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Comunidad Valenciana

La Generalitat critica el abandono de Sánchez de la crisis de salud mental tras la dana

El Gobierno vuelve a remitir el convenio diez días después de su firma inicial debido a errores en la redacción

La Generalitat critica el abandono de Sánchez de la crisis de salud mental tras la dana

El presidente de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón. | Rober Solsona (Europa Press)

La gestión de la crisis sanitaria derivada de la devastadora dana que afectó a decenas de municipios de la provincia de Valencia continúa siendo un punto de fricción entre el Gobierno autonómico y el central. El conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha elevado este lunes el tono de sus críticas hacia la administración de Pedro Sánchez por lo que califica de «gestión inadmisible» en cuanto a las Unidades de Emergencia de Salud Mental (USME) prometidas a los afectados.

En noviembre, el Gobierno anunció con gran despliegue la creación de 14 equipos especializados destinados a abordar las secuelas psicológicas de la dana, que provocó más de 220 fallecidos, grandes daños materiales y también un profundo impacto emocional en miles de valencianos. Sin embargo, cuatro meses más tarde, la realidad dista mucho de los anuncios: no solo no se ha materializado la llegada de dichos equipos, sino que tampoco existen garantías claras de que estarán en funcionamiento en marzo.

«Esto es una auténtica falta de consideración y respeto a todos los valencianos», afirmó Gómez en declaraciones a los medios, donde detalló las ineficiencias y la falta de compromiso del Gobierno de Sánchez. Cabe recordar que la ministra de Sanidad viajó a Valencia en diciembre para promover dichas unidades de salud mental de emergencia. No obstante, el convenio necesario para formalizar la colaboración entre el gobierno y la Generalitat no fue remitido hasta el 24 de febrero de 2025, más de tres meses después del anuncio inicial.

La respuesta del Ejecutivo autonómico fue rápida, en un intento por no retrasar la puesta en marcha de los equipos. Sin embargo, el proceso sufrió un nuevo contratiempo cuando el pasado viernes, diez días después de haber remitido el convenio firmado al ministerio, este fue devuelto para una nueva firma debido a errores en la redacción anterior. «¿Dónde están esos recursos? ¿Dónde están los equipos? ¿Dónde está el compromiso del Gobierno de Sánchez? Lo que hay es un retraso injustificable y una falta absoluta de respeto institucional», ha añadido Gómez.

Esta situación ha generado gran preocupación entre los responsables autonómicos y los ciudadanos afectados, dado que la capacidad de respuesta adecuada a las necesidades psicológicas emergentes tras la dana resulta crucial. La falta de unidades especializadas ha obligado a la Generalitat a tomar medidas propias, como el despliegue de 17 equipos de profesionales que incluyen psiquiatras, psicólogos y trabajadores sociales. Además, en las fechas posteriores a la tragedia se estableció un centro de atención en Feria Valencia, recinto que fue designado para albergar los cuerpos de las víctimas mortales del desastre.

El conseller también señaló que, ante la inacción del Gobierno, la Generalitat ha tenido que incrementar la financiación de las Unidades de Prevención Comunitaria de las Conductas Adictivas para abordar el aumento en el consumo de sustancias y trastornos adictivos, una complicación previsible que el Gobierno de España ha decidido ignorar.

La crítica de Marciano Gómez no se limita a la tardanza en la puesta en marcha de las USME, sino que también abarca la lentitud general en las respuestas a la emergencia. Aunque se esperaba que las unidades estuvieran operativas en febrero, el Ministerio solo ha indicado que «espera» que puedan desplegarse a lo largo de este mes, sin ofrecer una garantía clara de cumplimiento.

Fuentes de la Generalitat destacan que la crisis de salud mental no solo es un problema de gestión administrativa, sino que refleja una falta de sensibilidad hacia las víctimas de desastres naturales, que requieren apoyo psicológico para superar el trauma. 

El enfrentamiento entre el gobierno y la Generalitat Valenciana en este asunto pone de relieve la necesidad de una mejor coordinación y rapidez en la respuesta a emergencias, así como de un compromiso real y efectivo que vaya más allá de las promesas y las presentaciones en prensa. Mientras tanto, los ciudadanos siguen esperando acciones concretas que les ayuden a recuperarse de uno de los eventos más traumáticos en la historia reciente de la región.

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