La constructora de los Sumelzo disparó sus ventas un 150% tras llegar Sánchez a Moncloa
La empresa vinculada a la secretaria de Estado de Iberoamérica ha recibido 11 contratos de Transición Ecológica
Pedro Sánchez y Susana Sumelzo en un mitin.
Las administraciones públicas en manos del PSOE han sido históricamente los grandes clientes de la constructora Sumelzo S.A.; la firma aragonesa propiedad de la familia de Susana Sumelzo, secretaria de Estado para Iberoamérica y el Caribe, y una de las 15 diputadas que se mantuvo fiel a Pedro Sánchez en 2016. Las ventas de la compañía se situaban en torno a los 6,4 millones de euros en 2018. Solo dos años más tarde, la cifra había ascendido a 16,2 millones, es decir, un 153% de incremento. Su mejor cliente fue —y sigue siendo— la Confederación Hidrográfica del Ebro, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, que le dio en tiempos de Teresa Ribera un total de 11 contratos por valor de 16 millones de euros. La sociedad está presidida por Juan José Sumelzo Jordán, hermano de la secretaria de Estado, y por su padre, Fernando Sumelzo Cía. La UCO investiga por qué pagó 12.100 euros a Servinabar, la constructora que presuntamente utilizaba Santos Cerdán para cobrar mordidas a cambio de adjudicaciones de obra pública.
Las cuentas de Sumelzo S.A. no dejan lugar a dudas: la llegada de Sánchez a Moncloa sentó muy bien a los balances anuales de la constructora especializada en obra pública. Al margen de un año concreto, 2015, en el que el Gobierno aragonés del recién llegado Javier Lambán les otorgó una serie de contratos públicos que elevaron la facturación a los 12 millones de euros. Lejos quedaban los primeros años del Gobierno de Mariano Rajoy, cuando los encargos de obra pública —la fuente de ingresos primordial de la constructora— habían caído hasta los apenas dos millones de euros.
En 2019, con Sánchez ya en Moncloa tras su exitosa moción de censura de junio de 2018, Sumelzo S.A. logró elevar su facturación hasta los nueve millones de euros, tal y como reflejan las cuentas de la sociedad a las que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. Apenas cuatro días después de las elecciones generales del 10-N de aquel año, mientras se negociaba la formación del nuevo Ejecutivo, se formalizó el primero de una serie de contratos nacionales que marcarían la dinámica entre la administración central y la empresa aragonesa.
El análisis de los expedientes públicos de licitación relacionados en esos años con Sumelzo S.A. indica que el grueso de esta facturación proviene del Ministerio para la Transición Ecológica, cartera dirigida durante gran parte de este periodo por Teresa Ribera. Específicamente, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), organismo dependiente de dicho ministerio, figura como el principal adjudicador; otorgó a la empresa familiar numerosos proyectos para el mantenimiento de infraestructuras hidráulicas y carreteras, centrados fundamentalmente en las comunidades de Aragón y Navarra.
En 2020, año de los contratos de emergencia, la facturación alcanza los 16,2 millones. A finales de ese año, la Confederación Hidrográfica del Ebro adjudica un contrato por cerca de un millón a la constructora y licita otro que se llevaría en febrero de 2021 por importe superior a medio millón. En esas fechas la UCO sitúa el pago de 12.100 euros a la empresa Servinabar, la constructora instrumental que utilizaban presuntamente Joseba Antxon Alonso y su socio en la sombra, Santos Cerdán, para cobrar supuestas comisiones a cambio de arreglos en adjudicaciones de obra pública.
2023 también fue un año especial para las cuentas de Sumelzo S.A.: logró una facturación superior a los 13 millones de euros, impulsado en esencia por los contratos públicos. Fue también el año en el que Sánchez ascendió a Susana Sumelzo: de diputada a secretaria de Estado para Iberoamérica y el Caribe.
Apoderada y senadora
Susana Sumelzo estuvo vinculada a la constructora familiar durante un breve periodo de tiempo. El registro mercantil muestra que fue nombrada apoderada solidaria de la firma el 30 de noviembre de 2007, aunque tan solo estuvo en el cargo 5 meses y 25 días. Cesó el 27 de mayo de 2008.
El motivo de su cese fue su llegada a la política. Había ocupado varios cargos en el partido en Aragón, pero no fue hasta 2008 cuando llegó el gran salto a Madrid: el PSOE la eligió para sus listas del Senado por Zaragoza. Iba de número 3. En esas listas, como número dos al Congreso iba la actual ministra portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, estrecha amiga de Sumelzo según explican fuentes socialistas de Aragón.
El 4 de abril de ese 2008, el Boletín Oficial de las Cortes Generales oficializa la condición de senadora de Sumelzo. Sin embargo, compagina ese cargo con el de apoderada de la sociedad hasta mes y medio más tarde, cuando el registro mercantil oficializa su renuncia. Es la última vez que aparece vinculada a la empresa familiar, que desde entonces ha convertido a las administraciones locales, autonómicas y nacionales en manos del PSOE en su mejor cliente de obra pública.