El Gobierno elimina de los ministerios los últimos ocho vestigios del franquismo
Exteriores, Agricultura e Industria han desembolsado un total de 273.000 euros en la retirada de los escudos, insignias y placas que quedaban de la dictadura
Ya no hay rastro de vestigios del franquismo en los ministerios del Gobierno de España. Según las resoluciones de información -vía Portal de Transparencia- a las que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, el Ejecutivo, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica de 2007, ha eliminado los últimos ocho remanentes de la dictadura, y para ello ha desembolsado un total de 273.000 euros.
La norma aprobada por el ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero -sustituida por la Ley de Memoria Democrática el pasado mes de octubre- recogía en su artículo 15 que las Administraciones públicas deben tomar «las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura». Y los socialistas han sido prestos en su aplicación.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha sido el que más se ha esmerado en este sentido. En 2009, admiten desde el gabinete, se procedió a la «sustitución de los escudos de las fachadas de las calles de Beneficencia y San Mateo», pero «dadas las características de las obras, los escudos no pudieron retirarse ya que formaban parte de la fachada, siendo por lo tanto demolidos in situ para colocar los nuevos escudos sobre la piedra existente». El coste de la actuación fue de 116.862 euros.
Ya con Luis Planas como jefe del gabinete, en 2020, se retiró «la base de una placa de mármol conmemorativa de la escalera imperial» de la sede del Paseo Infanta Isabel, «en la que ya no figuraban inscripciones». El presupuesto total fue de 3.424 euros.
El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, bajo la denominación, entonces, de Industria, Energía y Turismo, procedió en enero de 2016 a «la retirada del grupo escultórico a Onésimo Redondo». El coste de la actuación, que incluyó el traslado de los elementos, así como la demolición de las pilastras, fue de 65.620,88 euros.
El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital asegura, por último, que «ni en la sede ni en ninguna de sus dependencias se han retirado símbolos de la dictadura franquista desde el año 2007». No obstante, admite que en la sede de la Jefatura Provincial de telecomunicaciones que se encuentra en régimen de arrendamiento, «se retiró un escudo preconstitucional» en 2009. «La retirada del símbolo franquista y los gatos aparejados fueron por cuenta del arrendador del edificio», aclaran en la resolución a la que ha tenido acceso este medio.
Los Ministerios de Sanidad, Consumo, Política Territorial y Universidades aseguran, por otro lado, que no cuentan «con ningún elemento que pueda estar afectado (y, por tanto, que deba retirar) en aplicación de la Ley 52/2007, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura».
«Furia iconoclasta»
Todas estas confesiones han sido arrancadas a los ministerios por el abogado Guillermo Rocafort, que remitió la siguiente solicitud a través del Portal de Transparencia: «Solicito el inventario actualizado de todos los elementos y vestigios del franquismo retirados por ese ministerio desde que se aprobó en 2007 la Ley de Memoria Histórica, el coste individualizado de cada retirada, así como la ubicación actual fuera de los espacios públicos y el departamento responsable de su custodia».
En conversación con este medio, Rocafort califica la retirada de la simbología franquista como una «furia iconoclasta contra los vestigios franquistas en los ministerios de la España del desarrollismo tecnócrata»: «Hemos sufrido una locura iconoclasta contra aquella época, que fue el verdadero motor de nuestro bienestar, y, sin duda, el borrado de esa memoria pretende eliminar un éxito indudable».
El abogado memorialista y autor de El fraude de la Memoria Histórica considera que «la damnatio memoriae o eliminación de la memoria de Franco es uno de los grandes ejes de los proyectos de memoria histórica y democrática de los Gobiernos socialistas, el borrar toda huella de los méritos de un régimen que, a pesar de sus graves restricciones en derechos políticos, es evidente que fue capaz de generar una economía que era la envidia de todo el mundo».
Y el Ministerio de Exteriores
Una información que no ha sido obtenida por Guillermo Rocafort, sino que fue adelantada por THE OBJECTIVE, es la referente a la eliminación de los vestigios franquistas del Ministerio de Exteriores. El pasado mes de septiembre el gabinete de José Manuel Albares retiró los cuatro escudos que aún permanecían en su sede, y lo hizo por 87.913 euros. Así son ocho, en total, los remanentes ministeriales de la dictadura -los últimos- que han sido eliminados por Gobiernos socialistas.