Defensa reparte sobresueldos opacos de hasta el 170% del salario a su personal de confianza
El departamento de Margarita Robles distribuye un complemento de forma discrecional con una instrucción interna de 2018 que nunca ha salido a la luz
La cúpula del Ministerio de Defensa reparte desde 2018 a oficiales que trabajan en su sede central un plus salarial —el Complemento de Dedicación Especial (CDE)— que en algunos casos ha superado el 170% del sueldo base, cuando un general del Ejército lo tiene topado en el 70%, según la documentación a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. El reparto de este incentivo se hace de forma discrecional gracias a una instrucción interna que nunca ha salido a la luz, pese a que las asociaciones de militares la han reclamado en numerosas ocasiones y pese a que el real decreto 1314/2005 sobre retribuciones en las Fuerzas Armadas impide superar el listón del 130% con este plus salarial.
Margarita Robles accedió al cargo en junio de 2018 y al mes siguiente, concretamente el 23 de julio, la Subsecretaría de Defensa aprobó la Instrucción Comunicada 48/2018, cuyo punto cuarto ha permitido desde entonces abonar el CDE en una cuantía «superior al 110%» del sueldo base al personal laboral destinado «en los centros y organismos no pertenecientes a la estructura de los Ejércitos». Es decir, a los oficiales de los Cuerpos Comunes que trabajan en la sede del ministerio ubicada junto al Paseo de la Castellana y en las subdelegaciones repartidas por todo el territorio nacional.
Esta instrucción es secreta y sigue vigente a día de hoy, según fuentes militares consultadas por este periódico. Al tener el carácter de «comunicada», el documento no es de carácter público dentro del ministerio y solo conocen parte de su contenido —como su nombre indica— aquellos a los que se comunica la retribución monetaria. Cada mes, el subsecretario de turno tiene que firmar los CDE que ‘engordan’ la nómina de los destinatarios.
El reparto se hace con un criterio arbitrario y opaco. Primero, porque no hay necesidad de guiarse por el escalafón, tal y como se hace en los ejércitos de Tierra y del Aire o en la Armada, a la hora de repartir este plus salarial. Así, un teniente coronel que trabaja en la sede central del ministerio puede recibir un CDE más alto que un coronel destinado en el despacho contiguo porque así lo ha creído oportuno su superior jerárquico. «Son gratificaciones con las que ganar lealtades y voluntades», advierte un mando.
El incentivo del CDE no tiene un tope en Defensa
Además, los ‘premiados’ solo conocen la cuantía que le ha tocado a cada uno cuando reciben la nómina -nunca la de los demás- y al no haber un tope, unos meses pueden recibir un CDE del 110% del sueldo base… y otros puede que sea del 140% o del 150%, por poner dos ejemplos, según estime el alto cargo tras analizar el rendimiento laboral de sus subordinados. Las citadas fuentes subrayan que, en ocasiones, la cúpula del ministerio ha firmado pluses de este tipo que superaron en un 200% la retribución base de la persona que lo recibió, pero este diario no ha podido corroborar este extremo en la documentación.
THE OBJECTIVE sí que ha tenido acceso a una orden con un CDE ligeramente inferior que fue firmada en marzo de 2021 por la entonces subsecretaria, Amparo Valcarce, para ser remitida a la directora general de Personal en aquel momento, Adoración Mateos. Se da la circunstancia de que en mayo de 2022 ambas fueron ascendidas por Robles a los puestos de secretaria de Estado y subsecretaria dentro del Ministerio de Defensa, respectivamente.
En el escrito de Valcarce (ver abajo) aparecen los nombres de los tres beneficiados del departamento de Mateos a los que se concedió esta gratificación en la nómina de aquel mes: el teniente coronel auditor José Vázquez Pedreño, actual jefe del órgano de dirección de la Dirección General de Personal, que percibió 2.119 euros por el CDE (el 170% de su sueldo base en aquel momento ); el coronel Carlos Benítez Giménez, que sigue en la actualidad de subdirector general de Planificación y Costes de Recursos Humanos, al que se transfirieron 1.620 euros por este concepto (un plus del 160%); y el comandante Óscar Fabra Rodríguez, que recibió la cifra redonda de 1.400 euros (es decir, del 145%).
El caso de Vázquez Pedreño es el más llamativo. Su complemento de dedicación especial es superior al de Benítez Jiménez pese a estar por debajo de él en el escalafón. Además, su CDE de 2.119 euros supuso alrededor del 170% del sueldo base que tenía en 2021 como teniente coronel. Hay que tener en cuenta que un general de brigada del Ejército de Tierra destinado en el País Vasco o Navarra, dos lugares nada fáciles para un mando y con un tratamiento especial dentro de las Fuerzas Armadas en cuanto a pluses, recibía en aquel momento un máximo de 1.028,71 euros por este concepto, lo que equivalía al 70% de su asignación base, según una tabla que la Subsecretaría elaboró en marzo de 2021 para la Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME).
Si la comparación se hace con los tenientes coroneles allí destinados, la disparidad es aún mayor, ya que la horquilla fijada para este colectivo iba de un mínimo de 277 euros a un máximo de 971, por lo que Vázquez Pedreño recibió en Madrid un CDE que duplicaba con creces el máximo que tenían sus compañeros de escala en el País Vasco o Navarra. Las citadas fuentes indican que Valcarce y Mateos han llegado a entregar a este teniente coronel un CDE superior a los 3.000 euros en algunos meses.
Respuesta del Gobierno
Fuentes próximas a la ministra Robles indican a THE OBJECTIVE que el reparto del CDE en esas cuantías y porcentajes es «completamente legal» y cuenta con el visto bueno pertinente del Ministerio de Hacienda. Así, el departamento de María Jesús Montero autoriza al inicio de cada ejercicio «un montante global» para cumplir con la citada Instrucción Comunicada 48/2018, y luego es la cúpula de la Subsecretaría la que decide cómo repartirlo mes a mes entre los subordinados. De ahí que en la orden de Valcarce a Mateos se incida que la autorización del pago de los CDE «estará supeditada a la existencia de crédito disponible para este incentivo por la Autoridad correspondiente y no conllevará un incremento del crédito asignado para todo el ejercicio».
Desde Ciudadanos de uniforme, un chat anónimo de Telegram en el que se denuncian irregularidades en las Fuerzas Armadas, se colocó el viernes el asunto de los complementos de dedicación especial en el primer lugar de una lista de cinco recomendaciones «para tener un Ejército más efectivo o eficiente». «Son cantidades en la nómina por rendimiento que no son lineales por empleos ni tienen la misma frecuencia, sino exponenciales y muchísimo más frecuentes conforme sube el empleo del que la cobra. En resumen, el 20% del personal cobra el 80% de todos los CDE todos los meses y el 80% restante se reparten el resto y lo cobran de vez en cuando», se indicó desde este canal.