Yolanda Díaz agasajó a Puigdemont con su 'look' de las grandes ocasiones
Utilizó el mismo atuendo, cargado de simbolismo, en su visita al Vaticano y el día que asumió la vicepresidencia
Yolanda Díaz en su estreno como vicepresidenta (i) y en sus reuniones con Carles Puigdemont y el Papa Francisco. | THE OBJECTIVE/Agencias
La estética y la moda son, desde tiempos lejanos, potentes herramientas de comunicación política. Más allá del protocolo. Representan formas de transmitir mensajes concretos que en ocasiones parecen pasar desapercibidos, pero que también están cargados de simbolismo. El reciente encuentro en Bruselas entre Yolanda Díaz y Carles Puigdemont es buena muestra de ello. La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo vistió en esa reunión el mismo atuendo con el que acudió a visitar al Papa Francisco en el Vaticano a finales del pasado año. Y también muy similar al que usó en marzo de 2021, cuando asumió la cartera de la vicepresidencia tercera del Gobierno. Algo que, según expertos en moda y politólogos, no habría sido casual, sino una forma de transmitir seriedad y dar a la reunión con Puigdemont una entidad similar a la que tuvo con el Sumo Pontífice.
Reconocida por la amplitud de su fondo de armario y la elegancia de su vestuario, Díaz eligió para reunirse con Puigdemont un look que parece reservar para las grandes ocasiones. La principal coincidencia es la blusa blanca con lazada al cuello y jaretas con manga francesa abullonada. Una prenda que ya ocasionó cierta polémica por motivos de protocolo durante su audiencia con el Papa, donde tuvo que cubrirse con una americana de color negro para cumplir con el protocolo del Vaticano. Quien viste de blanco es el sumo pontífice. Es un color reservado en el Vaticano exclusivamente a las reinas católicas o consortes de los monarcas católicos, el conocido como privilège du blanc.
Igual que en su audiencia con el Papa, durante el encuentro con Puigdemont la líder de Sumar combinó la blusa blanca y su lazada estilo Lavallière con pantalones palazzo neutros de color oscuro para transmitir sobriedad y seriedad. Según expertos en moda, se trata de un atuendo muy masculino que Díaz refuerza además con el mismo tipo de peinado, recogido con un moño. Un detalle que también se utilizaría para transmitir masculinidad, seriedad y confianza a sus interlocutores, indican los expertos, y que contrasta con los peinados sueltos que suele lucir durante sus intervenciones en el Congreso o en el Consejo de Ministros.
Blanco para desmarcase de Podemos
En su libro Yolanda Díaz: la seducción del poder, el periodista Luca Costantini dedica uno de sus capítulos a la transformación del estilo de la vicepresidenta desde su entrada en el Gobierno y también revela su preferencia por el color blanco para las grandes ocasiones. Por ejemplo, el día que recibió la cartera ministerial y como vicepresidenta del Gobierno. Posó en las escalinatas de Moncloa con ella ante los fotógrafos. Según el libro mencionado, aquel día eligió el blanco para transmitir confianza y tranquilidad, algo que desde Podemos se interpretó entonces como una manera de marcar diferencias con la formación morada también en lo simbólico y cromático.
En aquella ocasión también optó por el peinado recogido. E igual que en sus reuniones con Puigdemont y con el Papa usó la lazada Lavallière. Una complemento cargado de historia y de simbolismo, que va mucho más allá de una lazada decorativa en el cuello. Tiene su origen en Francia en el siglo XIX. Inicialmente era un complemento masculino utilizado por la nobleza y la burguesía, pero a partir de los años 30 de ese siglo, con la aparición de la corbata y la pajarita, pasó paulatinamente a ser un complemento usado por las mujeres intelectuales del mundo de la cultura y vinculadas a la izquierda en lo político.
Las grandes casas de moda fueron incorporándolo a su catálogo a lo largo del siglo XX. Y dejaría de ser una prenda vinculada a la izquierda en los años 80 del siglo pasado, cuando Margaret Thatcher hizo del lazo Lavallière un complemento habitual en su vestimenta. Expertos en moda dicen que muchas mujeres en el ámbito económico y también en el político, como es el caso de Yolanda Díaz, lo utilizan para situaciones en que la etiqueta masculina exige corbata. En el caso de la vicepresidenta del Gobierno, es la prenda que le ha acompañado, sobre una blusa blanca con manga francesa abullonada, en tres de los momentos de su etapa en el Gobierno que más exposición mediática han tenido: la vicepresidencia en Moncloa, su audiencia con el Papa y la reunión con Puigdemont.
