Una revista italiana se rinde al fenómeno Ayuso: «Es una Thatcher, pero solo en parte»

La revista italiana Tempi ha dedicado una amplia cobertura a lo que llama el «fenómeno Ayuso». En su nuevo número, al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, la revista busca comprender las razones del éxito electoral y de popularidad de la política madrileña. En su investigación, Tempi ofrece a miembros del equipo de Isabel Díaz Ayuso como el periodista Rafael Núñez Huesca analizar el método con el que la presidenta de Madrid ha logrado en las últimas elecciones autonómicas cosechar una de cada dos papeletas. Después de The Economist, que calificó a Ayuso de «Lady Liberty«, ahora es la prensa italiana la que centra el foco en lo que califica de «estrella naciente» de todo el centro-derecha europeo.

La revista italiana concede a Ayuso hasta seis páginas, con una introducción firmada por un periodista de la redacción con sede en Milán, otro artículo redactado por Núñez Huesca y una entrevista al consejero de Economía Javier Fernández Lasquetty. «Liberal, trabajadora y sin complejos», escribe la revista italiana para introducir la figura de Ayuso: «Pesadilla de la izquierda española», ganadora del pulso interno en el Partido Popular y «responsable del fin político del grillino Pablo Iglesias».

La revista italiana destaca la relación de Ayuso con el expresidente José María Aznar, aunque también define las diferencias con el exmandatario. Concretamente, en la relación con Vox: «Libre, carismática, sin prejuicio ni miedo a la hora de dialogar con una derecha que quiere reconducir en el perímetro popular». Hoy Díaz Ayuso respalda a Alberto Núñez Feijóo, subraya la revista italiana, aunque destaca cómo sigue siendo el «principal dolor de cabeza para Pedro Sánchez».

Marca personal de 2.500 millones

El periodista Núñez-Huesca, que trabaja en el equipo de Ayuso, ofrece también su punto de vista sobre la «Isabel de Madrid», en el que señala algunos de los secretos de su método comunicativo. Por ejemplo, la alergia por las palabras grandilocuentes. Nada de «transversalidad, sinergia o multidisciplinar…No las quiere porque no las utiliza. Su estilo simple la hace creíble, no porque sea simple, sino porque es verdadera y le permite tener acceso directo con personas que habían dado las espaldas a la política».

Otro dato esgrimido por el equipo de Ayuso es el «valor de su marca personal». El brand Ayuso alcanzaría los 2.500 millones de euros, algo único que se traduce en máxima audiencia en los programas de televisión, aplausos durante sus mítines, ovaciones en los conciertos y eventos deportivos (uno de los últimos, el Open de Tenis de Madrid). «Este fenómeno ha sorprendido a todos los expertos: nadie se esperaba que una mujer joven y prácticamente desconocida revolucionaría el panorama político español», reflexiona Núñez Huesca.

«No soy Thatcher, soy de Chamberí»

El fenómeno Ayuso abarca también a los símbolos del perfil del representante del centro-derecha. «No tiene títulos nobiliarios ni inmobiliarios; tiene un coche viejo, un perro y dos tatuajes. Su figura trasciende las fronteras ideológicas y representa un fenómeno popular», explican desde la sala de máquinas del Gobierno regional. Hasta lograr que en Europa miren a la dirigente cada vez con mayor interés, sobre todo por su gestión durante la pandemia.

La «defensa de las libertades civiles» (como su rechazo a las restricciones más duras y la apelación a la responsabilidad de los ciudadanos) ha sido otra clave del éxito de su imagen. Un modelo se ha traducido también en propulsión económica, frente a la caída de Barcelona, recuerda la revista italiana.

De ahí que no falten las comparaciones ilustres. El Washington Post vio en Ayuso una nueva Margaret Thatcher, por sus raíces humildes y firmeza en imponerse en un mundo dominado por los hombres. Pero el artículo recogido por la revista Tempi matiza esta lectura: «La verdad es que la comparativa funciona solo en parte. Sin duda el discurso económico de ambas es abiertamente liberal (…) Las dos también comparten una capacidad de trabajar fuera de lo común. (…) Pero la principal diferencia se halla en el temperamento humano. Frente a la mueca altiva de la británica, el calor y la sonrisa de la española. Cuando al portero del Real Madrid Iker Casillas se le atribuyó la calidad de ‘galáctico’, él contestó: no soy galáctico, soy de Móstoles. La presidenta madrileña contestaría de la misma manera: no soy Margaret Thatcher, soy de Chamberí».

Interés del motor económico italiano

Cabe señalar que no es la primera vez que la prensa europea, y en concreto la italiana, ha mirado con interés a Ayuso. Su figura penetra sobre todo en la región de Milán, el motor económico italiano y el lugar donde la opinión pública sigue más de cerca a la madrileña. En septiembre de 2021, por ejemplo, el Corriere della Sera llevó a la presidenta en primera página, con el título: «El método de Madrid es unir seguridad y libertad».

En Milán, la fundación Istituto Bruno Leoni le otorgó un premio que antes concedió a Vernon Lomax Smith, Nobel de Economía, y a Mario Vargas Llosa, Nobel de Literatura, entre otros. La relación estrecha entre la Comunidad de Madrid y la sociedad italiana se debía reforzar poco antes de la pandemia con un acto para reconocer la aportación de «italianos ilustres» en la región, que finalmente la pandemia paralizó. Tempi concluye su cobertura del «fenómeno Ayuso» con una entrevista a Javier Fernández Lasquetty, el consejero económico de Ayuso, como demostración del interés del motor económico italiano con el crecimiento de la región.