El Gobierno dedica medio millón de euros a fomentar «la diversidad sexual en Colombia»
El adjudicatario es un ente colombiano llamado «Corporación Caribe Afirmativo»

Ilustración de Alejandra Svriz.
Hoy les voy a hablar de ideología woke y de su financiación internacional. Expongo un ejemplo claro, aunque los hay a millares, y tendrán testimonio de ellos en esta sección.
Les hablo de solo medio millón de euros de sus impuestos. El destino y los programas que justifican la presunta distribución de esta cantidad de dinero son:
- «Programa Democracia Derecho y protección de personas LGTBIQ+ en movilidad humana»
- «Género. Enterezas: proteger la vida garantizando la seguridad y acceso a la justicia de mu» (termina así la publicación)
El adjudicatario de ese medio millón de dinero público español en sus dos motivaciones es un ente colombiano llamado «Corporación Caribe Afirmativo». Como acostumbro, suelo bucear por la red buscando todos estos entes que reciben dinero público español para comprobar primero su existencia y averiguar después qué proyectos realizan, si es que realizan alguno, pues muchos no pasan de meras declaraciones de intenciones en papel, que lo soporta todo.

Caribe Afirmativo está compuesto por una Junta Directiva presidida por un director y un subdirector, pero hay más. En un escalón inferior existen la friolera de 17 órganos de coordinación con una amplia variedad de motivaciones basadas en un ideario preestablecido para hacer idónea la recepción de financiación. Es difícil saber la cantidad de personas que trabajan en esta ONG. Su finalidad se describe en la web con un objetivo: «Consolidar una cultura de paz a partir del reconocimiento de los procesos de construcción de ciudadanías y el ejercicio pleno de los derechos desde la diversidad sexual y de género». Dejan claro en qué gastan el dinero público que supuestamente reciben, ¿no creen?
Por la información de su propia web, la financiación de este ente se nutre principalmente de las aportaciones (que no detallan) de otros entes a los que llaman literalmente «Aliadxs». Estos son la Open Society Foundations del multimillonario George Soros, la Aecid (Agencia Española de Cooperación Internacional para el desarrollo del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación), el programa de Naciones Unidas PNUD y la Agencia extremeña de Cooperación al Desarrollo, llamada Aexcid. Es decir, que España es un actor financiador principal en la actividad de Caribe Afirmativo. Para entender la posición principal de España como financiador es necesario recordar que el Gobierno también desembolsa erario a los entes de la Open Society Fundations y al programa PNUD de la ONU.
En cuanto a su actividad, parece que el proyecto estrella de este ente consiste en «Las Casas Caribe» Estas casas, un total de cinco, son lugares en los que esta organización desarrolla actividades relacionadas con el arte y actividades psicosociales (¿?) en zonas rurales y otros barrios para favorecer la «diversidad sexual» Según su propia información, el total de personas beneficiadas con su trabajo es 0. Como curiosidad, feminizan conceptos hasta el punto de hacerlos ilegibles.
La propia organización nos invita a todos a ver lo que sucede en esas casas a través de vídeos de YouTube que yo a mi vez les invito a ver. Juzguen ustedes mismos sobre la utilidad de este medio millón de nuestros impuestos presuntamente otorgado a esta ONG.
La cooperación internacional para el desarrollo se ha convertido en un aparato muy desarrollado capaz de financiar todo tipo de entidades por el mundo, ya sean públicas o privadas. Las organizaciones que reciben dinero público español bajo el paraguas jurídico de cooperación internacional para el desarrollo han adaptado su ideología a las afinidades políticas con, sobre todo, el progresismo personificado en partidos de izquierda y extrema izquierda.
Los ejemplos de ayudas con tintes ideológicos son abundantes. Gran parte tienen que ver con temas de índole sexual como el que nos ocupa. El constante afán de la izquierda por apadrinar y patrimonializar determinados movimientos como la diversidad sexual heterodoxa, el cambio climático antropogénico, el feminismo radical y otros movimientos coadyuvantes, obedece a una clara tentativa autocrática de convertir en religiones todos esos mantras, de la que el único profeta válido sería la izquierda progresista, claramente radicalizada.
Sobre la base de esta lucrativa tentativa, ya ejecutada y consolidada, los Gobiernos que abrazan esta estrategia reparten premios en forma de dinero público a aquellos entes con los que mantienen relaciones diversas (la mayoría) o independientes (los menos) que adecúan su actividad a esos fines. Y así nos lo encontraremos cada semana en esta sección, las Fugas del erario.
