La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha mofado este jueves en la sesión de control al Gobierno que preside de las declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, en las que aludía a la intención de los «ricos» de huir en un cohete «cuando España se vaya al carajo» y de la existencia de un búnker en Nueva Zelanda. Ayuso, en respuesta a una pregunta de Mónica García, portavoz de Podemos, le ha exigido «un hueco para cuando manden a España al carajo».
La presidenta regional aseguró que «lo más indignante de todo es que se guarden el secreto del cohete para los ricos porque, oye, porque yo llevo trabajando para los ricos todos estos años, y no me he enterado. Me gustaría, aún más, les exijo que me digan de dónde sale el cohete y dónde está el búnker ese de Nueva Zelanda para cuando manden a España al carajo».
Mónica García le había acusado de ser una «Juana de Arco neoliberal» y que, desde que «perdieron las elecciones el 23 de julio les falta la glándula de la conciencia»; igualmente el portavoz del PSOE, Juan Lobato, denunció lo que considera ausencia de Ayuspo de Madrid: «Ha ido más veces a Barcelona que a la Cañada Real», afirmando que «no cuente con nosotros en el conflicto y la crispación. Es tiempo de la política y la Constitución».
Ayuso le respondió al PSOE que «numerito es que los españoles hablemos con pinganillo, paralizar un AVE y tocar la cara al alcalde de Madrid. Esto sí que es una falta de respeto».
La polémica sesión de control en la Asamblea regional que se ha desarrollado entre varias interrupciones de la bancada de la oposición pidiendo la palabra a la Presidencia por alusiones, vivirá su momento álgido en el debate de la moción del Grupo Popular sobre la Ley de Amnistía, en la que la votación será secreta, como así lo han solicitado los populares.