149 ciudades españolas tendrán zonas de bajas emisiones desde 2023
El próximo año deberán entrar en vigor estas medidas anticontaminación en aquellas localidades con más de 50.000 habitantes
Madrid 360 es el nombre de la zona de bajas emisiones de la ciudad de Madrid | Eduardo Parra (Europa Press)
Las zonas de bajas emisiones están ya vigentes tanto en Madrid como en Barcelona, que son las dos primeras ciudades en llevarlas a cabo. Por el momento, en Barcelona están a la espera de suspensión debido a una sentencia del Tribunal de Justicia de Cataluña, aunque esta está a la espera del recurso del Ayuntamiento por lo que aún no se ha llevado a cabo.
En la capital catalana, por el momento, no pueden circular los vehículos sin etiqueta los días laborables entre las 7:00 horas y las 20:00 horas dentro de la denominada como Área Metropolitana de Barcelona.
Esta es la situación en Madrid
En Madrid, aquellos coches que no tienen etiqueta, también conocidos como etiqueta A, no pueden circular en la zona dentro del cinturón de la M-30, a excepción de los residentes empadronados en la capital. Esta limitación estaba en fase de aviso y no empezó a estar en funcionamiento hasta el pasado uno de mayo, cuando los infractores empezaron a recibir multas de 200 euros. Esta zona está controlada no solo por los propios agentes sino también mediante cámaras.
Además de esta, existe otra parte denominada Zona de Bajas Emisiones de Especial Protección. Aquí las medidas son aún más restrictivas, e incluso los coches con etiqueta deben ir a un parking concertado. La normativa será aún más restrictiva para 2023, cuando incluirá también la M-30. Y para 2024 quedará prohibida la entrada de coches sin etiqueta, incluso los residentes.
Guía de la FEMP para establecer la Zona de Bajas Emisiones
La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) presentó en junio de 2021, junto con la Dirección General de Tráfico (DGT) y el Área Metropolitano de Barcelona, la guía técnica para implantar zonas de bajas emisiones. Como no había un reglamento oficial, este fue el primer intento de establecer un orden en cuanto a la creación de estas áreas.
Un año después de esto, aún sigue sin haber una norma que establezca cómo deben diseñarse estas zonas. Lo único que hay es la placa que ha creado la DGT para poder avisar a los conductores.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico presentó en abril el proyecto de real decreto que regulará la creación de estas zonas de bajas emisiones. Sin embargo, el texto sigue sin aprobar. El borrador establece que estas áreas «se señalizarán de forma clara y reconocible en los puntos de acceso a la misma, utilizando para ello la señal […] aprobada por la DGT». Además, también jerarquiza los modos de transporte, y los automóviles particulares están en el último lugar.
Ciudades en las que habrá Zona de Bajas Emisiones
Según marca la Ley de Cambio Climático, Madrid y Barcelona dejarán de ser las únicas ciudades con delimitaciones en la circulación de los vehículos. A partir de 2023, todas las poblaciones de más de 50.000 habitantes deberán poner en marcha también una Zona de Bajas Emisiones, lo que afectará a 149 ciudades.
Estas nuevas restricciones afectarán a, aproximadamente, 25 millones de vehículos entre las diferentes localidades. Además, también deberán hacerlo aquellas de más de 20.000 si presentan niveles excesivos de contaminación.
Más allá de las sugerencias de la FEMP, los diferentes ayuntamientos podrán establecer libremente los criterios, ya que el proyecto de real decreto no presenta unas pautas concretas. Lo único que sí especifica es que el tamaño de la zona delimitada y la población expuesta «deben ser significativos y suficientes» para que mejore «la calidad del aire» y que se deben fomentar «modos de transporte más sostenibles». Ya hay muchos ayuntamientos que han empezado con la planificación pero, a pesar de ello, su avance depende de la norma.
