Polémica en Ceuta por la distribución de las luces festivas del Ramadán
Los vecinos denuncian un reparto desigual del alumbrado y reclaman más diálogo en la planificación

Rezo colectivo por el fin del Ramadán en Ceuta. | Antonio Sempere (Europa Press)
Cada año, la instalación del alumbrado especial para Ramadán en Ceuta genera debate. La distribución de las luces ha vuelto a suscitar críticas por parte de distintos barrios que se sienten marginados o insatisfechos con el reparto. Mientras que algunas zonas disfrutan de una decoración llamativa, vistosa y atractiva, otras han expresado su descontento por la escasa iluminación recibida o por la «falta de criterio» en la colocación de los adornos.
La reciente inauguración del alumbrado en la ciudad ha sido motivo de celebración para muchos, pero también de crítica para otros. Vecinos de distintas barriadas han manifestado su malestar por lo que consideran una distribución injusta de la iluminación. Las redes sociales han sido el escaparate de este malestar, donde algunos de los vecinos han expresado su descontento con respecto al trato desigual que sienten por parte de la administración local.
En algunos sectores, la decoración se limita a unas pocas luces, lo que ha llevado a los residentes a reclamar un criterio más equitativo y estructurado para la colocación del alumbrado. Según han explicado vecinos ceutíes a THE OBJECTIVE, es comprensible que en las zonas más concurridas se disponga de más alumbrado, pero no es justo una disparidad tan abultada, dejando a barrios «con cuatro luces mal puestas».
Desde hace varios años, las quejas en torno a las luces de Ramadán han variado. En 2023, la controversia giró en torno al tipo de símbolos utilizados, que algunos consideraron inadecuados para la festividad. En 2024, la organización «Unidad contra la Injusticia» pidió mayor coherencia en la instalación de los adornos luminosos, criticando especialmente la presencia de la Mano de Fátima. Este año, la discusión se centra en la desigualdad del reparto y la falta de consulta con los vecinos antes de la instalación.
Inauguración festiva
Este año, la ciudad ha instalado 97 arcos luminosos distribuidos en diferentes puntos, además de siete letreros con la frase «Feliz Ramadán». Se ha colocado iluminación especial en mezquitas, además de 400 metros de guirnaldas decorativas para embellecer las principales zonas de celebración. En el conocido barrio de Hadú, se ha dispuesto un montaje especial que representa el ciclo lunar, elemento fundamental para determinar el inicio y fin del mes sagrado para los musulmanes.
Recientemente, el presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta, Juan Vivas, encabezó el acto oficial de encendido de las luces en la barriada de San José. El evento reunió a numerosos vecinos y dio paso a actividades culturales. Estos encuentros, que según las autoridades buscan reforzar la imagen de Ceuta como un lugar de convivencia y diversidad cultural, generó en algunos el efecto contrario. Mientras algunos celebraron el preámbulo de la festividad, otros consideran que la falta de equidad en la iluminación empaña el mensaje de unidad y respeto. Desde distintas barriadas, se insiste en la necesidad de establecer criterios claros y consensuados para evitar desigualdades.
Un debate que alcanza a Melilla
La polémica por la iluminación de Ramadán no es exclusiva de Ceuta. En Melilla, la situación también ha generado controversia en otro sentido. La asociación Cepromel, que representa a los comerciantes del Rastro, ha criticado la instalación de luces en ciertas calles comerciales, alegando que afecta negativamente a los negocios de la zona.
Según los comerciantes, tras meses de obras que han reducido el tráfico y el acceso a la zona, la instalación del alumbrado ha supuesto una nueva limitación. Finalmente, tras las quejas, la Consejería de Cultura ha decidido reducir el tramo de iluminación en esta vía y permitir la circulación de vehículos bajo los arcos luminosos.