El PSOE de Melilla reclama mayor protagonismo del Ramadán en la ciudad
Los socialistas advierten que restringir la celebración a una sola zona afecta la diversidad cultural y la cohesión social

Celebración del Ramadán en Melilla | Ilies Amar / Europa Press
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Melilla ha instado al Gobierno local a otorgar mayor relevancia a la celebración del Ramadán, igualándola a otras festividades en la ciudad autónoma española. Según los socialistas, la programación de actividades y la instalación de iluminación festiva no deberían restringirse exclusivamente al barrio central del Rastro, sino extenderse a otros puntos estratégicos del núcleo urbano.
El secretario de Cultura del PSOE en Melilla, Riduan Moh, ha expresado su descontento con la manera en que se ha organizado este año la festividad, señalando que el Ramadán es una celebración fundamental no solo para la comunidad musulmana, sino para toda la sociedad melillense. A su juicio, debería recibir un tratamiento similar al de otras festividades religiosas y culturales que se conmemoran en la ciudad.
Los socialistas han denunciado que, a diferencia de otros años en los que el Ramadán contó con presencia en distintas zonas de la ciudad, en esta ocasión la programación se ha limitado exclusivamente al barrio del Rastro. Moh ha argumentado que esta decisión supone un retroceso en la apuesta por la interculturalidad y la convivencia, valores que, según él, el PSOE defiende con hechos.
Según el dirigente socialista, restringir la iluminación festiva y las actividades a un solo barrio implica una visión segmentada de la sociedad melillense. Ha aprovechado la oportunidad para sacar pecho en torno la gestión de su partido en años anteriores, donde según explica, las celebraciones se llevaron a cabo en otras zonas claves de la ciudad promoviendo así la integración de la festividad.
Una celebración «de todos»
El PSOE considera que limitar la celebración del Ramadán a una única zona no solo perjudica la visibilidad del evento, sino que también impide que un mayor número de ciudadanos pueda participar en él. Moh ha subrayado la importancia de que las festividades reflejen el carácter multicultural de Melilla, permitiendo que cada grupo religioso y cultural tenga espacios adecuados para su expresión.
En este sentido, ha recalcado la necesidad de dotar al centro de la ciudad de espacios destinados a la celebración del Ramadán, como sucede con otras festividades. Además, ha insistido en la importancia de que el sector comercial también se vea beneficiado por la dinamización de distintas zonas durante estas fechas.
Riduan Moh ha acusado a los dirigentes del Partido Popular de aplicar una política que segmenta las celebraciones en la ciudad. Según él, la actual administración no está fomentando una convivencia real. Ha hecho hincapié en que la gestión actual está reduciendo el impacto de eventos como el Ramadán, restringiéndolos a áreas concretas y limitando su alcance.
Polémicas recientes
La crítica del PSOE se ha producido en un contexto político marcado por recientes controversias. Desde VOX, su líder en Melilla, José Miguel Tasende, ha acusado a los socialistas de instrumentalizar las festividades religiosas con fines políticos. En particular, ha cuestionado la exhibición de latas con el logo de Palestina durante una ruptura de ayuno organizada por el PSOE, argumentando que estas acciones solo contribuyen a generar divisiones y a importar conflictos ajenos a la ciudad.
En paralelo, el PSOE ha decidido posponer su congreso regional hasta después de Semana Santa, con la intención de que sus militantes puedan celebrar tanto el Ramadán como la Semana Santa. Este aplazamiento también ha sido interpretado desde diferentes perspectivas para los melillenses e incluso para propios miembros del PSOE.
Como informó recientemente THE OBJECTIVE, el malestar sobre la visibilidad del Ramadán en Melilla encuentra paralelismos con la situación en Ceuta, donde la distribución de la iluminación especial también ha causado inquietud en algunos sectores de la población. Mientras que hay zonas disfrutan de una decoración llamativa y vistosa, otras han denunciado la colocación de luces de manera arbitraria o insuficiente.
En Ceuta, el barrio de Hadú ha sido uno de los más beneficiados con una instalación especial que representa el ciclo lunar, fundamental para la determinación del inicio y fin del Ramadán. Sin embargo, otros barrios han expresado su descontento por lo que consideran un trato desigual por parte de la administración local.