Temor en el PP a un pinchazo el domingo por el «error» de Sémper al hablar en euskera
Los populares ponen sus esperanzas en el llamamiento a la movilización que está haciendo Isabel Díaz Ayuso en Madrid
El diputado del Partido Popular, Borja Sémper, en la tribuna del Congreso de los Diputados | EFE/Juan Carlos Hidalgo
No hay consuelo para una gran mayoría del Partido Popular después del «tremendo error» del vicesecretario de Cultura y diputado Borja Sémper al hablar en euskera este martes en el debate en el Congreso de los Diputados para aprobar este jueves el uso del catalán, euskera y gallego en las sesiones parlamentarias. La conmoción es total y se ha extendido el temor de que pueda afectar al acto político convocado por los populares para este domingo en Madrid, según las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE.
«Se puede reventar el acto y nos va a costar mucho. La gente, nuestros afiliados y simpatizantes nos están preguntando que dónde estamos», comentan a este periódico las fuentes populares, que se lamentan de la estrategia, a su juicio, «equivocada», que diseñó la dirección a espaldas del grupo parlamentario. «¿Cómo es posible que este error se haya cometido justo antes del acto del domingo», subrayan, teniendo en cuenta que se ha organizado para denunciar la ley de amnistía que Pedro Sánchez negocia con Carles Puigdemont para garantizarse la investidura.
El «estupor» e «indignación» de una gran parte del grupo parlamentario y de otros cargos regionales consultados por THE OBJECTIVE coinciden en esta consecuencia que, a su juicio, sería un «fracaso para el partido. «Si la manifestación es un fracaso, ¿qué hacemos? Lo que va a entender Sánchez es que no pasa nada. Ojalá no sea así», subrayan.
«Hacer el ridículo»
La esperanza de algunos diputados y cargos del Partido Popular está en el llamamiento a la movilización que desde hace días está realizando la presidenta de la Comunidad de Madrid y de los populares de la región, Isabel Díaz Ayuso: «La esperanza es la llamada de Ayuso a manifestarse. Si Madrid mueve sus distritos, tengo la confianza de que puede ser un éxito. La gente parece que se estaba apuntando como loca para venir. Yo confío en que al final venga mucha gente».
Estas fuentes son conscientes de que «lo del martes ha dejado a la gente muy fría» y que el partido tiene que «echar el resto con la concentración del domingo. No por el Partido Popular, sino por España. Es una manifestación de la defensa de la dignidad de nuestro país. No es una manifestación del PP». A juicio de estas fuentes, el partido «tenía que tomar la iniciativa» para sacar a la gente a la calle, pero por esta razón no entienden la decisión de la dirección con el discurso del dirigente popular. Otra fuente regional cree que «la manifestación va a funcionar porque se ha hecho un gran esfuerzo».
Los populares creen que han «hecho el ridículo», sobre todo porque ningún miembro del grupo parlamentario sabía que Sémper iba a pronunciar estas palabras en euskera. De hecho, le recriminan que no lo dijera en la reunión del grupo parlamentario, previa al pleno, en la que expuso cómo iba a ser su intervención. Dos horas después, la bancada popular asistía atónita a su discurso.
En el punto de mira de los populares se encuentra la figura de Cuca Gamarra, portavoz parlamentaria y secretaria general del PP, que tiene que hacer equilibrios para conjugar ambas responsabilidades: «La cara de Cuca en el pleno era un poema. Dudo que supiera lo que iba a decir Borja Sémper. Nos han dicho que el Comité de Dirección del grupo no sabía nada. No tiene nada que ver con la estrategia que nos dijeron ayer [por este martes]. De hecho, la dirección del grupo indicó a los diputados que en ningún momento hicieran uso del pinganillo».
