Armengol niega que Baleares avalara a la empresa de la trama Koldo para otros contratos
La expresidenta balear insiste en que las mascarillas eran de uso civil y que se almacenaron para atender la desescalada
Francina Armengol mantiene el argumento. La expresidenta de Baleares ha insistido este viernes en el Senado que las mascarillas que compró a la trama Koldo al inicio de la pandemia eran de uso civil, aunque el expediente dice lo contrario, y que se almacenaron como stock de seguridad para atender la desescalada, como requería el Gobierno. La actual presidenta del Congreso ha defendido que se hizo una reclamación «en tiempo y forma» por la diferencia de precio al certificar que los tapabocas no reunían las características de la compra y que el actual Ejecutivo autonómico del PP y Vox la asumió, aunque luego la dejó caer. La dirigente socialista también ha descartado que el certificado que realizó su administración sirviera para avalar que otros organismos contrataran con Soluciones de Gestión.
«Es falso que sirva de aval para otras compras», ha subrayado Armengol durante su comparecencia en la comisión de investigación del caso Koldo en el Senado. La actual presidenta del Congreso ha explicado que se trata de un certificado que se emite siempre y que el Instituto de Salud Balear hace un centenar cada año. «Es lógico hacerlo. Solo dice que has recibido el pedido en tiempo, pero nada de la calidad. No recomendamos ni avalamos. Ese es otro bulo que han montado a ustedes», ha reprochado al senador Ángel Pelayo Gordillo, de Vox.
La expresidenta balear ha especificado que el citado certificado se expidió en agosto de 2020, cuando Canarias, ADIF y Puertos del Estado ya habían adjudicado a la empresa de la trama. Ha subrayado que, a partir de entonces, nadie contrató con Soluciones de Gestión, una empresa que fue incluida en el Acuerdo Marco del Ministerio de Sanidad en UTE con Ferrovial. Armengol ha vuelto a reconocer que conocía a Koldo García porque era el asesor del exministro José Luis Ábalos, pero que nunca habló con él de una empresa en concreta. Baleares compró a Soluciones de Gestión 1,4 millones de mascarillas por 3,7 millones de euros.
Las mascarillas de Armengol
«Contratamos con esta empresa porque hasta entonces todas nos pedían un adelanto del 50%. Esta fue la primera que nos permitió hacerlo a posteriori», ha reconocido Armengol. La expresidenta balear ha descargado responsabilidades porque entre sus competencias no se encontraba la de comprar este material. No obstante, ha defendido a su equipo, que durante la pandemia adquirió 430 toneladas por valor de 38 millones de euros. «En mi gobierno no ha habido corrupción. Todo está fiscalizado por la Oficina Anticorrupción y la Intervención».
El PP ha sido especialmente duro en su interrogatorio. El senador Javier Santamaría ha acudido a la sesión con una pesada bolsa: «Nos acusa de fango y he traído una bolsa de supermercado con recortes de prensa para que los pueda ver y consultar», le ha advertido. A continuación, le ha reprochado que el contrato de administración con Soluciones de Gestión era «ilegal» porque ni siquiera espero a que estuviese aprobado el procedimiento de urgencia. Armengol lo ha negado.
Santamaría ha sacado a relucir el nombre de Begoña Gómez, investigada por presuntos delitos de corrupción en los negocios y tráfico de influencias. «¿Alguna vez hizo alguna recomendación a su gobierno?», le ha requerido el dirigente popular. La expresidenta balear lo ha negado y afeado su forma de «hacer política». El senador del PP se ha centrado en el relato que realizó en el Congreso su director del Servicio de Salud, Manuel Palomino. Su subordinado aseguró que recibió una llamada del Ministerio de Transportes de una persona cuya identidad desconoce y que esta le dio el teléfono del asesor de Ábalos.
Armengol no descarta que tuviera conversaciones con Koldo García, como con otros asesores ministeriales, pero en ningún caso para contratar con Soluciones de Gestión. «Nunca en mi vida he hablado de contratar una empresa ni he negociado con nadie. No estoy en política para eso». La dirigente socialista ha subrayado que esta es su tercera comparecencia ante una comisión de investigación y reprochado a los grupos de la oposición que hayan creado «un bulo» contra ella por ser la presidenta del Congreso. Además, ha afeado que la hayan citado el día en que se cierra la campaña de las elecciones europeas y que la comisión del Parlamento balear ha concluido que estas mascarillas eran inservibles.
«Agujeros negros»
El PP hizo valer su mayoría absoluta en la Cámara Alta para acelerar la comparecencia de Armengol al considerar que «mintió» en la comisión análoga del Congreso. La portavoz del PP en el Senado, Alicia García, ha sostenido que la expresidenta balear «tendrá que rendir cuentas para aclarar las múltiples versiones que ha dado sobre su gestión y todas las mentiras que ha vertido sobre la misma». Ha insistido en que «mentir en una comisión de investigación es un delito, y Armengol lo pudo cometer por partida doble al afirmar que fue su Govern el que inició la reclamación por unas mascarillas que anteriormente había avalado».
Elías Bendodo lo llamó «agujeros negros» en la comisión de investigación del caso Koldo en el Congreso. Los populares consideran que la expresidenta balear no despejó las incógnitas que le cercan por un contrato de mascarillas con Soluciones de Gestión, la empresa investigada por beneficiarse de comisiones con la venta de material sanitario durante la pandemia. Consideran que resta saber por qué alguien del Ministerio de Fomento llamó directamente a un alto cargo regional, la identidad de esa persona y por qué facilitó el teléfono del asesor de Ábalos.
Stock de seguridad
Armengol admitió en la comisión del Congreso que habló con Koldo García, uno de los supuestos cabecillas de la trama. La actual presidenta del Congreso afirmó que lo conocía por ser el asesor de Ábalos, a quien acompañaba a diferentes actos. Insistió en que no tuvo relación de partido y que nunca hablaron de contratos. Quien sí lo tuvo fue Palomino, que admitió que le llamaron desde Fomento para preguntarle si estaba interesado en participar en «un pedido masivo» de material sanitario procedente de China. Su interlocutor le facilitó el teléfono de Koldo García y este, el del empresario Iñigo Rotaeche.
Tras esa conversación, la expresidenta balear habría dado directrices a uno de los responsables de la Consejería de Salud para acelerar los procesos. En ese contexto se enmarcaría el email que envía Rotaeche a Palomino. El mensaje intervenido por la Guardia Civil e incorporado al sumario del caso fue enviado el 25 de abril a las 16:25 horas bajo el asunto «Contenido Avión 26042020 (KN95)». El PP insiste que las mascarillas se adquirieron para utilizarla en centros sanitarios, en contra de lo que defiende Armengol. El contrato certifica que fueron compradas para «uso hospitalario».
«Tu consejero nos está bloqueando»
Los populares sostienen que Armengol nunca ha aclarado las conversaciones que mantenía con Koldo García. Este diario adelantó que el asesor de Ábalos mantenía una interlocución directa con la expresidenta de Baleares, a la que incluso llamaba por teléfono durante la pandemia para que agilizara los trámites de la compra de las mascarillas. Fuentes de la investigación revelan que Koldo García llegó a decirle en una ocasión a la expresidenta balear que «tu consejero nos está bloqueando».
Otro de los puntos de fricción deriva de la decisión de almacenar las mascarillas por si era necesario echar mano de ellas. El equipo de Armengol inició en paralelo un procedimiento de reclamación por el material que caducó el pasado enero, bajo el Gobierno de Marga Prohens, del PP. Un asunto que ha generado que socialistas y populares se culpen mutuamente y que impedirá a Baleares recuperar, al menos, parte de los 3,7 millones que destinó a esa compra.