Castilla y León registró 852.720 citas médicas perdidas en 2024
El absentismo se concentró en Burgos, Valladolid y Salamanca, con impacto en consultas y operaciones

Hospital Universitario de Burgos (HUBU). | Sacyl
En 2024, los centros sanitarios públicos de Castilla y León contabilizaron 852.720 citas médicas no atendidas. Las ausencias afectaron a Atención Primaria, consultas hospitalarias y cirugías programadas, con un impacto directo en la gestión sanitaria y en las listas de espera, tal y como recalcan las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE.
Burgos, Valladolid y Salamanca lideran el absentismo en Atención Primaria
Los datos oficiales indican que, en Atención Primaria —consultas con médico de familia, pediatra o enfermería—, se programaron 23.586.954 citas en 2024. De ellas, 752.932 no llegaron a realizarse porque el paciente no acudió. Burgos registró 111.524 ausencias, seguida de Valladolid Oeste (89.556), Salamanca (87.612), Valladolid Este (87.376) y León (81.474). El resto de provincias oscilaron entre las 33.153 ausencias de Soria y las 65.090 de Ávila.

99.318 pacientes no acudieron a su primera cita hospitalaria
En Atención Hospitalaria, 99.318 personas —el 7% del total de primeras consultas programadas— no asistieron a su cita en alguno de los 14 hospitales públicos. El Complejo Asistencial Universitario de Salamanca registró 12.275 ausencias, el Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid 11.699 y el de León 10.760. Medicina Nuclear encabezó el absentismo por especialidad, con un 29% de inasistencia, seguida de Psiquiatría (16%) y Ginecología (10%).
470 operaciones programadas no se realizaron por inasistencia
En 2024, 470 pacientes no se presentaron a su intervención quirúrgica, lo que supone un 0,3% del total. Burgos (82), Ávila (76) y el Clínico Universitario de Valladolid (63) concentraron el mayor número de operaciones perdidas. Entre las especialidades más afectadas se situaron Cirugía Pediátrica (0,7% de ausencias), Cirugía General y del Aparato Digestivo (0,5%) y Traumatología (0,5%). Sanidad advierte que esta falta de asistencia retrasa la atención, reduce la eficiencia de los recursos y puede empeorar el estado de salud de los pacientes.