IU planea un acercamiento a Podemos que puede dinamitar las alianzas de Sumar
El partido de Maíllo teme que su formación se disuelva si la izquierda no se recompone alrededor de un único cartel
Izquierda Unida prepara una estrategia de acercamiento a Podemos para reunificar al espacio de la izquierda de cara a unas elecciones generales que podrían celebrarse antes del cierre natural de la legislatura. El partido que lidera Antonio Maíllo no para de inspirarse y reivindicar el Frente Popular alcanzado en Francia para las próximas elecciones legislativas, en el que se han unido los socialistas, ecologistas e «insumisos». IU es consciente que su situación es de máxima fragilidad. Sin diputados europeos, el partido afronta una seria crisis financiera, y lo apuesta todo a una reunificación con Podemos, ya sin el «paraguas» de Sumar. Los catalanes estarían de acuerdo, mientras que valencianistas y los madrileños de Más Madrid estudian contramedidas.
El plan de IU ya habría sido comunicado a Yolanda Díaz, según afirman las fuentes consultadas. La clave de la estrategia de IU, respaldada por los socialistas, pasa por juntar a todos los partidos a la izquierda del PSOE reeditando por la vía de los hechos a Unidas Podemos. La cúpula morada, liderada por Irene Montero, manifestó su rechazo a ese planteamiento en la campaña electoral, aunque también se abrió a estudiar una nueva coalición después de las europeas. La propia Montero así lo transmitió en una entrevista en el diario La Vanguardia.
IU afronta el futuro con preocupación. El hecho de que Manu Pineda no haya logrado el escaño europeo deja a IU con muchas dudas. Fuentes de IU sostienen que la pérdida del escaño europeo, con las subvenciones otorgadas a los representantes de la Eurocámara, restan al partido alrededor de cinco millones de euros en cinco años. Se trata de un agujero que afectaría al 70% de la caja de IU, que ahora debe tejer un plan que garantice su subsistencia.
Podemos abre y Díaz escucha
El equipo que lidera Antonio Maíllo ha decidido, según las fuentes consultadas, volver a plantear un encuentro con Podemos. IU quiere reunificarse con el partido de Irene Montero, consciente de que los morados exigirán que «caigan cabezas», entre ellas al menos una entre las de Yolanda Díaz e Íñigo Errejón. Pero este es el único movimiento capaz de garantizar tanto su supervivencia como la continuidad del Gobierno de coalición si Pedro Sánchez se ve obligado a adelantar los comicios. Esta opción sigue sobrevolando todo tipo de reflexión en la cúpula de IU y de los demás partidos aliados de Sumar, puesto que el tablero catalán es endiablado y la legislatura «agónica».
Incluso desde el espacio de Sumar asumen que la «única posibilidad» que tiene el Gobierno para aguantar en el futuro es si se «vuelve a unir todo el espacio fragmentado que fue antes Unidas Podemos». Algunas fuentes sostienen que la propia Díaz habría abierto a esta reunificación, posiblemente con la esperanza de sortear las «condiciones» de Podemos. Es decir, sacrificando a Errejón y a otros miembros destacados de su equipo para que se cumpla un plan que, por otro lado, patrocina el mismo Pedro Sánchez.
Los movimientos de IU, mientras tanto, están siendo estudiados por otros socios de Díaz. Más Madrid, entre otros, así como Compromís, piden a la política gallega más «horizontalidad» a la hora de plantear los nuevos equilibrios internos. Díaz ya ha abierto a esta opción, como desveló en exclusiva este diario la semana pasada. El planteamiento de la lideresa de Sumar consiste, en efecto, en diluir en una «mesa de coalición» a los demás partidos socios, siguiendo ella al mando del grupo. Díaz seguirá controlando el «poder real» de la vicepresidencia y del grupo parlamentario, y esto servirá para que tanto en esa mesa de coordinación como en la gestora de Sumar la vicepresidenta siga imponiendo su criterio.
Temores de los aliados
Las intenciones de IU se reflejan, además, en el Nuevo Frente Popular alcanzado en Francia para las próximas elecciones de la Asamblea General. Esta coalición electoral reúne a Los Ecologistas, La France Insoumise, el Partido Comunista Francés, el Partido Socialista, Génération.s y la Izquierda Republicana y Socialista. Toni Valero, uno de los referentes de IU y diputado nacional, ha elogiado la campaña electoral que están elaborando desde la coalición de izquierda, mientras que Pineda ha difundido un artículo favorable a la unidad en la izquierda titulado Un nuevo horizonte de unidad de la izquierda o una debacle anunciada, escrito por Agustín Moreno en Público.
Pero los socios de Díaz temen pactos encubiertos con IU y Podemos de cara al futuro, sobre todo si se van acercando nuevas elecciones. Así que buscan fortalecerse y blindarse para no quedar excluidos de una entente que amenace su poder territorial. Además de Más Madrid y Compromís, la Chunta Aragonesista y Mes per Mallorca también deberían decidir en qué bando estar, con el serio peligro de que estas tensiones debiliten al actual grupo parlamentario de Sumar, que Díaz sigue supuestamente controlando.
Los socialistas siguen mirando al tablero nacional, explican varias fuentes consultadas. Saben que Sumar y Podemos por separado impedirán revalidar el gobierno. Así que la apuesta socialista pasa por fomentar la fragmentación en la derecha entre el PP, Vox y la formación de Alvise Pérez, mientras la izquierda se recompone. «El Gobierno necesita que este 7% u 8% de Podemos y Sumar se mantenga en una sola candidatura», explican las fuentes consultadas. Este sería el «escenario ideal» para un Ejecutivo en horas bajas, aislado y con muchas incógnitas por delante, tanto por el aguante de la mayoría de la investidura como por los casos de presunta corrupción que acechan a Sánchez.