Begoña Gómez reaparece en un acto oficial siete meses después con Sánchez y los Reyes
La mujer del presidente del Gobierno ha acompañado a su marido a la cena de gala por la cumbre de la ONU en Sevilla

Los Reyes posan frente a las cámaras tras recibir a Pedro Sánchez y Begoña Gómez en Sevilla este domingo. | Casa Real
Begoña Gómez ha reaparecido públicamente este domingo tras siete meses alejada de los actos oficiales. La última vez que la esposa del presidente del Gobierno había sido vista en un evento de este tipo –sin contar su aparición en muletas durante la graduación de su hija el pasado mayo— fue el 30 de noviembre, en el 41º Congreso Federal del PSOE en Sevilla. En aquel acto, Pedro Sánchez agradeció el respaldo del partido en «momentos difíciles», preludio del proceso judicial que llevaría a su mujer a declarar el 18 de diciembre ante el juez Juan Carlos Peinado.
Este domingo, Begoña Gómez ha acompañado a su marido a la cena de gala con motivo de la inauguración de la IV Conferencia Internacional de la ONU sobre la Financiación para el Desarrollo, que se celebra en Sevilla. Los Reyes han recibido a los invitados en el Patio de las Doncellas del Real Alcázar. Allí, don Felipe y doña Letizia han saludado a Pedro Sánchez y a Begoña Gómez, quien en los últimos meses se había mantenido apartada de la agenda oficial. Debido a un fallo de protocolo, la pareja presidencial no posó junto a los Reyes en ese momento, sino después de que estos recibieran al resto de los asistentes.
Los Reyes han ido seguido recibiendo al resto de sus invitados hasta el inicio de la cena. Felipe VI ha dado un discurso de bienvenida en el que ha subrayado la importancia y el «enorme valor» de esta conferencia. El Rey, durante su intervención, ha subrayado que, con tantas voces acusando al mundo multilateral de ineficaz y de encontrarse en un punto muerto, esta cumbre es la demostración de que el multilateralismo “es todavía el mejor camino y el más duradero para lograr la paz y el progreso porque nos incluye a todos y da voz a todos”.
Ha recordado también las palabras atribuidas al filósofo musulmán nacido en Al Andalus Averroes, que considera ahora muy apropiadas: “La ignorancia conduce al miedo, el miedo al odio y el odio a la violencia, esta es la ecuación”. Al hilo de estas palabras, ha dicho estar seguro de que los asistentes, entre ellos el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, estarán de acuerdo con esta ecuación, “tanto simple como preocupante, que puede explicar algunos de los conflictos de nuestro tiempo y también en parte la erosión del mundo multilateral.
Precisamente, la Conferencia de Sevilla –ha subrayado– y lo que se espera de ella es que sea “una fuente tangible de esperanza en el futuro” ante los profundamente preocupantes y aterradores acontecimientos que el mundo está contemplando”. Felipe VI se ha preguntado si se puede asegurar que no todo está perdido y que no se han desperdiciado décadas de auténtico progreso en la construcción de un mundo más estable, pacífico, prospero y sostenible: “Todos tenemos voz para responder, para hacer posible decir sí”.
Ha insistido el Rey en que en este tiempo en el que a menudo se dice que los puentes de diálogo están rotos, esta Conferencia ha congregado a unas 12.000 personas de todo el mundo —con la gran ausencia de Estados Unidos— para discutir cómo modernizar el marco de desarrollo financiero, hacerlo más efectivo, ambicioso y resiliente ante los complejos retos de un mundo que cambia muy rápido.
En su defensa de la colaboración internacional y ante las acusaciones de que la ONU sufre de “fatiga crónica”, esta cumbre –ha recalcado– pone de relieve la importancia de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que se adoptaron hace una década y para cuyo cumplimiento quedan cinco años. “Esta sigue siendo una medida de nuestra ambición y dedicación como ciudadanos del mundo”, ha afirmado, reiterando que la ONU, con los valores de su Carta, sus reglas y su presencia en el terreno “es más vital que nunca”.