Un activista 'indepe' denuncia que una policía se infiltró en su entorno: «Era el amor de mi vida»
Un miembro de los CDR afirma que tuvo una relación con una agente de la Policía Nacional sin conocer su identidad
El activista 'indepe' denuncia el presunto espionaje de una policía infiltrada | @21raons
Un miembro de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) ha relatado un presunto nuevo caso de infiltración policial en estos movimientos sociales e independentistas que, tras el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, perpetraron actos vandálicos y amagaron con acciones violentas de mayor magnitud. Se trata, en este caso, de una mujer de la Policía Nacional, a quien el afectado define como «el amor de su vida» durante el año que mantuvieron una relación. En este tiempo, el activista desconocía su verdadera identidad. Ahora se siente traicionado y lo ve un caso de «tortura».
El digital La Directa ha desvelado este presunto nuevo caso de espionaje policial que se une al de las cinco mujeres -de un total de ocho- que llevaron ante la justicia las relaciones voluntarias que también mantuvieron con otro policía infiltrado por considerar que fue un caso de «abuso sexual y tortura» al desconocer que en realidad era un policía. En concreto, le acusaron de los delitos de abusos sexuales continuados, tortura, revelación de secretos e impedimento del ejercicio de derechos cívicos.
Como estas activistas, este miembro de los CDR también considera que lo que ha vivido es un caso de «tortura»: «me ha engañado a mi, a mi hermana, a mi madre, a mi padre y a todo mi entorno. Esto es tortura, es un nivel inimaginable de tortura», explica en el reportaje publicado por el digital catalán. No obstante, no especifica si tomará acciones legales.
Los casos que hasta la fecha se han llevado al juzgado están representados por el colectivo Irídia, vinculado a los sectores de la izquierda radical y subvencionado por el Govern y otras instituciones catalanas con 500.000 euros. También Òmnium Cultural se querelló ante la Audiencia Nacional por otros casos similares de infiltración en entidades juveniles independentistas. Y se ha convertido en un asunto en las agendas de los partidos independentistas para atacar al Estado.
El grupo de ERC en el Congreso, conjuntamente con EH Bildu, Junts per Catalunya, la CUP, BNG y PDeCAT, pidieron explicaciones al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, sobre estas infiltraciones policiales. Pero el titular de Interior justificó estas operaciones: «Estamos en un estado de derecho y las funciones de las fuerzas de seguridad del Estado son garantizar la seguridad y derechos y libertades del conjunto de ciudadanos».
Tres años infiltrada
La policía supuestamente infiltrada habría estado durante tres años investigando a estos colectivos en Gerona y Salt. Según la información de La Directa, la agente se graduó en Criminología por la Universidad Pompeu Fabra y se formó en la escuela de policías de Ávila en 2017 y 2018, junto a otros de los policías infiltrados en otros grupos independentistas.
A inicios de 2020 llegó Gerona procedente de Palma de Mallorca. La Policía Nacional que investigaba las corrientes más radicales del movimiento independentista durante los años más críticos del procés independentista, con el fin de evitar que estos grupúsculos incurrieran en acciones violentas.
La agente llegó a Gerona con apenas 30 años y paulatinamente se integró en la vida social de la ciudad hasta mantener una relación sentimental con uno de los activistas más destacados de la ciudad. Llegaron a compartir vivienda y hacer varios viajes en Palma o el sur de Francia.
