El 50% de los andaluces teme más a la okupación que a un incendio en sus viviendas
Los expertos subrayan la importancia de conocer los detalles de los seguros antiokupación ante las posibles confusiones
El temor a la okupación de viviendas en Andalucía ha crecido considerablemente, superando incluso a preocupaciones más tradicionales como los incendios. En la actualidad, la mitad de los andaluces considera más probable sufrir una okupación que un incendio en sus viviendas.
Esta percepción es especialmente notable en periodos vacacionales, cuando muchas casas permanecen vacías durante semanas o meses. La inquietud se ha visto reflejada en un aumento de la demanda de seguros específicos que protejan contra la okupación, una tendencia que ha ido en aumento en los últimos años.
Según un reciente estudio, el 50% de los andaluces contrataría un seguro que incluya cobertura contra okupas y un seguro de impago de alquiler, especialmente si tienen la intención de alquilar su vivienda. Este hecho demuestra que la okupación ha pasado de ser una preocupación puntual a convertirse en una de las principales inquietudes para los dueños de propiedades, en especial en las áreas urbanas.
A nivel nacional, cuatro de cada diez españoles manifiestan su preocupación por la okupación, lo que refleja que este problema no es exclusivo de una región, sino que las continuas informaciones sobre este fenómeno acrecientan el temor y la búsqueda de una protección eficaz.
Evolución en las coberturas
El perfil de quienes contratan seguros antiokupación corresponde principalmente a personas entre los 35 y 44 años que poseen inmuebles en zonas urbanas o tienen segundas residencias que quedan vacías durante largos periodos. Esto se debe a que dichas viviendas son más vulnerables a la okupación, especialmente en verano, cuando la mayoría de los propietarios se encuentran fuera. En este contexto, los seguros de hogar que incluyen coberturas para este tipo de situaciones se han vuelto una opción muy atractiva.
Además de la okupación, los robos en viviendas también son una preocupación latente. Para hacer frente a esta problemática, muchas aseguradoras han ampliado sus coberturas, incluyendo protecciones que van más allá del hogar. Algunos seguros ofrecen cobertura para los objetos de valor que los propietarios lleven consigo durante sus viajes, así como asistencia en caso de sufrir un robo o lesiones durante su desplazamiento. Estas opciones se han vuelto cada vez más populares entre aquellos que buscan una protección integral mientras están fuera de sus hogares.
Inseguridad jurídica
El aumento en la contratación de seguros antiokupación ha sido impulsado también por una creciente sensación de inseguridad jurídica entre los propietarios. Las leyes actuales no siempre ofrecen una solución rápida o efectiva para desalojar a los okupas, sino que dejan a los propietarios ante un mar de incertidumbre. Esta latente desprotección ha generado una mayor demanda de productos como seguros de impago de alquiler y pólizas específicas para la inquiokupación, una situación en la que el inquilino deja de pagar la renta, pero continúa ocupando la vivienda. Este tipo de procedimientos judiciales, que en el pasado podían resolverse en menos de un año, ahora pueden prolongarse durante más de dos años, especialmente a aquellos que pueden encontrarse en una situación de vulnerabilidad.
En este entorno de desconcierto han proliferado empresas especializadas en la desokupación, que ofrecen servicios para desalojar a los okupas de manera rápida. Sin embargo, este sector también ha generado controversia, ya que en ocasiones estas empresas realizan pagos a los okupas para que abandonen las viviendas, lo que perpetúa un círculo de extorsión. Al mismo tiempo, algunos servicios resultan ser fraudulentos, lo que pone en una situación difícil a los propietarios.
Letra pequeña
Un aspecto crucial que los expertos sugieren valorar es la confusión existente en torno a los conceptos legales de allanamiento de morada y usurpación. Abogados consultados por THE OBJECTIVE sostienen que mientras que el allanamiento de morada se refiere a la ocupación ilegal de una vivienda que es la residencia habitual de alguien, la usurpación ocurre cuando el inmueble no está habitado de manera permanente, como en el caso de segundas residencias o propiedades vacías.
Esta sutil pero crucial diferencia puede causar confusión entre los propietarios. La Asociación de Usuarios Financieros ha denunciado recientemente que algunos seguros antiokupación no aclaran adecuadamente esta distinción en sus coberturas ni en su publicidad, lo que lleva a los propietarios a pagar por una protección que no se ajusta a sus necesidades.
La Asociación de Usuarios Financieros ha advertido sobre posibles irregularidades en la oferta de estos seguros, señalando que en muchos casos las coberturas contra vandalismo o daños son redundantes con las que ya incluyen los seguros de hogar tradicionales. Además, ha subrayado la importancia de comprender a fondo las condiciones generales de los contratos para evitar situaciones incómodas o problemas a la hora de reclamar compensaciones.