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Política

Aguirre pide al PP acercarse a Vox: «No hay que hacer tantos llamamientos a la izquierda»

La expresidenta de la Comunidad de Madrid ha defendido que el PP debería tratar de reunir al centroderecha

La expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.

La expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha defendido que el Partido Popular (PP) debería de haber dejado de «hacer tantos llamamientos a la izquierda» durante la campaña y, en su lugar, decantarse por apoyar «al único partido que ha ofrecido desde el primer momento su apoyo a Núñez Feijóo», Vox.

Esperanza Aguirre ha intervenido en directo en el programa ‘Cuatro al día’ para aclarar las declaraciones realizadas en THE OBJECTIVE junto a Guadalupe Sánchez y Álvaro Nieto, que tanta polémica han desatado. En la entrevista, la exmandataria ha criticado la campaña realizada por el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, en la que los ‘populares’ afirmaron hasta el último momento que al primer partido que contactarían tras ganar los comicios sería el PSOE. «Hemos dicho que nos gusta más Page que Abascal», comentaba.

La expresidenta ha sostenido su opinión afirmando que «debe retomarse la estrategia de Aznar, de unir a liberales, centroderecha, conservadores y socialdemócratas». Además, se posiciona y añade que «hemos comprado el marco ideológico de la izquierda». Ante las recurrentes declaraciones del PSOE autoproclamándose ganadores de las elecciones, Aguirre ha calificado como «una vergüenza que hayamos visto a Pedro Sánchez decir que ‘somos muchísimos mas’».

A su juicio, Vox es un partido «perfectamente constitucional», que tiene opiniones diferentes a las de los ‘populares’ pero que han de defender, ya que eso beneficiará a España, siendo mucho mejor este pacto que el del PSOE con Bildu.

Sobre las opciones de pacto con los independentistas, la expresidenta ha declarado que «en este momento, por primera vez, la vez que menos votos han tenido porque el PSC ha cogido todas sus reivindicaciones».

Aguirre apuntaba dos «errores de libro» en la campaña para el 23-J, uno del PP en su estrategia hacia Vox y el segundo de los de Santiago Abascal, que «no han estado bien» en la campaña. La expresidenta madrileña criticó que Feijóo dijese durante el tramo final de campaña «que prefería al PSOE que a Vox». «Eso creo que es muy difícil de vender al electorado del PP, que en gran parte es el mismo de Vox», afea Aguirre, que cree que es «una incongruencia» decir que se va a «derogar el sanchismo» a la vez que pides el voto a «los sanchistas».

En este contexto, defendía que el PP ha de seguir la estrategia de su expresidente José María Aznar de representar a todo el electorado que esté a la derecha del PSOE y sugiere que su futuro deberá estar en manos de Díaz Ayuso. «No seré yo la que te lleve la contraria», apuntaba cuando la abogada Guadalupe Sánchez reivindicó que eso no lo pueden hacer los ‘populares’ con Feijóo al frente y tiene que ser la presidenta madrileña quien asuma la responsabilidad.

4 comentarios
  1. PresuntoImplicado

    ¡Cómo son los liberales! La sinvergüenza de Aguirre, esa delincuente que se fue de rositas, pidiendo de rodillas el acercamiento a VOVOX, los fascistas que salieron del PP. Qué asco dais.

  2. 1Ruiz

    Vamos a ver… El PSOE se acerca a la extrema izquierda pero eso no quiere decir que le vaya bien (acaba de perder las putas elecciones, por favor…) así que pensar que la idiotez que hace Sánchez es buena idea en especular para el PP es un análisis equivocado.
    A lo mejor hay que tener paciencia que es una cosa que no se da en política y, mira, no deja de ser una virtud.
    Vox es un partido ridículo y Aguirre una momia narcisista.

  3. Fedeguico

    Si el PP se relacionara con Vox igual que el PSOE con los comunistas -ojo al clamoroso desequilibrio, que estos últimos han conseguido blanquear a lo peor de lo peor con toda tranquilidad-, otro gallo cantaría. Los peperos siempre ansiosos por emular a los sociatas menos en lo único bueno que muestran, o sea, en su audacia y confianza en sí mismos.
    Los sociatas nunca temen movilizar a la derecha porque dan por hecho que más movilizados ya no podemos estar. Pues métanselo en la cabeza: la izquierda ha alcanzado su techo, pero los que les quedan son fanáticos en extremo e irrecuperables contemporizando; como no cambien motu proprio, no habrá argumento ni apelaciones morales que les muevan si no se les riñe como si de adolescentes se tratara, en vez de pretender ser el amiguete del hijo descarriado.

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