Ocupan el chalé de Rocafort (Valencia) donde vivió Antonio Machado durante la Guerra Civil
La Generalitat valenciana compró el inmueble en 2018, pero lo ha mantenido cerrado desde 2023

Villa Amparo, en Rocafort (Valencia). | Wikimedia
Antonio Machado vivió la Guerra Civil española (concretamente, desde noviembre de 1936 a abril de 1938) en un chalet neoclásico de Rocafort (Valencia), llamado Villa Amparo. Propiedad de la Generalitat valenciana desde 2018, ha estado cerrado a cal y canto durante más de un año y medio hasta que este fin de semana tres personas han entrado en él y se han instalado dentro, según ha podido saber el diario Levante.
Como ha publicado el citado medio, agentes de cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado acudieron al inmueble tras conocer que al menos dos hombres y una mujer habían entrado y aún continuaban dentro del inmueble. La casa de Machado, a diferencia de lo que suele ocurrir en la mayoría de okupaciones, es pública y está declarada Bien de Relevancia Local y parte del Inventario General del Patrimonio Cultural Valenciano.
La villa, modernista y de estilo neoclásico, es de principios del siglo XX y cuenta con una superficie edificada de 350 metros. Está formada por un chalet, un patio enlosado y un jardín; la Generalitat la adquirió en 2018 por 1,4 millones a la familia Bàguena, que durante muchos años la usó para arrendarla como salón de banquetes.
Cuando decidieron venderla, tanto el Ayuntamiento como colectivos vecinales y los propios dueños estuvieron de acuerdo en la importancia de esta villa y en la necesidad de que su destino fuera público. Es más, la propia Fundación Antonio Machado envió una carta a Ximo Puig, por entonces presidente de la Generalitat, como recordatorio de su responsabilidad de salvaguardar el edificio.
Cerrado y falto de mantenimiento
La Generalitat tenía la intención de convertir Villa Amparo en un lugar de referencia para los amantes tanto de la poesía y como del propio Machado; es más, la renombró como La Casa de los Poetas tras adquirirla. Sin embargo, y a pesar de haber albergado actividad cultural en 2022, permanece cerrada y sin acoger nada desde 2023.
La falta de uso del inmueble ha dado lugar a una falta de mantenimiento, tal y como ha podido constatar Levante. Aunque la casa está cerrada, son claras las malas condiciones en las que se encuentra sólo con ver la zona exterior: la vegetación crece sin freno ni orden en el jardín, hay objetos en el suelo, una ventana trasera abierta y algún toldo descolgado.