Por qué las votaciones de investidura siempre son públicas y por llamamiento
El reglamento del Congreso impide cambiar al voto secreto en urna para evitar corruptelas con los diputados
El candidato del PP a la investidura, Alberto Núñez Feijóo. | Foto: EP
Este viernes se va a celebrar la segunda votación de la sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo. Y al igual que en el primera, será pública por llamamiento en el que sus señorías tendrán que decir sí, no o abstención a viva voz. Una opción que es obligatoria en las investiduras, en las mociones de censura y en las cuestiones de confianza, según el artículo 85.2 del reglamento de la Cámara Baja.
La gran mayoría de las votaciones en el Congreso se realizan mediante procedimiento electrónico, con el añadido desde hace unos años de la opción telemática en unos casos muy concretos: enfermedad, baja por paternidad o maternidad, y viajes oficiales al exterior.
También se puede recurrir a las votaciones mediante voto secreto cuando lo solicitan dos grupos parlamentarios, una quinta parte de los diputados o de los miembros de una comisión, pero el voto por llamamiento será «en todo caso» en las citadas tres votaciones de investidura, moción de censura y cuestión de confianza, por lo que la votación de este viernes sobre Feijóo no puede ser secreta.
«En ningún caso podrá ser secreta la votación en los procedimientos legislativos o en aquellos casos en los que los acuerdos hayan de adoptarse en función del criterio de voto ponderado», se deja claro en el reglamento del Congreso. Con ello se evita, a juicio de fuentes parlamentarias consultadas por este periódico, que los diputados sean «tentados o comprados» por otros grupos para votar distinto a la orden dada por su partido.
Feijóo tendrá diez minutos en la segunda sesión
En la votación pública por llamamiento, un secretario de la Mesa va nombrando a los diputados y éstos responderán sí, no o abstención. El llamamiento se realiza por orden alfabético de primer apellido, comenzando por el representante cuyo nombre se haya sacado a suerte previamente. Además, los miembros del Gobierno con acta y los de la Mesa votan al final del escrutinio, según el artículo 86.
El segundo debate de la investidura de Feijóo empezará este viernes a las 12.15 horas. El candidato del PP tendrá diez minutos para pedir el respaldo de la Cámara y los representantes de los grupos parlamentarios dispondrán de cinco minutos para responderle. En esta votación, el candidato será investido presidente si obtiene mayoría simple, más votos a favor que en contra, pero lo previsible es que Feijóo repita la derrota del martes -172 votos a favor y 178 en contra-.
Tras ello, se podrán tramitar sucesivas propuestas siguiendo el mismo procedimiento: el Rey, tras consultar a los representantes de las formaciones con escaño en el Congreso, propondría candidato a través de Francina Armengol. Lo previsible es que el elegido sea Pedro Sánchez y que la presidenta de la Cámara Baja fije la nueva sesión de investidura para los días 19 y 20 de octubre.
Si en dos meses desde la primera votación de investidura de Feijóo, es decir antes del 27 de noviembre, no se hubiera investido presidente del Gobierno, Felipe VI disolverá ambas cámaras y convocará nuevas elecciones, que caerían el 14 de enero, tras comunicárselo a Armengol.
