El veto a Israel amenaza el uso de DarkBeast, el 'software' policial clave contra pedófilos
El programa israelí, cuyas licencias cuestan 300.000 euros, puede rastrear la ‘deep web’ en busca de actividad criminal

Agentes de la Guardia Civil durante una investigación de contenido pedófilo en la 'deep web'. | Guardia Civil
El Gobierno de Pedro Sánchez anunció tras el Consejo de Ministros de esta semana las medidas concretas contra Israel que el presidente había adelantado en una comparecencia desde Moncloa unas horas antes. La más contundente de ellas es el embargo de armas y la suspensión de cualquier contrato relacionado con la defensa que España mantuviese con Jerusalén. Una medida que ya ha causado un serio revés a la planificación de compras de las Fuerzas Armadas, obligando a anular programas estratégicos como el lanzacohetes Silam o el suministro de misiles contracarro Spike.
Sin embargo, hay otro tipo de herramientas informáticas desarrolladas y vendidas bajo licencia israelí que son de vital importancia para la investigación criminal, y cuyo futuro está ahora en entredicho. Por ejemplo, el llamado DarkBeast, un software que utiliza la Policía Nacional para rastrear y monitorizar la actividad delincuencial en la denominada deep web, el internet profundo en el que se mueven desde grupos terroristas hasta mafias y que se ha convertido en refugio para pedófilos que comparten material pornográfico infantil. La situación con Pegasus, el software espía israelí que infectó los teléfonos de Sánchez y varios de sus ministros, es similar.
Quién saldrá perdiendo en términos de seguridad del enfrentamiento diplomático entre España e Israel es algo que aún está por ver. Pero los que se dedican a la lucha contra algunos de los peores crímenes advierten que si la ruptura es total, la eficacia de las investigaciones de ciertos tipos de delitos se va a resentir.
Fuentes policiales explican a THE OBJECTIVE que el anuncio de la ruptura con Israel, y la respuesta por parte israelí ha despertado la preocupación sobre el futuro uso de herramientas informáticas muy específicas que utilizan las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Una de ellas, señalan, se llama DarkBeast (‘Bestia Oscura’), desarrollada y vendida bajo licencia por la firma israelí de ciberseguridad Kela Cyberthreat Intelligence.
Este software, considerado literalmente «imprescindible» por la Dirección General de la Policía Nacional cuando se llevó a cabo su adquisición, puede rastrear las áreas de internet no accesibles para el usuario general. Es capaz de detectar todo tipo de actividad y transferencias de archivos. Se utiliza contra el terrorismo y la radicalización online, contra el tráfico de drogas, las mafias y, «muy eficazmente», contra la pornografía infantil y las redes de pedófilos que pululan por este internet profundo. El sistema tiene capacidad de rastrear automáticamente los lugares y canales que utilizan estos delincuentes sexuales para compartir vídeos y fotografías de menores, localizándolos e incluso aportando datos clave para su identificación. Es una herramienta «insustituible» en ese entorno, explican.

Según un documento de la División de Operaciones y Transformación Digital y de la Unidad de Apoyo Tecnológico de la Policía Nacional, el DarkBeast es un «elemento imprescindible de soporte tecnológico que permite «realizar los análisis necesarios para identificar tanto operaciones compatibles con transacciones fraudulentas como aquellas que directamente pueden ser constitutivas de delito dentro de la internet oscura».
Bajo licencia de Israel
Las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE explican que este tipo de herramientas funcionan bajo licencias que Israel podría decidir «cortar en un momento dado como represalia» a la tensión generada con el Gobierno español. Algo que ya ha ocurrido en otras ocasiones cuando un país ha planteado una ruptura con Israel. En Colombia, por ejemplo, la fuerza aérea del país se quedó sin repuestos para unos cazas de fabricación israelí después de que Gustavo Petro anunciase que rompía relaciones con Jerusalén.
Israel se ha consolidado como una referencia mundial en el desarrollo de sistemas de inteligencia, y su Gobierno ha reprochado en varias ocasiones a los Estados europeos lo que considera posturas contradictorias frente a la amenaza del terrorismo islamista. En el caso español, según ha señalado el propio Sánchez, uno de los pilares de su política de «embargo» de armamento es impedir que buques que transporten armas puedan hacer escala en puertos españoles.
Ahora bien, de manera práctica, Israel no depende de España para el suministro de material clave, ya que la mayoría de sus adquisiciones procede de Estados Unidos y Alemania. España, en cambio, sí recurre a la tecnología israelí en el ámbito de la inteligencia militar, lo que podría generar complicaciones serias si tuviera que buscar alternativas en otros mercados. Una situación similar podrían sufrir otros países europeos si decidieran imitar la estrategia española, algo que en Jerusalén se procura evitar, aunque no se descarta como escenario posible.
El Ejecutivo israelí ha optado por reaccionar con firmeza a los anuncios lanzados en los últimos meses por Sánchez. Más allá de la prohibición de entrada en España a «todas aquellas personas implicadas directamente en el genocidio», lo que ha causado mayor malestar ha sido el embargo de armas, según ha podido constatar este diario. En cada análisis que elaboran sobre la postura del presidente del Gobierno se repite la idea de que Sánchez estaría utilizando sus ataques a Israel como una vía para desviar la atención de su propia crisis de liderazgo interno.