La reparación de los dos coches que evacuaron a Pedro Sánchez de Paiporta costó 8.700 euros
Algunas personas atacaron los vehículos en los que el presidente y su escolta salieron del lugar el pasado 3 de noviembre
Vehículo de la comitiva de Pedro Sánchez dañado el domingo 3 de noviembre en Paiporta. | Manuel Bruque (EFE)
Un total de 8.714,92 euros costó reparar los vehículos que evacuaron a Pedro Sánchez en su visita a Paiporta el pasado 3 de noviembre. El presidente del Gobierno recorría —junto a los Reyes y Carlos Mazón— las calles de la localidad valenciana afectada por la dana hasta que la comitiva fue increpada por la población local y el equipo de seguridad de Sánchez activó el protocolo y decidió sacarle de allí tras recibir un presunto «palazo» por la espalda. En cambio, tanto Felipe VI como Letizia y el presidente valenciano decidieron quedarse junto a los vecinos para mostrar su apoyo ante un pueblo indignado.
El movimiento contra el presidente continuó e incluso se intensificó cuando él y su equipo subieron a los vehículos. Tanto el coche en el que Sánchez fue evacuado como el de su escolta fueron atacados y acabaron con varias lunas rotas. THE OBJECTIVE ha accedido a los datos sobre los costes de las reparaciones de ambos vehículos a través de una solicitud al portal de Transparencia. Un total de 4.995,63 euros le ha supuesto al Estado sufragar el arreglo de uno de los automóviles, mientras que el del segundo alcanza los 3.075,79 euros.
El coche de Sánchez
Dada la situación y las condiciones en las que se encontraba Paiporta cinco días después de la riada, Sánchez no viajó en el coche oficial, el Audi A8 Security. Lo hizo a bordo del KGM Rexton, un todoterreno tradicional cuyas características son idóneas para circular por las calles abarrotadas de lodo en las localidades damnificadas por la dana. Se trata de un 4×4 clásico con una carrocería de acero de alta resistencia y con gran distancia al suelo (22,4 centímetros) para discurrir con garantías fuera de las calzadas.
En la visita, eran dos las unidades del KGM Rexton que acompañaban al jefe del Ejecutivo. Uno de los automóviles fue golpeado por varios ciudadanos a pie cuando el equipo de seguridad trasladaba a Sánchez al Puesto de Mando Avanzado después de haber activado el protocolo. Hubo quien propinó puñetazos y patadas al coche, mientras que otras personas lanzaron objetos contra él. Como consecuencia, el vehículo terminó con varias abolladuras, lunas rotas y pequeños daños que requirieron pintura.
Los autores no fueron grupos ultras
La Guardia Civil detuvo a tres personas por el ataque al coche escolta. Se trataban de tres vecinos de Paiporta, Albal y Godella, y fueron puestos en libertad a los pocos días. Tras el altercado, el presidente calificó los actos de «absolutamente marginales» y pidió diferenciar la «ira legítima» de los damnificados por la dana de la presencia en Paiporta de «grupos ultras perfectamente organizados» que trataban de «hacer el mayor daño posible a las autoridades allí presentes». El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se refirió a los agresores como una «minoría violenta» y aseguró que existía un «mínimo de organización», pero no confirmó la vinculación de miembros o grupos de la extrema derecha con este incidente, a la espera del desarrollo de la investigación.
Un mes después, la Benemérita descartó definitivamente la teoría de que fueran grupos de extrema derecha los que estarían detrás de los incidentes registrados. Después de investigar a partir de los vídeos publicados en redes y medios de comunicación sobre los altercados, identificaron a varias personas que participaron en las protestas —algunas detenidas—. «La gran mayoría eran vecinos de la zona y voluntarios, e incluso lugareños de avanzada edad», confirmó el Instituto Armado. «En ningún momento dijimos que lo fueran. La Guardia Civil simplemente abrió una investigación para esclarecer los hechos», explicaron tras algunas informaciones publicadas sobre la vinculación de los autores de los ataques a grupos de extrema derecha que supuestamente hizo el cuerpo.
El Rey volvió a Valencia nueve días después de los incidentes
Dos semanas después de la dana y tan solo nueve días más tarde de la tensa visita a Paiporta, Felipe VI regresó a Valencia por segunda vez. En esta ocasión estuvo acompañado por la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el objetivo no fue acercarse a al vecindario, sino conocer de primera mano las distintas unidades militares que colaboraron en las ayudas a los afectados. Ataviado con el uniforme militar, el Rey saludó a los casi 9.000 militares desplegados sobre el terreno.
Pero Don Felipe ha visitado la zona en más ocasiones tras la riada. El último viaje oficial a Valencia fue el pasado 12 de marzo. Junto a la reina Letizia, los monarcas fueron recibidos entre vítores y aplausos de multitud de vecinos. Allí se reunieron con organizaciones empresariales y entidades sociales vinculadas a la recuperación de los lugares afectados por la dana. En cambio, la última visita de Sánchez a territorio valenciano se registró el pasado 23 de enero —tres meses después de la anterior— para anunciar que el Gobierno central asumiría el coste total de la reconstrucción de las infraestructuras municipales dañadas.
