Hacienda investiga contratos preparados para el socio de Gómez y destapados por TO
Los contratos logrados por Barrabés se basaron en criterios subjetivos y dejaron fuera a decenas de competidores

Carlos Barrabés, socio de Begoña Gómez en un máster de la Complutense. | Ilustración de Alejandra Svriz
Innova Next, la consultora tecnológica de Juan Carlos Barrabés, el que fuera socio en el máster de Begoña Gómez en la Universidad Complutense, consiguió numerosos contratos gracias a los criterios subjetivos. Esta valoración es discrecional y marca, en demasiadas ocasiones, quién se lleva la adjudicación, más allá de criterios técnicos y económicos. THE OBJECTIVE ha ido desvelando en sus informaciones esta táctica que ahora Hacienda, a través de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), ha puesto bajo el foco.
Como informó este medio hace ahora justo un año, Red.es redujo a la mitad peso de la nota objetiva en algunos de los contratos que ganó Barrabés, entre ellos el que ahora investiga Hacienda. El contrato en el que se han detectado irregularidades es el primero que obtuvo el empresario aragonés. La adjudicación tuvo lugar el 18 de marzo de 2021 y está relacionada con los servicios de oficina de una pyme. El importe ascendió a los 2,1 millones de euros. Junto a la empresa de Barrabés acudió la consultora KPMG.
Los técnicos de la IGAE sostienen que esta irregularidad supone que, al no alcanzar el 50% los elementos objetivos, la ley impone que sea un órgano independiente quien resuelva la parte técnica. Esa circunstancia supone que Red.es no debería haber liderado el proceso de adjudicación. El informe revela que este fue gestionado por el Consejo de Administración, pero que en la práctica el responsable fue David Cierco, el director de este ente público entre julio de 2018 y mayo de 2021.
Barrabés y Begoña Gómez
El informe al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE centra buena parte de la investigación en una adjudicación discrecional y, presuntamente, dirigida. Así consta en el informe de 144 páginas (anexos incluidos) que ha recibido el juez Juan Carlos Peinado, que investiga a la esposa del presidente del Gobierno por cuatro delitos. Los técnicos señalan que los criterios subjetivos acabaron teniendo más peso del que se le atribuía en los pliegos y que el ente público debió apartarse del proceso a favor de un órgano independiente.
El magistrado ordenó a la IGAE revisar media docena de contratos públicos a favor de Barrabés. Cuatro de ellos los recibió de Red.es, aunque tres los investiga desde junio del año pasado la Fiscalía Europea porque podrían haberse visto afectados fondos comunitarios. El informe indica que el 60% de la puntuación debía corresponderse al precio ofertado, es decir, a un criterio objetivo. El otro 40% a criterios técnicos subjetivos, dependientes de «un juicio de valor». No obstante, el criterio objetivo acabó puntuando solo el 30% del total, lo que supuso elevar «significativamente» la puntuación subjetiva. La oferta de la UTE KPMG-Innova Next obtuvo una puntuación total mayor que las ofertas de los otros tres licitadores, una diferencia de 0,49 con la segunda con mejor calificación.
Aluvión de contratos
El primero no es el único contrato en el que los juicios de valor permitieron a Barrabés, el socio de Begoña Gómez, arrasar en las concesiones. Las cláusulas, tanto en la parte subjetiva como en la referida a criterios evaluables, le favorecían claramente en muchos de los pliegos. El artículo 146 de la Ley de Contratos del Sector Público establece que deben ser prioritarios los criterios objetivos para reforzar la transparencia. Por esta razón, el porcentaje de la parte subjetiva nunca debería ser superior al de la valoración basada en cifras. En el caso excepcional de que no fuese así, según recoge la ley, se debe recurrir a comisión externa de al menos tres miembros para valorar las ofertas.
La empresa de Juan Carlos Barrabés, socio de Begoña Gómez, se benefició de las cláusulas subjetivas recogidas en los pliegos de parte de los 23 contratos que le adjudicaron ministerios y organismos estatales. Los criterios no cuantificables, diferentes a los técnicos y a los económicos, le sirvieron, por ejemplo, para hacerse con un contrato de 280.000 euros -sin IVA- de la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (Fundae).
Valoración subjetiva
La consultora arrasó en la valoración subjetiva incluida en este contrato impulsado por el organismo vinculado al Ministerio de Trabajo y Economía Social. Mientras, sus más inmediatos competidores plantearon mejores ofertas económicas y lograron más puntuación en los criterios evaluables. Sin embargo, les sirvió de poco. No priorizar la oferta económica supuso un sobrecoste para Fundae de un 40%, que es la diferencia entre la propuesta de Innova y la de su máximo rival.
Lo mismo sucedió, según ha podido constatar este medio, en el contrato de 20,6 millones de Red.es, dependiente en ese momento de Economía y Transformación Digital, para impulsar un servicio de formación para el empleo juvenil en la economía digital. Precisamente, Begoña Gómez recomendó a Innova de cara a una serie de contratos licitados por Red.es. Finalmente, la consultora y su socio The Valley los consiguieron.