El PSOE ataca a Sociedad Civil Catalana por protestar contra la amnistía: «Fantasma político»
El partido reprende a una organización cívica a la que apoyaba hasta su acercamiento al nacionalismo
Salvador Illa y Pedro Sánchez posan juntos. | Kike Rincón (Europa Press)
El PSOE considera a Societat Civil Catalana (SCC) como un «fantasma político». Además acusa al Partido Popular y Vox de aprovechar la manifestación convocada por esta organización en Barcelona el pasado domingo para generar «odio» e «incendiar las calles».
Así lo señala en un artículo de la publicación El Socialista, editada por la dirección del PSOE y titulado ‘El fracaso de la manifestación del odio y la crispación en Cataluña‘, que ha sido recogido por Europa Press. En el texto acusan a PP y Vox de «incendiar las calles» y «crear enfrentamiento» por participar en la manifestación de Barcelona que congregó a 50.000 personas según la Guardia Urbana y a 300.000 según las cifras facilitadas por los organizadores.
Menos gente que en protestas contra Ayuso
Para el PSOE además, el resultado de la manifestación fue un «fracaso» porque no fueron capaces de arrastrar a una cantidad «significativa» de gente y supuso la demostración del fracaso «de la crispación» en la política.
Así, consideran que se quedó en «una mera anécdota» si se compara por ejemplo, con la marcha a favor de la sanidad pública en Madrid, según indican. Los socialistas afirman que ese día, el pasado 12 de febrero, salieron a la calle 600.000 personas a protestar contra la gestión de la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, aunque la Delegación del Gobierno afirmó que fueron 250.000. «La protesta de Barcelona la había convocado una entidad que en estos momentos casi es un fantasma político, Societat Civil Catalana. Y PP y Vox vieron su perfecta oportunidad para fomentar el odio», subrayan.
El PSOE apoyaba a Sociedad Civil
En el pasado los socialistas catalanes sí asistieron a las manifestaciones convocadas por SCC. De hecho, destacados dirigentes del PSC acudieron a la más multitudinaria de todas, celebrada el 7 de octubre de 2017, solo unos días después de la declaración unilateral de independencia decretada durante unos instantes por el entonces presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.
Ese día, importantes dirigentes socialistas estuvieron en primera línea junto a la plana mayor del PP y Ciudadanos, partidos que conformaban el llamado bloque constitucionalista, frente a los actos del independentismo. Es el caso del exministro de Pedro Sánchez y actual Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
Ante cientos de miles de personas, entre ellos otros dirigentes socialistas como el actual líder del PSC, Salvador Illa y el exministro Celestino Corbacho, Borrell afirmó que Cataluña no es una colonia ni un territorio militarmente ocupado y pidió a Puigdemont que no empujase al país hacia el precipicio.
Más recientemente, en octubre de 2019, el PSOE también envió a la manifestación convocada por Societat Civil Catalana a varios de sus cargos más importantes. En esa ocasión también acudió Borrell, ministro de Exteriores en funciones en ese momento, el ministro de Fomento y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, y el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, hoy ministro de Cultura.
Los dirigentes socialistas volvieron a marchar junto a líderes políticos del PP, Ciudadanos y también Vox. En ese momento faltaba un mes para que se volviesen a celebrar las elecciones generales de noviembre de 2019 que ganó el PSOE y dio inicio a la primera legislatura completa de Sánchez en La Moncloa.
Hoy la situación es diferente, el PSOE se ha distanciado de SCC al tiempo que se ha aproximado al independentismo a lo largo de la pasada legislatura. Sánchez concedió los indultos a los líderes independentistas condenados por el procés, eliminó el delito de sedición y rebajó el de malversación y ahora está inmerso en una negociación con Junts para conceder la amnistía.
En dos zonas de España se practica desde hace demasiado tiempo el nazismo, Euskadi y Cataluña.
Esto es una realidad que palpita día a día en los corazones angustiados de mas de la mitad de la población de cada una de las regiones españolas que sufren diariamente esos actos impúdicos, en cualquier democracia solvente.
Solo puedes estar en esas zonas si dejas de hablar de…, si no llevas ropa con….., si hablas solo en…..y día a día van embaucando a los más jóvenes con mentiras de toda índole, de tal manera que cuando se van haciendo mayores su verdad ha tapado la verdad. Todo esto desde Zapatero y ahora con Petrump Groucho el Indecente, con fuerza y velocidad máxima esta ocurriendo en todos los ámbitos de la vida en España, donde estos canallas socialistas están haciendo que lo que parecía imposible, volver al 34, se convierta en una realidad latente. Maditos seáis todos los que defendéis las tesis de convertir lo malo en bueno, los ladrones en repartidores, los asesinos en gente de paz, los golpistas, en progresistas, los separatistas en plurinacionalistas. Dais el mayor asco desde el 34.
Mañana el ataque lo sufrirán organizaciones como el Foro de Ermua. El psoe con los verdugos y contra las víctimas.
Ya no queda nada del PSOE de la socialdemocracia. Esto es un esperpento, una agencia de colocación sin moral ni ética. Pena de los españoles que les votan… son muchos los que odian a la derecha y votan en contra.