Sevilla celebra un pleno extraordinario para la cuestión de confianza del 'popular' Sanz
El alcalde del PP podría perder la votación, que se realiza tras no haber acordado unos presupuestos, si Vox y PSOE se unen
El Ayuntamiento de Sevilla, gobernado por el popular José Luis Sanz, celebra este viernes a las 9.30 horas un pleno extraordinario para el debate y votación de la cuestión de confianza del alcalde. Vinculada al nuevo proyecto presupuestario de 2024, la sesión de este viernes tiene lugar después de que el mismo no prosperase en la sesión del pasado lunes. Y ocurrió así debido a que los populares en minoría y todos los grupos de oposición, que son el PSOE, Vox y Podemos-IU, votaron en contra.
En el caso de que en el nuevo pleno extraordinario de este viernes no sea aprobada esta cuestión de confianza del alcalde vinculada al presupuesto, será habilitado un plazo de un mes en el que la oposición podrá presentar una moción de censura contra el primer edil. Aun así, este extremo es impracticable y ya descartado porque dicha operación necesitaría la unión del PSOE, Vox y Podemos-IU en torno a la figura de un alcalde alternativo.
Si finalmente no media o prospera ninguna moción de censura, como previsiblemente sucederá, quedarán aprobados definitivamente los presupuestos, que ascienden a 1,29 mil millones de euros tanto en ingresos como en gastos, en lo que se refiere a su cifra consolidada, es decir las cuentas del Consistorio junto con las de sus empresas municipales y demás entidades satélite.
La situación municipal
Al respecto, hay que recordar que el PP gobierna en minoría y en solitario con 14 concejales de un total de 31 y meses atrás desistía de elevar al pleno su proyecto de nuevos presupuestos, al no reunir apoyos entre la oposición para su aprobación. Para ello, los populares señalaban el «no» previo de todos los grupos de oposición, el PSOE, Vox y la coalición Podemos-IU; a los nuevos presupuestos en los órganos de gobierno de la Gerencia de Urbanismo, el IMD, el Instituto de la Cultura y las Artes (ICAS), la Agencia Tributaria, el Patronato del Real Alcázar y la sociedad Congresos y Turismo de Sevilla (Contursa).
Así, los populares optaban por prorrogar los presupuestos municipales de 2023, diseñados por el anterior Gobierno local del PSOE, acometiendo desde entonces diferentes modificaciones presupuestarias de gran envergadura, para las vicisitudes de la actual gestión municipal.
El «error» de no convocar un pleno de presupuestos
Pero más recientemente, tras negar el planteamiento de un pacto de gobierno con Vox y asegurar que planea seguir gobernando en solitario, el alcalde reconocía que «seguramente fue un error no presentar el presupuesto» al pleno, pero entonces no lo consideró «necesario por el no» de los grupos de oposición en las comisiones informativas previas.
Al punto, anunciaba que ahora había decidido elevar al pleno el nuevo proyecto presupuestario, como «nueva oportunidad» para reconducir la situación presupuestaria, recordando que las cuentas prosperarían con la mera abstención de la oposición y adelantando que en caso de que no prosperasen las nuevas cuentas, recurriría a la fórmula de la cuestión de confianza vinculada al presupuesto.
Ya en el pleno extraordinario del pasado lunes, destinado a debatir y votar el proyecto presupuestario del Gobierno local del PP para 2024, el portavoz del PSOE, Antonio Muñoz, reprochaba al alcalde su «improvisación» y que «haya desenterrado un presupuesto tras desautorizar San Telmo un gobierno con Vox, saltando por los aires esa posibilidad, emprendiendo ahora una huida hacia adelante», toda vez que el PP niega conversaciones con Vox para un gobierno de coalición y Vox asegura que las hay.
La oferta del PP
Y tras asegurar los populares que estaban dispuestos a asumir 15 de las 27 medidas reclamadas por el PSOE en materia presupuestaria, Muñoz avisaba de que dicho anuncio carece de «reflejo presupuestario» o «detalle» sobre cómo implementar tales aspectos, justificando así el voto contrario del PSOE y descartando de nuevo una moción de censura.
En el caso de Vox, Cristina Peláez, que había supeditado el apoyo de su grupo al presupuesto a la entrada del mismo en el Gobierno, explicaba su voto contrario en que los presupuestos arrojan «una previsión de ingresos totalmente irreal» y «gastos superfluos», como las partidas destinadas al Festival de Cine o la Agencia de la Energía; con lo que a su entender el PP se ha encaminado en «la senda del socialismo».
Por Podemos-IU, Ismael Sánchez alertaba de que el proyecto presupuestario del PP no resuelve ninguno de «los principales problemas de la ciudad» y profundiza en «el debilitamiento de lo público».
El alcalde replica a la oposición
Sanz, ante el voto contrario de toda la oposición a sus presupuestos, avisaba de que los socialistas, a quienes había pedido insistentemente la abstención, han demostrado que «nunca han tenido intención ninguna de negociar absolutamente nada porque» el lema de Muñoz es «o yo o el caos»; insistiendo en que el PP había aceptado más de la mitad de las propuestas presupuestarias del PSOE. A su entender, el PSOE de Antonio Muñoz está centrado «en intentar que esta ciudad funcione lo peor posible» para así perjudicar al PP.
Respecto a Vox, el alcalde recriminaba a dicho grupo que «una sus fuerzas con el Partido Socialista, no contra este alcalde o este grupo municipal, sino contra la ciudad» en su conjunto, al impedir también la aprobación de los nuevos presupuestos.
Ya este jueves, de cara al pleno de la cuestión de confianza de este viernes, el alcalde ha apelado nuevamente al PSOE y a Vox, invitándoles a abstenerse» o incluso a «ausentarse» de la votación, porque con el mecanismo de la cuestión de confianza, los presupuestos van a ser aprobados en cualquier caso y Sevilla necesita ya unas nuevas cuentas actualizadas.