Felipe VI defiende la Transición impulsada por el rey emérito, aunque «no fue perfecta»
El monarca elogia «el profundo sentido del deber» de la reina Sofía, «memoria afectiva de España»

El rey Felipe VI, durante su discurso en el acto de conmemoración del 50 aniversario de restauración de la monarquía | JJ Guillén (EFE)
El rey Felipe VI ha defendido este viernes la Transición española impulsada por su padre, el rey Juan Carlos I, aunque ha señalado sobre ella que «no fue perfecta». Así lo ha afirmado en el acto para recordar el 50 aniversario de la restauración de la monarquía tras la dictadura, en los que el gran ausente es precisamente el principal protagonista, Juan Carlos I. El acto central es el ingreso en la Orden del Toisón de Oro de la Reina Sofía, el expresidente del Gobierno Felipe González y de los dos ‘padres’ de la Constitución que aún siguen vivos, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón y Miquel Roca i Junyent.
«Este acto nos lleva a recordar un tiempo en el que España se abrió al diálogo», ha comenzado el monarca su discurso, en el que ha recordado el año 1975. «Quienes entonces éramos muy jóvenes, yo apenas tenía 7 años, vimos cómo el país empezaba a transformarse poco a poco, gracias a decisiones responsables y gestos valientes, a cesiones de unos y otros».
El Rey ha afirmado que «la Transición no fue perfecta, pero valorarla solo por lo que omitió sería injusto. La Transición se sostuvo sobre el respeto mutuo», ha añadido. «El mejor regalo de aquella generación fue y sigue siendo la Constitución de 1978». «En las circunstancias del momento, se hizo lo correcto: se priorizó la reconciliación, la estabilidad y la creación de un marco común, tan necesario».
El Rey ha destacado que la Corona asumió un papel claramente activo: «La firme voluntad de la Corona contribuyó a abrir en nuestro país el camino hacia la democracia. Integró a todos los españoles en un momento determinante y convocó, como afirmó el Rey, a actuar con generosidad, altura de miras y la voluntad de alcanzar un efectivo consenso de concordia nacional. La Corona fue una institución vertebradora y garante de estabilidad».
Felipe Vi también ha dedicado unas palabras a su madre, de la que ha destacado «su vida entera de servicio ejemplar y de lealtad a España y a la Corona, apoyando con convicción al Rey Juan Carlos en su acertada y temprana apuesta por la apertura democrática y las libertades». «La figura de la reina Sofía, forma parte también de la memoria afectiva de la España democrática».
El monarca también se ha dirigido a Felipe González: «Su elección consolidó la alternancia política», ha afirmado. «Felipe González firmó en el salón de columnas de este Palacio Real hace 40 años el Tratado de Adhesión de España a las Comunidades Europeas; impulsando tras ese paso decisivo, y tan anhelado por todos, una de las mayores etapas de modernización económica, institucional y social del país».
así lo ha señalado en el acto para recordar el 50 aniversario de la restauración de la monarquía tras la dictadura, en los que el gran ausente es precisamente el principal protagonista, Juan Carlos I.
Aunque el Rey tomó la decisión de conceder el collar del Toisón de Oro a su madre el pasado mes de enero como testimonio de su «aprecio» por ella y para «reconocer públicamente su dedicación y entrega al servicio de España y de la Corona» durante las últimas décadas, la entrega no se había producido aún. Finalmente, se ha decidido agruparla con la concesión de esta distinción a González, Roca y Herrero, que se anunció hace un mes, y convertir así el acto en una especie de conmemoración de la proclamación de Juan Carlos I el 22 de noviembre de 1975, dos días después de la muerte de Franco.
Desde Zarzuela se ha explicado la ausencia de quien fuera Rey de España durante casi cuatro décadas por el hecho de que en 2019, antes de partir al exilio en agosto de 2020, renunció a participar en actos institucionales.
No obstante, Don Juan Carlos sí ha sido invitado a asistir a la comida familiar de carácter privado que tendrá lugar el sábado en el Palacio de El Pardo a la que, según diversos medios, tendría intención de acudir, como ya ocurrió hace dos años cuando la Princesa de Asturias juró la Constitución. Entonces, el emérito no asistió a los actos en Congreso y Palacio Real, pero sí a la celebración privada del 18 cumpleaños de la heredera en El Pardo.
