Un audio de Koldo podría aclarar el vínculo de Illa con el mayor pelotazo de la pandemia
¿Es el ‘Chili’ que menciona Koldo y vincula a Salvador Illa, en realidad Xi Li, es decir, el empresario chino Xiaojuan Li?
La última de las conversaciones con Santos Cerdán que Koldo García grabó con su móvil podría aportar una clave para desentrañar el mayor pelotazo de mascarillas que se dio en la pandemia en España. Es el llamado caso Travis, la compra por parte del Ministerio de Sanidad de Salvador Illa de 361 millones de euros a las sociedades Hangzhou Ruining Trading y HongKong Travis Asia Limited. Un material que llegó con meses de retraso y con graves deficiencias de calidad. En el audio de Koldo y Cerdán ambos hablan sobre la seguridad de sus comunicaciones y cómo evitar escuchas. Y plantean el uso de la aplicación encriptada Signal, momento en el que Koldo afirma que «Salvador Illa habla mucho con Chili» (escrito así según la transcripción de la Guardia Civil). Sin embargo, ese Chili podría ser en realidad Xi Li, sobrenombre de Xiaojuan Li, fundador y representante de esas dos empresas, que recibieron dos de los contratos a dedo más cuantiosos de la pandemia.
Diciembre de 2023. Koldo graba última vez -al menos, que sepa la UCO- una conversación con Santos Cerdán. Sobre la mesa está la certeza de Koldo de que la Guardia Civil le pisa los talones. Que le tienen «enfilao». Y con ello, su temor a que le estén interceptando las comunicaciones, algo que intranquiliza visiblemente a Cerdán durante la conversación. Comienzan a hablar sobre alternativas seguras. «Signal», le dice Cerdán en referencia a la aplicación móvil encriptada que es un quebradero de cabeza para las fuerzas de seguridad. Eso da pie a que Koldo le confiese que «Salvador Illa habla mucho con Chili por...». La frase se interrumpe pero es Cerdán quien la termina: «por Signal». Cerdán sabía de que hablaba: como ha publicado THE OBJECTIVE, usó esa vía para negociar con Bildu y asestar la puñalada política a UPN en Pamplona, regalándole la alcaldía a los de Arnaldo Otegi.
El misterio sobre quién es ese Chili ya protagoniza la política catalana. Este miércoles, durante una sesión del Parlamento de Cataluña, a Illa le preguntaron por él tanto el líder del Partido Popular, Alejandro Fernández, como el de Vox, Ignacio Garriga. Illa, visiblemente apurado, respondió con un «no tengo ni puñetera idea». Sin embargo, ha ido cobrando fuerza una hipótesis que serviría para arrojar luz sobre el contrato de material sanitario más cuantioso, misterioso y ruinoso para la hacienda pública de cuantos se firmaron durante la pandemia de la covid. El que se llevó, troceado en partes, el empresario chino Xiaojuan Li. En China, los apellidos van antes que el nombre y dan lugar a formaciones de apodos más cortos, de dos silabas. En este caso, Xi Li. ¿Es el Chili al que se refiere Koldo en realidad Xi Li?
El pelotazo histórico
La identidad de Xiaojuan Li figura vinculada a las dos empresas chinas que sumaron el mayor pelotazo de la pandemia, HongKong Travis Asia Limited y Hangzhou Ruining Trading. Una con sede en Hong Kong y otra en la China continental. Entre ambas se fundieron un tercio del fondo de 1.000 millones de euros puesto en marcha para suministral material sanitario desde Asia durante la primera ola de la pandemia. Todo a través del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), dependiente en aquellos días de Illa.
En total, Hangzhou Ruining Trading y HongKong Travis Asia Limited se llevaron ocho adjudicaciones de ese organismo público por importe de 361 millones de euros. Por poner en contexto: la trama de mascarillas de Víctor de Aldama apenas ronda los 60 millones.
En la actualidad, tal y como desveló THE OBJECTIVE, los nombres de los responsables y administradores de la firma de Hong Kong figuran como «no disponibles» en el registro mercantil de Hong Kong, según ha podido comprobar este diario. Aquel material fue una ruina para los sanitarios. Fue caro, la mayoría llegó un año más tarde -pero se pagó a precio de oro– y encima muchas de las mascarillas resultaron inservibles e inseguras. Lo más cercano a una estafa, si no lo es.
Los dos contratos adjudicados a Hangzhou Ruining Trading, y el más cuantioso de los seis otorgados a HongKong Travis Asia Limited, formaron parte de las dos causas abiertas en los juzgados de instrucción 14 y 26 de Madrid por las irregularidades en las compras de mascarillas y otro material sanitario. En el primero se investigó la posible implicación de Salvador Illa en un presunto delito contra la seguridad de los trabajadores del sector sanitario, a raíz de una querella interpuesta por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) contra el exministro y actual líder del PSC.
En la segunda de las causas abiertas, los tres altos cargos de Illa que terminaron imputados declararon que habían informado en todo momento a sus superiores. Uno de ellos, el que fuera director del Ingesa Alfonso María Jiménez, llegó a confesar que informaba al menos dos veces al día al entonces ministro Salvador Illa sobre los contratos adjudicados
Durante su declaración ante la juez, los tres imputados defendieron haber actuado conforme a la normativa vigente y aseguraron haber informado en todo momento a sus superiores, según informaron fuentes jurídicas. En concreto, Jiménez aseguró que informaba al menos dos veces al día al entonces ministro Salvador Illa sobre los contratos adjudicados. También reveló que el equipo interministerial que decidía las adjudicaciones a empresas chinas se basó en un listado de empresas recomendadas por la Embajada de España en Pekín.