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España

El Tribunal de Cuentas desdice a Sánchez: las finanzas del PSOE están plagadas de errores

Los balances socialistas no son transparentes: tienen anomalías y errores y ocultan de dónde vienen las donaciones

El Tribunal de Cuentas desdice a Sánchez: las finanzas del PSOE están plagadas de errores

Pedro Sánchez en su comparecencia en Ferraz.

El demoledor informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha provocado dudas importantes sobre la financiación del PSOE y la transparencia de las cuentas de la formación. El informe, que ha desgranado en profundidad THE OBJECTIVE, forzó la dimisión como secretario de organización socialista de Santos Cerdán. El complejo entramado delictivo, en el que presuntamente participaron Cerdán, Koldo García y José Luis Ábalos, además de excargos del Gobierno, obligó al presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, a dar explicaciones pocas horas después de conocerse el informe.

Sánchez se limitó a pedir perdón a la ciudadanía por todo lo expuesto por la Guardia Civil. Las revelaciones afectaban a sus hombres de confianza y a los más comprometidos cuando todavía aspiraba a liderar el PSOE. Además, de descartar un adelanto electoral, se comprometió a hacer una auditoría externa en las cuentas del partido. El presidente, aparentemente dolido, destacó que los balances de Tribunal de Cuentas y que «sus informes han sido siempre positivos».

La afirmación de Sánchez difiere bastante de los que se desprende de distintos informes que ha ido publicando el organismo fiscalizador analizados por THE OBJECTIVE. Las cuentas del PSOE -también de otras formaciones- no son transparentes, muestran anomalías y errores y ocultan, entre otras cosas, de dónde vienen las donaciones.

Informes del Tribunal de Cuentas

Al detalle, el Informe de fiscalización del cumplimiento del principio de transparencia hecho durante el año pasado dejaba patente una ausencia de información importante en la web del PSOE. Así, la formación no hace públicas las retribuciones a los máximos responsables o los pagos por asistencia a reuniones. Esta opacidad afecta a buena parte de los partidos. Tampoco muestra la identidad de los donantes que han aportado más de 25.000 euros, algo que recoge el artículo 14.8 de la LOFPP. Junto a esto, los créditos y préstamos que recibe no son accesibles a través de su página web, como tampoco las subvenciones obtenidas y las cuentas y balances.

Mientras, y con más detalle, el último informe de las cuentas de los partidos -relativas a 2020- dejaba en evidencia anomalías y falta de datos en los balances del PSOE. El informe destacaba que no se han hecho llegar un centenar de cuentas de agrupaciones locales. El organismo fiscalizador apuntaba que la formación había registrado varias provisiones que no se ajustaban a lo dispuesto a la normativa. Señalaba también que esto había supuesto que el patrimonio neto se haya infravalorado en casi 5,2 millones.

Deudas bancarias

Junto a esto, exponía que 110 cuentas bancarias correspondientes a sedes territoriales, con un saldo conjunto de 400.183 euros, no habían sido informadas por las entidades financieras por parte del PSOE. Además, 295 cuentas con un saldo conjunto de 302.189 euros de las que era titular la formación no aparecían contabilizadas al cierre del ejercicio.

Mientras, los ingresos procedentes de las aportaciones realizadas por los grupos municipales a la formación política con un importe de 7,5 millones de euros se habían registrado incorrectamente como ingresos de origen privado. Esto supone una importante alerta sobre la contabilidad, que podría encubrir la procedencia de una parte de dinero. Además, advertía de que al menos 27 inmuebles cuya titularidad corresponde al partido, con un valor catastral de 1,16 millones de euros, estaban pendientes de ser incluidos en la contabilidad. También apuntaba un deterioro de inmuebles superior a 370.000 euros, incluido en epígrafes diferentes.

El PSOE siguió en 2020 sin hacer caso de un asunto importante del que se le había alertado en años anteriores. La organización, señalaba el organismo fiscalizador, no permite identificar los importes contabilizados de acuerdo a su naturaleza económica, lo que dificulta la verificación de la correcta contabilización de las operaciones y de los ajustes y eliminaciones que se hayan realizado en el proceso de formulación de las cuentas anuales consolidadas.

Deudas del PSOE

La deuda consolidada del PSOE con entidades de crédito al cierre del ejercicio 2020 ascendía a 26,6 millones de euros, de los cuales 11,8 millones euros correspondían a la deuda de la Comisión Ejecutiva Federal y 14,8 millones de euros a la deuda del resto de sedes integradas en las cuentas presentadas.

En cuanto a los ingresos, estos ascendieron a 81,9 millones de euros. Los ingresos electorales superaron los 2,7 millones, mientras los procedentes de la gestión ordinaria alcanzaron los 79 millones. De ellos, el 59% corresponden a la financiación pública y el 41% a ingresos de origen privado. Esta exposición es corregida por el Tribunal de Cuentas, ya que una parte de los ingresos privados habían sido imputados incorrectamente.

¿En qué gasta el partido?

Los gastos reflejados en la cuenta de resultados de 2020 se elevaron a 66,6 millones de euros, de los que casi cuatro corresponden a gastos electorales. El organismo fiscalizador apuntaba una serie importante de anomalías y registros en conceptos erróneos. En cuanto a los gastos excepcionales, destacaba que en el ejercicio 2020, continuando con el criterio mantenido en las cuentas de los ejercicios 2018 y 2019, la formación política había registrado un gasto de un millón de euros en concepto de provisión por obligaciones que no se ajustaba a lo dispuesto en la norma de registro.

Por último, incidía en que hubiera sido necesaria la existencia de una obligación implícita o tácita como consecuencia de un suceso concreto ocurrido en el pasado y su cuantificación no responde al criterio de valoración recogido en el plan contable. En cuanto a la memoria, esta incluía el detalle de los préstamos con las entidades de crédito, pero no reflejaba la información relativa a las donaciones privadas ni la relación de subvenciones públicas; solo recoge la relación de las subvenciones electorales recibidas durante el ejercicio.

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