Indignación en Hacienda por nombrar solo a «amigos» para dirigir los fondos europeos
Funcionarios del ministerio aseguran, tras la cascada de dimisiones, que no se buscan «personas preparadas»
La dimisión de la directora general de Fondos Europeos, Esperanza Teba Samblás, dependiente del Ministerio de Hacienda, ha puesto de manifiesto la dificultad en la gestión de este dinero del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, conocidos como Next Generation, así como de otras partidas procedentes de la Unión Europea. El malestar entre los funcionarios de la Secretaría General de los Fondos Europeos por esta cascada de dimisiones, que no cesa desde que en 2023 se marchó la directora general del citado plan, y de su sucesor, les ha llevado a criticar que solo se nombre a «amigos» del Gobierno, antes que a «personas preparadas y menos politizadas», según las fuentes de este ministerio consultadas por THE OBJECTIVE.
La salida de Esperanza Teba se suma a la de Rocío Frutos, en octubre de 2022, como directora del Plan de Recuperación; y a la de su sustituto, Jorge Fabra, en febrero de este año. Tres salidas que son el reflejo del caos que se está produciendo en la gestión del dinero procedente de Europa, cuyos mecanismos de reparto y de tramitación tienen problemas para funcionar con eficacia. Es el caso del sistema informático CoFFEE , en el que se vuelcan los datos de los beneficiarios de las subvenciones, sobre todo para conocer los destinatarios y que no haya conflictos de intereses, que sigue sin funcionar.
La indignación de los funcionarios es total, porque aseguran que no se están buscando buenos profesionales para ponerse al frente de la gestión de estos fondos, sino más bien amigos del Gobierno de Pedro Sánchez. Entre ellos apuntan a Jorge Fabra, que trabajó en Moncloa antes de dirigir el citado plan. Hijo de un destacado socialista, su hermana Natalia trabajó también con la vicepresidenta y ministra de Economía, Nadia Calviño, y en el Consejo de Seguridad Nuclear. Fabra nunca estuvo cómodo en el cargo, e incluso vio como una de sus iniciativas, crear un comité de expertos para pilotar la ejecución del plan, fue rechazado.
Rocío Frutos también pidió salir del cargo en 2022 «por motivos personales», según la justificación que dio el Gobierno, pero la realidad, según las fuentes internas consultadas por este periódico, es que no estaba de acuerdo con la forma de gestionar el dinero y mantenía fuertes discrepancias con el Gobierno. Unas discrepancias que también sostienen altos funcionarios que incluso se niegan a firmar documentos relacionados con estos fondos.
La nueva responsable de la dirección general, Ana Peña, sustituta de Esperanza Tebas, tampoco ha concitado muchas simpatías entre el equipo técnico, siempre según la versión de las fuentes consultadas por este periódico. «La que fue también directora general de Fondos Europeos en el Gobierno de La Rioja con el PSOE, es amiga de la secretaría general, recién llegada a su gabinete, y tiene una gran oposición del equipo técnico por considerar que hay perfiles mucho más preparados y no tan politizados».
La excesiva politización de los fondos ya fue denunciada por los funcionarios tras la remodelación que se llevó a cabo en la estructura del Ministerio de Hacienda, al frente de la cual se encuentra María Jesús Montero. En diciembre de 2023, el Consejo de Ministros aprobó el Real Decreto 1009/2023 de 5 de diciembre, «por el que se establece la estructura orgánica básica de los departamentos ministeriales». En esta remodelación, la Secretaría General de Fondos Europeos, que depende directamente de la ministra, pasó a controlar a la Dirección General de Fondos Europeos y la Dirección General del Plan y del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia.
En la estructura de la anterior legislatura, la Secretaría General de Fondos Europeos dependía de la Secretaría de Estado de Presupuestos y Gastos, por lo que no era gestionada directamente por la ministra. «Al hacerla depender directamente de la ministra hay varias lecturas. Por una parte, se le da más relevancia y, por otra, hay una mayor politización, perdiendo su carácter técnico, tanto en el órgano como en la persona que lo ocupa como secretaria general». Esta circunstancia provocó «mucho revuelo entre los funcionarios y preocupación porque a partir de ahora habrá mucha más politización en estos fondos». Estos cambios parece que confirman el temor que ya tenían los funcionarios.
Una de las preocupaciones importantes entre los funcionarios del Ministerio de Hacienda es la dificultad que «puede haber» para justificar el quinto desembolso de los fondos europeos, que todavía no han llegado. Estos estarán condicionados a una reforma fiscal que el Gobierno no quiere acometer, ya que ello tiene que acordarse dentro de la reforma del sistema financiero que le enfrenta a las comunidades gobernadas por el PP. Además, Cataluña ha pedido un trato singular, diferente al de las demás regiones.