJECTIVE
De los más de 70 inmuebles que la mutualidad pública Muface tiene alquilados por toda España, al menos tres siguen arrendados a la familia de Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez. Se trata del bajo, primer piso y ático del sexto de la finca ubicada en la calle San Bernardo de Madrid, muy próxima a la Gran Vía. Propiedades tasadas en 1,2 millones de euros que se convirtieron en negocios sexuales -como la sauna Adán– a cargo de Sabiniano Gómez y su hermano, Enrique Francisco. La familia política del presidente del Gobierno lleva gestionando estos inmuebles desde 1989, por los que pagan mucho menos de lo que cuesta un arrendamiento en el mercado actual: por ejemplo, 850 euros por el ático de 139 metros cuadrados reconvertido luego en 14 habitaciones para alquilar por horas y días. Este tipo de alquileres fueron analizados por el Tribunal de Cuentas, que reveló en su informe de conclusiones que la gestión de estos arrendamientos «presenta deficiencias en la forma de adjudicación» y que el control ejercido por la mutualidad de funcionarios sobre estos inmuebles es «insuficiente».
Muface aún no ha explicado oficialmente los detalles de estos tres arrendamientos, cerrados a precio de chollo con una normativa posterior a 1985 -es decir, no pueden considerarse renta antigua-. Sin embargo, el Tribunal de Cuentas sí alertó a la mutualidad que su gestión de estos fondos patrimoniales presentaba, cuanto menos, lagunas. Lo hizo tras analizar a fondo el desempeño del organismo público que gestiona la sanidad de los funcionarios en la gestión de inmuebles del Fondo Especial -como se denomina este catálogo de propiedades- en 2002, repasando las cuentas del organismo desde el año 1997 y la forma en la que estaba estructurado su control de estos pisos y locales.
Según ese informe, que ha podido consultar THE OBJECTIVE, «el análisis de los inventarios de las cuentas de Inmovilizado material pone de manifiesto que Muface gestiona de manera distinta el inmovilizado del Fondo General y el del Fondo Especial (soportes materiales, criterios de amortización, etc.), que ha dado como resultado un deficiente control de los inmuebles del Fondo Especial».
Concluía el Tribunal de Cuentas que, en lo referente a alquileres como el triple de la familia de Begoña Gómez, «se ha apreciado un control insuficiente de la gestión de los ingresos del Fondo Especial», en referencia a la forma en la que se cobraban y certificaban los cobros del alquiler en estos pisos y locales.

Adjudicaciones
En su inspección, el Tribunal de Cuentas revisó un total de 24 inmuebles de los más de 70 arrendados y detectó una serie de irregularidades en la forma en la que fueron adjudicados. «La gestión de los inmuebles del Fondo Especial que están arrendados presenta deficiencias en cuanto a la forma de adjudicación de los arrendamientos, en cuanto al modo en que están formalizados estos arrendamientos y en cuanto a la realidad de la ocupación del inmueble por parte del inquilino», explica en su informe de fiscalización.

De esa forma, explicaba el Tribunal de Cuentas, se dieron situaciones, por ejemplo, en las que algunas propiedades estaban alquiladas gratuitamente, como una plaza de garaje en la calle Diego de León de Madrid, en el barrio de Salamanca.
Más de 1,2 millones
Muface aseguró en 2022 los inmuebles de su fondo público de viviendas con una póliza que cubría el continente ante incendios o cualquier otra catástrofe que dañase las propiedades. Y entre ellas se encuentran los tres inmuebles alquilados a precio de ganga a Sabiniano Gómez Serrano y su hermano, Enrique Francisco. Padre y tío de la mujer del presidente del Gobierno.
En ese contrato con una aseguradora, Muface deja constancia de la tasación de las viviendas y el bajo, en el que se ubicaba la sauna Adán. El local de la sauna está tasado en 635.819 euros, y el primer piso -también operado por la sauna- en 356.243 euros. El ático, situado en la sexta planta, tiene un valor de 223.791 euros. Este último, tal y como ha revelado THE OBJECTIVE, está asociado a una renta de poco más de 850 euros. En total, las valoraciones de los inmuebles que a día de hoy siguen bajo el control de la familia Gómez suman algo más de 1,2 millones de euros.
Los gastos de 36 años
Muface corre con todos los gastos comunes de los 72 inmuebles de su «Fondo Especial» que alquila a terceros, como los tres que tiene arrendados la familia de Begoña Gómez. Desde pequeñas reparaciones en los pisos y locales hasta obras de gran envergadura, pasando por el servicio de limpieza. Así lo confirma un documento del Tribunal de Cuentas al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, en el que se reseña que «los gastos del patrimonio inmobiliario del Fondo Especial se deben a reparaciones, a conservación, a gastos correspondientes a las comunidades de vecinos y a los del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)». También incluye las reparaciones en el interior de los domicilios.

En 1997, el edifico fue sometido a una obra de gran calado en su fachada, debido al paso del tiempo y a deficiencias estructurales. Se tramitó de urgencia y por subasta ante Muface. En esas obras, además, se reparó el tejado y se sustituyó por uno nuevo, según ha podido saber este diario. Fue la mayor obra que se ha acometido en el edificio desde que llegó allí la familia Gómez en 1989, y el coste ascendió a más de 34 millones de pesetas, por encima de los 200.000 euros. Por aquel entonces, el alquiler del ático rondaba los 300 euros.
Muface asegura que cualquier decisión sobre el «uso y disposición» de estos inmuebles «ha de tener en cuenta su condición de bien afecto al fin específico de financiación de las prestaciones a favor de los antiguos mutualistas, a fin de garantizar la máxima rentabilidad de los recursos obtenidos de tales bienes». Sin embargo, no revelan el balance de ingresos y gastos correspondiente a este inmueble concreto.