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España

El Gobierno solo ha recibido 10 peticiones para recuperar bienes incautados por el franquismo

El Ministerio de Cultura únicamente ha aceptado una solicitud, mientras que las otras nueve continúan «en trámite»

El Gobierno solo ha recibido 10 peticiones para recuperar bienes incautados por el franquismo

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, interviene durante el acto de restitución de obras incautadas durante la Guerra Civil y no devueltas por el franquismo, en el Claustro de los Jerónimos del Museo Nacional del Prado. | Europa Press

El Gobierno de España apenas ha recibido 10 solicitudes para recuperar bienes incautados por el franquismo. Desde la aprobación de la Ley de Memoria Democrática en octubre de 2022, el Ministerio de Cultura solamente ha recibido una decena de peticiones, de las cuales solamente ha aceptado una y el resto se encuentran «en trámite», según desprende una resolución del Portal de Transparencia a la que ha accedido THE OBJECTIVE.

Tras la aprobación de la controvertida ley, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, anunció en 2024 la elaboración de un inventario con más de 5.000 bienes confiscados durante y después de la Guerra Civil. Sin embargo, casi tres años después, apenas una pieza ha sido devuelta a sus legítimos propietarios. El resto del patrimonio continúa en manos de museos estatales y otros organismos públicos.

La Ley de Memoria Democrática, en su artículo 31, reconoce el derecho al resarcimiento por la incautación de bienes motivada por razones políticas, ideológicas, de conciencia o de creencia religiosa durante la Guerra Civil y la dictadura. No obstante, el proceso de devolución avanza lentamente, y resulta llamativo que, de más de 5.000 bienes identificados, solo uno haya sido restituido hasta la fecha.

El único bien que Cultura ha devuelto

Ese único bien restituido corresponde al cuadro Don Francisco Giner de los Ríos, niño, obra del pintor Manuel Ojeda y Siles. La pintura, en posesión de la Biblioteca Nacional, fue devuelta por el Ministerio de Cultura a la Fundación Giner de los Ríos, entidad heredera de la Institución Libre de Enseñanza (ILE), a la que pertenecía la obra antes de ser requisada en 1940.

Ernest Urtasun junto al presidente de la Fundación Giner de los Ríos, José García-Velasco. | Ministerio de Cultura

La ILE fue ilegalizada por la dictadura franquista poco después de la Guerra Civil, en virtud del Decreto 108, de 13 de septiembre de 1936, que la calificaba como opositora a «las fuerzas que cooperan al movimiento nacional». La norma ordenaba también la incautación de todos sus bienes, que pasarían a estar adscritos al Ministerio de Educación Nacional «para cumplimiento de sus fines culturales en la forma que su titular estime conveniente».

La obra permaneció conservada en la Biblioteca Nacional de España hasta su restitución, que tuvo lugar el 12 de diciembre en un acto celebrado en esa misma institución. El propio Urtasun fue quien entregó personalmente el cuadro al presidente de la Fundación Francisco Giner de los Ríos, José García-Velasco.

El lienzo había ingresado en la Biblioteca Nacional durante la guerra por mediación de la Junta de Incautación y Protección del Patrimonio Artístico, un organismo creado por la República para proteger «todas las obras, muebles o inmuebles, de interés artístico, histórico o bibliográfico» que estuvieran en riesgo de ruina, pérdida o deterioro debido a las circunstancias del conflicto. Aunque este organismo fue responsable de la mayoría de las incautaciones que hoy suman más de 5.000 bienes en el inventario del Ministerio de Cultura, el nuevo régimen se negó posteriormente a devolverlos a sus legítimos propietarios.

Cuarenta años más tarde, en 1977, durante la Transición, la Fundación Francisco Giner de los Ríos –constituida originalmente en 1916 para preservar y ampliar la labor de la ILE– fue nuevamente reconocida e inscrita en el Registro de Fundaciones Culturales Privadas. Un año después, un Real Decreto determinó que el conjunto de bienes incautados debía volver a estar adscrito a los fines culturales para los que la fundación fue creada.

Urtasun presume pero las devoluciones no avanzan

Durante el acto de devolución del cuadro, Urtasun subrayó el valor simbólico del gesto: «Este es un acto de devolución que se inscribe en una voluntad firme, por parte de este Ministerio de Cultura y del Gobierno de España: hacer valer el espíritu y la letra de la Ley de Memoria Democrática y reparar, tanto tiempo después, el verdadero estatus y propiedad de un patrimonio que fue vulnerado y expoliado por la dictadura».

En un comunicado posterior, Cultura presumió de su papel pionero al afirmar que fue «el primer ministerio que dio cumplimiento a lo marcado» por la Ley de Memoria Democrática, con la publicación del inventario de bienes incautados por el franquismo. Sin embargo, más de dos años después de la aprobación de la norma, la devolución de bienes avanza a un ritmo muy limitado, con solo una restitución formalizada hasta la fecha.

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