The Objective
El rincón de Espe

Marcos de Quinto: «Un derecho que se inventa supone quitarle el fruto del trabajo a alguien»

El empresario y exdiputado por Ciudadanos visita ‘El rincón de Espe’ para explicar el ‘wokismo’ y sus causas

Marcos de Quinto (Madrid, 1958) ha transitado de los despachos de Coca-Cola a los escaños del Congreso con la misma mezcla de solvencia y provocación que le caracteriza. Tras tres décadas en la multinacional, donde llegó a ser vicepresidente ejecutivo, dio el salto a la política con Ciudadanos y hoy se mueve en la trinchera cultural desde la asociación Pie en pared. En esta conversación con Esperanza Aguirre, analiza cómo la izquierda ha colonizado la educación, los medios y la cultura, desmonta la confusión entre derechos y deseos, y defiende que solo desde la libertad individual y económica puede evitarse el declive de España.

ESPERANZA AGUIRRE.- Bueno, Marcos, muchísimas gracias por haber acudido al Rincón de Espe. Para mí es un grandísimo honor, y cuanto más leo sobre ti y cuanto más te trato, más te admiro. 

MARCOS DE QUINTO.- Este es un rincón maravilloso. 

EA.- ¿Sí? Bueno, pues aquí estamos. Entonces, yo procuro traer a personas cuya trayectoria y cuyas enseñanzas puedan servir puedan ser útiles a todos los españoles. Y entonces yo creo que tú eres uno de ellos. Que hayas estado desde los 23 años –no quiero decir cuántos tienes ahora– en Coca-Cola, y haber llegado a vicepresidente, y que luego te quisieran contratar como asesor o miembro del Consejo o algo así, y que hayas decidido en su momento dar el paso a la política. Yo creo que es algo muy, muy relevante y muy admirable. 

MdQ.- Bueno, yo siempre he estado interesadísimo en la política. Yo creo que todos los ciudadanos estamos –bueno, digo los que somos de cierta responsabilidad–, pues somos seres políticos, y yo he estado siempre muy involucrado en la política, lo que pasa que no la he ejercido desde el punto de vista de un partido. He estado en política de partido relativamente poco tiempo, pero muy aprovechado porque he estado 15 meses –creo que son 15 meses exactamente– donde yo he sido estaba en Ciudadanos, primero, además como independiente, luego como militante de Ciudadanos, pues posiblemente muchos menos meses, pero en esos 15 meses he vivido dos elecciones generales y he sido miembro de la Diputación Permanente, por lo cual ha sido bastante intensivo. Y sigo, por supuesto, ahora en política, pero no encuadrado en ningún partido. 

EA.- Ahora en Pie en pared. 

MdQ.- En la asociación Pie en pared. Porque mira, cuando estás en un partido sucede una cosa, Esperanza. Bueno, qué te voy a contar. A lo mejor tú no estás de acuerdo con esto, pero generalmente te odian los de los otros partidos y a veces incluso los del tuyo. 

EA.- Mucho más los del tuyo. Ya lo decían en el Partido en el Parlamento británico, «el problema está en los de detrás». 

MdQ.- Ssin embargo, cuando no estás en un partido, estás en el movimiento ciudadano, estás con asociaciones civiles, pues al final te quieren los de todos los partidos. Bueno, muchos de esos partidos, porque a fin de cuentas, pues tienes cierto grado de influencia y todos quieren que esa influencia pues vaya más hacia sus tesis. Por eso yo creo que es muchísimo más confortable. Pero por supuesto, yo creo que es un acto de responsabilidad, y sobre todo en los momentos que estamos viviendo, en hacer cosas. En hacer algo para que España siga siendo un país maravilloso y no acabe, pues no acabe mal. 

EA.- Pero cuenta un poco qué es Pie en pared, que siempre hemos dicho que lo que queremos es ir contra el wokismo

MdQ.- Se lo cuento alguien que lo sabe perfectamente, pero es decir… Pie en pared es una asociación curiosa, porque es una asociación que no se dedica a construir, se dedica a destruir. A las demoliciones. Y esto es muy interesante, porque permite en estos momentos unir a mucha gente diversa, porque la gente puede estar de acuerdo sobre lo que hay que destruir, sobre lo que hay que cambiar. Pero luego pueden tener discrepancias en cuál es el modelo a construir. Este sentido lo tiene muy claro lucha contra la hegemonía cultural de la izquierda y contra la neorreligión woke. En eso estamos de acuerdo. 

EA.- Tienes que explicar un poco, porque no todo el mundo sabe lo que es la neorreligión woke. Y tú lo explicas, además, de una manera muy didáctica con con ejemplos y con… 

MdQ.- Una vez que cae el muro de Berlín, pues el gran el el gran tema para la izquierda, que era la lucha de clases, pues queda un poco caducado, como un yogur fuera de fecha. Nos encontramos con que Ernesto Laclau viene de alguna manera de echar un salvavidas a esa «nueva izquierda». Es lo que se llama el post-marxismo, y básicamente viene a decir que efectivamente la lucha de clases está ya obsoleta. Sin embargo, el esquema opresor oprimido es un esquema que todavía tiene mucho juego. Y a lo que se dedica Ernesto Laclau es a que la izquierda se apropie de todas aquellas causas que se pueden al final simplificar en opresor/oprimido. De ahí en Estados Unidos, pues bueno, pues tenemos hoy Black Lives Matter, de donde resulta oprimidos los afroamericanos y los blancos opresores. Tenemos todo el tema del neo feminismo también: oprimidas las mujeres, opresores los hombres. Luego tenemos… 

EA.- No, las mujeres somos víctimas y los hombres sois todos violadores en potencia. 

MdQ.- Efectivamente. Entonces todo esto se va replicando, y de esa manera, todo el wokismo se ha hecho con este tipo de causas, donde en el fondo es dos objetivos, básicamente es separar siempre en bloques a la sociedad, entre buenos y malos. Y luego, por otro lado, hacer de ello también un negocio, y de ello pues conseguir presupuestos públicos, etcétera. Porque la gente que se siente agraviada, pues si se les da dinero para sus fundaciones, para sus ONG, etcétera, pues parece ser que con el dinero se sienten menos agraviados. Ahora, lógicamente se agravio siempre va a perdurar, porque el día que se acabe ese agravio se acaba también la financiación y el dinero. Luego es una rueda absolutamente estúpida. Y bueno, nosotros luchamos un poco contra contra eso, y la mayor parte incluso de esas causas, pues son causas paradójicamente contradictorias entre ellas. Pero bueno, la izquierda se apropia de todo, de una manera además absolutamente… 

EA.- Pero en la causa del feminismo, por ejemplo, solo se meten con los países occidentales, que es donde las mujeres hemos conseguido la igualdad ante la ley, la igualdad de derechos. ¿Pero por qué no hablan de los millones de mujeres que hoy en el mundo están preteridas, impedidas de tener la vida más normal que podemos considerar en Occidente y sometidas al padre o al marido. 

MdQ.- Pues eso es muy sencillo, porque si tú tratas de cambiar los países islámicos, por ejemplo, te va a generar mucho trabajo y no te va a dar dinero, sin embargo…

EA.- Te va a poner en peligro. 

MdQ.- Efectivamente. Sin embargo, tú en sitios donde ya se respeta a la mujer, pues empiezas a generar más agravios, pues tienes el caldo de cultivo para recibir más financiación para ONGs, etcétera. Pero bueno, dinero se está dando porque la AECID la la Asociación Española para la Cooperación y el Desarrollo, pues está dando a países africanos fondos, pues para el medio ambiente con perspectiva de género, y cosas rarísimas, pero lógicamente yo creo que esos fondos no llegan a ninguna parte o se quedan por el camino. Pero lo que sí es que el negocio está hecho para solucionar los problemas allá donde no existen, pero allá donde existen los problemas nadie se atreve a ocuparse de ellos porque es un tema bastante ingrato. Quienes se ocupan de esa labor, históricamente lo han hecho los misioneros, los misioneros españoles cuando han ido a otros países con riesgo de sus vidas para ayudar a la gente. Pero las ONG que…

EA.- Que aprendían hasta las lenguas, el náhuatl y todas las lenguas americanas. 

MdQ.- Las ONG s no están para eso. Están precisamente para vivir en el primer mundo y vivir del dinero pretendiendo que ayudan al tercer mundo. Que además es curioso que se las llame organizaciones no gubernamentales… 

EA.- Y son todas «gubernamentabilísimas». 

MdQ.- Si en un momento perdieran todas las subvenciones por parte del gobierno, dejarían de existir. Luego entonces, no hay nada más gubernamental que las ONGs. 

EA.- Oye, Marcos, yo querría que tú explicaras –porque lo explicas muy bien– por qué razón, siendo tan claro que en la batalla cultural nosotros estamos por la defensa de la propiedad, de la vida, de la libertad y del imperio de la ley, ¿por qué no tenemos altavoces suficientes? ¿Por qué los medios de comunicación pues parece que siempre se toman, en fin, el empresario siempre es malo, sabes? Puedes explicar esto en las series, en las películas, en… 

MdQ.- Sí,, efectivamente. Lo que sucede es que desde hace décadas y décadas y décadas, la izquierda, Gramsci de alguna manera, hizo un gran viraje a lo que era el comunismo. El comunismo antes se implantaba a través de la revolución violenta. Y Antonio Gramsci, allá por los años 30 del siglo 20, pues escribió el libro Cartas desde la prisión y Escritos desde la prisión, y básicamente dijo que la manera de instaurar el comunismo, aunque fuera de una manera más lenta pero mucho más sólida, era a través de infiltrarse y copar las posiciones dentro del mundo de la enseñanza (educación, universidades…), dentro del mundo de los medios de información y dentro de lo que es el mundo de los contenidos, del arte, de la cultura en general. Y efectivamente, si nosotros vemos que en el mundo de la información, en el mundo de la educación y en el mundo de la cultura, hay una sobreponderación de gente de izquierdas respecto a lo que son las sociedades, y desde hace muchísimo tiempo, pues lógicamente nosotros, no en los temas ya de información, etcétera, sino en el tema de contenidos, pues estamos siendo bombardeados y somos inconscientemente, estamos sometidos a una imagen, a un estereotipo que se ha hecho del empresario, pues de una persona gorda, con sombrero de copa, con un puro y tal y que y siempre el trabajador, alguien es famélico, oprimido, etcétera. Entonces todo esto que lo hemos visto siempre en viñetas, en las series de televisión como en La que se avecina o como en Aida, etcétera, siempre el personaje malvado, aunque sea simpático, pero es un personaje donde se concentran todos los estereotipos… 

EA.- ¡El pescadero! 

MdQ.- Sí, el pescadero. Machista, insolidario, egoísta, etcétera. Entonces pues bueno, todo eso, como la gente está viendo ficción, las defensas las tiene bajas y todo eso se va quedando en el cerebro de las personas. Y uno se hace con una idea que en el fondo perjudica absolutamente a lo que es una sociedad. Porque una sociedad que piensa que el empresario es malo, pues es una sociedad donde poca gente va a querer emprender. Y respecto a lo que comentabas del tema de los derechos, eso lo explica muy bien Agustín Laje. Es decir, los verdaderos derechos son el derecho a la vida, el derecho a la propiedad privada y el derecho a la libertad, porque son derechos que no conculcan los derechos de nadie. Agustín Laje dice: «El derecho a la vida no le quitó derechos a nadie. Significa que tú no me mates. El derecho a la propiedad privada. Yo no le quito nada a nadie. Significa que tú no me robes. Y el derecho a la libertad es el derecho a que tú no me esclavices». Esos derechos, si yo los tengo y se me respetan, yo no le estoy quitando derechos a nadie. Sin embargo, lo que ha hecho la izquierda ha sido crear derechos que de alguna manera conculcan alguno de estos tres, que son los básicos, que son los fundamentales. Habla Agustín Laje, que cuando alguien dice «es que tengo derecho a una vivienda», significa que a ti te vamos a quitar el dinero para que este señor pueda tener una vivienda. Te quitamos parte del fruto de tu trabajo para que él la tenga. O te hacemos que trabajes y que pongas ladrillos para que él tenga una vivienda. Entonces esos derechos que ahora la izquierda empieza a proliferar. 

EA.- ¿Qué otro derecho?

MdQ.- Muchísimos. O sea, cualquier derecho en estos momentos que la izquierda inventa, implica la sustracción del fruto del trabajo de alguien. Es decir, se confunden a veces los derechos con los deseos, y eso es una trampa. Y es un truco muy bueno que hace la izquierda. Es decir, ¿tú que deseas? ¿Quieres tener un coche? Quieres tener, yo que sé, pues no trabajar. Y entonces tienes derecho. 

EA.- Reciclas horas de trabajo, como dice nuestra vicepresidenta. 

MdQ.- Incluso si quieres no trabajar, como tendrás una renta mínima. Entonces ese derecho a una renta mínima pudiendo trabajar y tú no quieres trabajar, le estás quitando el derecho a otro, porque el fruto del trabajo de otro tendrá que ir en parte para pagarte tu renta mínima. Esto, el profesor Anxo Bastos –a mí me parece un tema maravilloso–  una vez, bueno yo lo he visto en alguna intervención diciendo: «¿Tengo derecho a tener una novia?». Y mucha gente levanta la mano como diciendo sigue, usted tiene derecho, y dice: «¡No! Yo tendré la oportunidad de tener una novia si me comporto, pero si tengo un derecho a tener una novia, alguien está perdiendo el derecho. Alguna señora tendrá que ser mi novia y a lo mejor…» Esto es la confusión entre deseos y derechos la ha jugado muy bien la izquierda, haciendo que toda la gente diga: «Oiga, pues tengo derecho a tener un coche». No, usted no tiene derecho a tener un coche. Si usted trabaja, si usted se esfuerza, pues usted ahorrará y usted se comprara un coche. Pero el derecho como derecho, no existe el derecho a tener un coche. Pues bien, eso es un poco lo que creo que es necesario educar a la sociedad, precisamente para que entienda estas cosas que una vez explicadas, parecen relativamente simples. Pero bueno, la izquierda ha dicho que la gente tiene derechos, derechos. Deberes, ninguno. Y así podemos acabar con con la sociedad. 

EA.- Y tú explicas muy bien también por qué el crecimiento económico –en vez de lo que quiere ahora la agenda 2030, que es el decrecimiento– con el crecimiento lograríamos que las expectativas de la inmensa mayoría de la gente se vieran satisfechas. 

MdQ.- Es que el crecimiento, lo que digo es que el crecimiento es es casi la medicina que cura todo, prácticamente todo. El decrecimiento, el decrecimiento real solamente se ha experimentado realmente en un país, que fue la Camboya de Pol Pot. Quiso volver al año cero. Derribó todos los puentes. Yo estaba en Camboya. Estuve en Camboya los años 90 y llevaba la responsabilidad de ese área, y era tremendo. Veías los puentes reventados, los coches todavía seguían calcinados porque no se habían retirado. 

EA.- ¿Pero los quemaban a posta? 

MdQ.- Sí, porque yo dije esto durante la guerra. Me dijeron: «No. Si cuando Pol Pot se hizo con el gobierno, básicamente no hubo guerra. Entonces, después de que tomara el poder. Se fueron dinamitando puentes y tal para volver al año cero y que la gente volviera a las raíces, al campo y tal. Bueno, tenías gafas, Uno dos idiomas. Pol Pot era un loco educado en las universidades francesas. Hablando de Gramsci, ha habido muchos que han estado educados en las universidades francesas. 

EA.- Bueno, francesas, americanas… 

MdQ.- Pero estos precisamente venían creo que de la Sorbona. Y entonces ese decrecimiento ha llevado al desastre. Y el crecimiento soluciona prácticamente todo, porque si se crece, si se crece, pues lógicamente se reduce el paro, porque hay mucha más demanda de gente. Aparte, como hay más demanda de fuerza laboral, pues los sueldos se incrementan. Como los salarios suben, se recauda más. Pero por otro lado es menos necesario dar subvenciones para el paro, etcétera. Por lo cual es una rueda que va en un círculo virtuoso, que es el que hay que acometer. Y solamente se crece mediante la inversión. Y para que haya inversión, y esto es muy sencillo, pues hay determinadas cosas que, si tú te pones en los zapatos de un inversor extranjero o de un inversor español que tiene el dinero en el banco y se lo puede llevar a otro país de Europa, o invertir aquí, le dices: «¿Qué es lo que quieres? ¿Por qué inviertes en un país y no en otro? Hay una lista de 20 de 30 cosas importantes que mirar. 

EA.- La principal de las cuales supongo que es la seguridad jurídica. 

MdQ.- Seguridad jurídica, predecibilidad también legislativa, porque si no sabes exactamente mañana si te van a cambiar una ley o lo que sea… 

EA.- Que cada año hacemos 1.300.000 páginas de nuevas regulaciones, sin derogar ninguna. 

MdQ.- Menos burocracia, por ejemplo. Que no haya 17 legislaciones distintas para operar aquí, que tengas una fuerza laboral formada y aquí cada vez, pues la educación, desgraciadamente está yendo cada vez a peor. Que haya flexibilidad, que si hay gente que quiere trabajar 48 horas o 50 y hay gente que quiere trabajar, 15 que ambos puedan hacerlo, que haya libertad y que cada uno pueda hacerlo como uno quiera. Es decir, todo ese tipo de condiciones son prescindibles. 

EA.- Absurdas. Porque la misma persona en diferentes momentos de su vida, querrá trabajar más o querrá trabajar menos. 

MdQ.- Me acuerdo en la época cuando yo era joven y era muy normal el pluriempleo. Vale, perfecto. Yo trabajo aquí por las mañanas. Trabajo aquí por las tardes. Entonces que cada uno sea libre de hacer las cosas como le parezca. Pero. Es decir, hay un montón, un montón de pequeñas cosas que no atañen solamente a un departamento de economía, sino a determinados ministerios y todas se pusieran de acuerdo. Es decir, vamos a conseguir que España cumpla todas estas cosas. Que haya una energía barata. Eso es muy importante, sobre todo ahora, cuando hay tantos centros de datos, que en estos momentos vamos a tener una conexión con Estados Unidos a través de España, y centros de datos aquí en España, pues podría ser un gran negocio. 

EA.- Consumen mucha potencia energética, claro. Y si nos quieren cerrar las centrales nucleares, qué absurdo. 

MdQ.- Pero eso lo único es hacerse un checklist de todas esas cosas que cualquier inversor diría: «Entre invertir aquí en Marruecos, en Irlanda o en Portugal, ¿quién tiene estas cosas?» Nosotros lo que tenemos es la obligación de tenerlo. Sin embargo, aquí como la demagogia es lo que manda, pues entonces lo que vamos a hacer es expulsar aquí a toda la gente. Es un tema curioso. Cuando el gobierno actual dice que a los no comunitarios, a los extranjeros no comunitarios, les encantaría hacerlo con los comunitarios pasa que eso sería contra la ley de la Unión Europea, pero para los extracomunitarios, si quieren comprar un inmueble o una casa en España les van a meter un impuesto adicional. Y entonces, por ejemplo, extracomunitarios son los ingleses. Entonces, si los ingleses quieren comprarse una casa en Estepona, en Fuengirola… 

EA.- ¿Eso lo dice nuestro Gobierno, o la Unión Europea?

MdQ.- Sí, sí. Nuestro Gobierno, nuestro gobierno. A los extracomunitarios le van a poner un impuesto. 

EA.- ¿No se lo han puesto todavía? 

MdQ.- Todavía no. Bueno, entonces alguien que quiere comprar una casa aquí, que tiene dinero para comprarse una casa en Fuengirola o en Estepona, que una vez que se la compre se va a gastar el dinero en restaurantes, en tiendas, aquí y que viene con dinero, le estamos poniendo dificultades. Y sin embargo, a gente que nos viene aquí en una patera, que no quiere contribuir, que viene ilegalmente, a esos les ponemos el hotel y les damos una paga. ¿Pero qué tipo de extranjeros queremos tener aquí? O sea, es una locura, absolutamente. 

EA.- Tú también lo has explicado muy bien. Me parece que decías que el socialismo consiste en repartir, ¿no? Y que, por desgracia, hay también partidos en el centro-derecha que opinan lo mismo. En vez de la creación de riqueza… 

MdQ.- Es que el socialismo ha contaminado mucho y ha hecho mella. Estamos infectados de socialismo y te puedes encontrar, pues eso, que tienes una izquierda socialista y una derecha socialista, que incluso a veces yo creo que lo han adoptado sin haber hecho realmente una introspección realmente sobre cuál es la ideología. El capitalismo básicamente se centra en la generación de riqueza, porque lo importante es el progreso, el progreso real, el progreso material de una sociedad, no el igualitarismo. Yo a veces comento en las conferencias que si la mayor parte de la gente que está presente en la conferencia aumenta su nivel de renta un 20%, ¿qué más les da si Juan Roig o Amancio Ortega lo han aumentado un 200%? Según el índice de Gini, pues habremos incrementado la desigualdad. Pero hemos progresado. 

EA.- Pero la desigualdad no ha matado a nadie. Lo que mata la pobreza. 

MdQ.- Lo que importa, es que, aunque sea asimétricamente, todos avancemos. Y el avance se produce asimétricamente. Porque cuando tú das libertad a la gente, hay gente que ganará mucho más y arrastrará a los demás. Pero también es parte del premio. Ahora, si tu obsesión no es la generación de riqueza, sino la igualdad y castigar a los que generan riqueza, pues los que generan riqueza, pueden hacer dos cosas: o irse del país y generarla en otro país, que ya sucede, ya tenemos gente que se nos marcha a Andorra o que se marcha a Estados Unidos o se marche a otros sitios; o decir «bueno, pues como me va a dar igual que me esfuerce o que no me esfuerce, pues entonces lo que hago es vivir más cómodamente, porque no voy a hacer otra empresa ni hacer nada porque se me van a llevar todo el dinero». Entonces eso, generarás más igualdad, pero lógicamente pierdes todas las oportunidades de desarrollar lo que es un país. Y esto es una tristeza, porque al final ese tema de la desigualdad… Somos todos desiguales, absolutamente desiguales. 

EA.- Soy la mayor de ocho. Mismo padre, misma madre. No podemos ser más diferentes. 

MdQ.- Pero es que somos desiguales en todo. O sea, si uno se dedica a estudiar y a trabajar, a lo mejor no tiene tanto tiempo para salir por ahí y echarse novias. Y hay otros que a lo mejor estudian menos y trabajan menos y tienen muchas novias. Pero bueno, ¿por qué hay que compartir el fruto de uno y no el fruto del otro? Oiga, que vale, perfecto. Yo pongo impuestos, pero el otro que me pase novias, no sé. Es decir, que cada uno hace su proyecto de vida y uno es responsable del fruto que da ese proyecto de vida que uno elige. No tiene por qué penalizar solamente a los que han dedicado a ganar dinero, porque a los otros que se han dedicado a lo mejor a pasárselo mejor, pues resulta que esos no comparten todo el disfrute que han tenido. Y los otros, el sacrificio, el fruto de su sacrificio, se lo tienen que compartir y el otro es el fruto de su holganza. Pues esos no… Esos se lo quedan todo para ellos. Es realmente injusto. 

EA.- Pues muchas gracias Marcos. Yo querría, para terminar, que explicaras porque lo explicas muy bien, por qué la inmensa mayoría de las empresas del Ibex adoptan todas estas causas wokistas. Porque no es porque sean malas, sino, en tu opinión, porque quieren hacerse las buenas. 

MdQ.- Si le he dado muchas vueltas a esto y creo, creo que una de las razones es porque todos los directivos, todos los consejeros delegados de las grandes empresas, su objetivo es que su empresa sea percibida como una empresa que contribuye a un mundo mejor. Entonces, claro, el problema es ¿y qué es un mundo mejor? Y el problema es que la izquierda es quien ha definido lo que es un mundo mejor, y no necesariamente es mejor el mundo que la izquierda ha definido. Pero solamente hay esa definición que es la agenda 20 30 que un mundo mejor es un mundo sin CO2. 

EA.- Pero esto es una estupidez. A nosotros nos enseñaban que CO2 era fundamental para que las plantas pudieran crecer. 

MdQ.- Exactamente. Y tenemos en estos momentos una situación donde, creo que en el época del Carbonífero, el CO2 en la atmósfera era el 15% y ahora es el 0,04. Si bajara al 0,02 podría haber un problema con las plantas, pero como eso lo ha definido la izquierda y no ha habido una alternativa y yo no le echo la culpa tanto a las empresas, sino a la ausencia de un modelo alternativo, que es un poco en lo que hay que trabajar. Hay que crear ese modelo alternativo. Un mundo mejor es un mundo más seguro, un mundo donde no haya violaciones, un mundo donde la gente pueda tener su espacio y vivir de acuerdo con su cultura. Un mundo mejor es un mundo donde haya más libertad y un mundo mejor es donde no tengas un Estado que esté continuamente prohibiendo absolutamente todo y prohibiendo cosas a las cuales no le has conferido la potestad de podértelas prohibir, que simplemente se lo toman por su cuenta con supra organizaciones. Nosotros tenemos aquí no solamente lo que es el Estado español, sino lo que es la Unión Europea, y luego supra organizaciones internacionales, que nunca sabes quién las ha nombrado ni a qué intereses responden. Luego, si te enteras que China ha puesto dinero en la OMS y que Pfizer ha puesto dinero en la OMS o lo ha metido en la Unión Europea, y al final dices oye, empezamos a perder libertad y soberanía. Y sobre todo, lo más importante: Un mundo mejor es un mundo más libre, y tenemos que estar muy alerta de todas aquellas cosas que pueden hacernos perder la libertad, y todas aquellas instituciones a las cuales no les hemos dado el derecho de que coarten nuestra libertad. 

EA.- Claro, si es que el Gobierno tendría que hacer aquello que nosotros le autorizamos a hacer, no aquello que se le ocurra, que es lo que hace.

MdQ.- Exacto. El gobierno tiene que estar limitado sobre aquello que nosotros le hemos dado la instrucción y autorizado. Eso que sucede en EEUU… 

EA.- Como dice Reagan con con su famoso discurso de We, the people. «Nosotros somos el conductor del coche. Le decimos dónde vamos». 

MdQ.- Eso, que es una cosa muy importante, porque hay cosas que la gente no lo entiende o lo ven de una manera superficial o hasta qué punto estamos contaminados en Europa: El tema de la posesión de armas en Estados Unidos. El tema de la posesión de armas en Estados Unidos es muy importante desde esa perspectiva, porque los norteamericanos, desde que tienen su constitución de We the People, no le han autorizado al gobierno a que les quite las armas, porque la gente tiene las armas, incluso llegado el momento, para incluso defenderse de su propio gobierno. Es decir, los norteamericanos nunca, nunca, autorizaron a ese gobierno al que le han dado las instrucciones de qué puede hacer y no puede hacer a quitarles las armas. Sin embargo, en el caso de Europa es distinto. Nos hemos acostumbrado a que nos quitan las armas y no pasa nada. 

EA.- Y nos dicen cómo tiene que ser el tapón de la botella. A mí, que soy una ganadera consorte, toda clase de disparates… 

MdQ.- Eran más libres nuestros abuelos. Si querían hacer un corral, lo construían. Si querían tener gallinas, las tenían. Y si querían tener algo, lo tenían. ¿Y si querían tener cachorros de esos perros? Los tenían. Ahora, en la actualidad… 

EA.- ¿No puedes tener cachorros de tus perros? 

MdQ.- No puedes. Te tienes que dar de alta como criador. Ahora ha habido un lío tremendo con los perros de caza. Prácticamente en los pueblos tú tienes cachorros y tú vas viendo cuáles son los buenos, porque de esa manera vas haciendo… Pues te tienes que dar de alta de criador, porque si no los tienes que esterilizar. 

EA.- ¿Pero eso qué, por que lo dicen los animalistas, o quién?

MdQ.- Es una norma actualmente. Si quieres hacer un cobertizo o un corral tienes que ir al ayuntamiento y pedir un permiso. Es decir, todo este tipo de cosas te están coartando absolutamente la libertad. Pero bueno. ¿Quién le ha dado permiso al Ayuntamiento? Que yo sí tengo un terreno y tal puedo hacer esto o no lo puedo hacer. Pues bueno, hay gente que se dedica a eso, viven de vigilarlo y viven de ponerte multas para poder alimentar a la gente que necesita cobrar para seguir poniendo multas. Entonces, oye, esto se retroalimenta. 

EA.- Marcos, pues muchísimas gracias. ¿Quieres dar algún otro mensaje a los que nos estarán escuchando? 

MdQ.- Sí, bueno, yo quiero comentar una cosa, que es curiosa. Cuando se trata de generar riqueza, y lo que he comentado antes de los tres puntos fundamentales, que los tres puntos es el derecho a la libertad, a la propiedad privada, ya a la vida y a la seguridad, pues lógicamente una sociedad que cree en esos puntales, lo más importante es que tengas unas fuerzas y cuerpos de seguridad bien dotados y un aparato de justicia moderno y bien dotado. Si nosotros vemos en nuestro país, tenemos que nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad están infrafinanciados, y es una lástima ver cómo están nuestros juzgados y el Poder Judicial absolutamente desatendido. Sin embargo, una sociedad socialista que vive del reparto, lo único que necesita es una Agencia Tributaria absolutamente sofisticada, con la última tecnología, incluso una Dirección General de Tráfico, para que las multas inmediatamente la tienes en un punto te pueda llegar al otro. En eso estamos perfectamente dotados. 

EA.- La parte represiva, digamos. 

MdQ.- Efectivamente. Entonces es muy fácil ver en qué sociedad estamos, independientemente de quién haya gobernado, porque el foco de las inversiones se han hecho en la parte de cómo extraer. 

EA.- La Agencia Tributaria es un escándalo. Hay un señor que hablaba hoy… 

MdQ.- Es de las más sofisticadas que existen en el mundo. 

EA.- Mientras la justicia no tiene medios. 

MdQ.- Y la Guardia Civil tampoco. Están en nada, y sin embargo, tenemos lo más sofisticado que es el aparato extractivo. Luego, démonos cuenta de esto y veamos realmente qué sociedad queremos tener. 

EA.- Muchísimas gracias, Marcos.

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