Oltra reaparece en un debate público cinco meses después de dimitir de sus cargos
La exdirigente de Compromís ha reivindicado que no ha perdido el humor ni la sonrisa desde que dejó sus cargos, el 21 de junio, al ser imputada
La exconsellera Mónica Oltra. | Europa Press
La exvicepresidenta del Gobierno valenciano Mónica Oltra ha protagonizado este martes un debate público en Valencia en torno a la defensa de los derechos sociales, cuando se cumplen ahora cinco meses de su dimisión también como consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas y diputada autonómica.
Precisamente, su sucesora en todos los cargos, Aitana Mas, también de Compromís, ha sido una de las docenas de personas que han abarrotado el centro sociocultural Ca Revolta, en pleno centro histórico, para un debate vespertino que en esta ocasión giraba sobre «Les desigualtats socials: una violació dels drets humans».
A lo largo del acto, que ha durado cerca de dos horas y durante el cual ha sido interrumpida en varias ocasiones con aplausos y gritos de apoyo, Oltra, que es socia de Ca Revolta y ha dicho sentirse «como en casa», ha disertado durante la primera parte sobre diversas cuestiones de actualidad y de repaso de su etapa al frente de la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.
Posteriormente, ha tenido lugar un debate con preguntas y reflexiones de los asistentes, durante el cual Oltra ha reivindicado los siete años de gobierno del Botànic en cuanto a avances sociales.
La exdirigente de Compromís ha reivindicado que no ha perdido el humor ni la sonrisa desde que dejó sus cargos, el 21 de junio, al ser imputada por un juzgado valenciano por maniobrar supuestamente para ocultar un caso de abusos a una menor tutelada por la Generalitat por el que fue condenado su exmarido, en una sentencia que se encuentra recurrida en el Tribunal Supremo.
Oltra ha admitido que lleva cinco meses «out» en cuanto a seguir la prensa o Twitter, ha arremetido contra «la matraca de la okupación», «los ladrones de guante blanco que viven del dinero público» y «la cultura del entuerto» de quienes «viven de la herencia de papá pero no saben distinguir unos alicates».
Además, ha cargado contra el Ministerio del Interior por la gestión que lleva a cabo del asalto a la valla de Melilla, al criticar la «falta total de empatía para dar explicaciones y reconocer que fue un desastre humanitario», y ha añadido: «Si esto lo hubiera hecho un gobierno del PP, ¡arde Troya!».
