Salvador Sostres: «Rovira es una histérica, pero ERC acabará firmando un pacto con el PSC»
El columnista asegura que ERC y Junts solo han logrado medidas de «perdón de sus actos», y descarta un referéndum
Salvador Sostres, columnista en varios medios. | TO
Salvador Sostres (Barcelona, 1975) es uno de los columnistas más conocidos que hay en Cataluña. También de los más controvertidos. Colaborador en distintos medios, conoce como pocos la realidad política de la región, y en concreto, del espacio de Junts per Catalunya. En los últimos años, ha transitado de apoyar al nacionalismo catalán a sentirse mejor representado, dice, por el PSC de Salvador Illa. A diferencia de muchos de los columnistas más leídos en Cataluña, nunca creyó que el procés independentista pudiera culminar en la independencia, y ha afilado su pluma contra varios de sus líderes. En esta entrevista en THE OBJECTIVE muestra pocas dudas de que el líder socialista será investido presidente de la Generalitat con el apoyo de ERC.
PREGUNTA.- Veo que viene usted con un colgante de la cruz cristiana y un símbolo judío, el jai.
RESPUESTA.- Soy católico y llevo la cruz que me dio el padre Carlos, que es el párroco de San Gregorio, mi parroquia. Y esto [el símbolo hebreo] es un regalo del cónsul de Israel, que me dijo de llevarlo cerca, que siempre me va a proteger. Estoy muy contento de llevarlo porque Israel está en problemas y si Israel está en problemas, todos estamos en problemas. Y la verdad es que esto me lleva a decir que tendría ganas de que, en noviembre, el presidente Trump volviera a ganar las elecciones. Es el único presidente en los últimos tiempos que ha entendido a Israel, le ha protegido y le ha ayudado, además de establecer acuerdos internacionales con países muy difíciles, con los que nunca antes Israel había podido tener este tipo de relaciones.
P.- Con Trump de presidente de los Estados Unidos, ¿cree que se solucionarán los problemas en Gaza o Ucrania?
R.- Muchas de las cosas que han sucedido en los últimos tiempos en Israel, también en Ucrania, tienen que ver con la falta de un liderazgo potente en el lado de los buenos. No creo que Putin se hubiera atrevido a atacar Ucrania con Trump de presidente. Además, no pasó mientras Trump fue presidente. Es decir, no solo es una creencia, sino que también es un hecho. No creo tampoco que Irán se hubiera atrevido a atacar a Israel. Todo el mundo se tomaba medio en broma aquellos ataques. Pero la verdad es que fue un lanzamiento masivo de cohetes que solo gracias al sistema defensivo de Israel se pudo neutralizar. No creo que Irán, si no estuviera envalentonada por Putin, y por la debilidad de la UE, se hubiera atrevido a hacer eso. Efectivamente, Trump tiene problemas, a veces de incontinencia verbal, de puesta en escena, de formas. Pero creo que fue un presidente muy interesante para Estados Unidos y para nosotros.
P.- Vamos a hablar de Cataluña. Usted fue de los primeros en decir que ERC pactaría con el PSC, cuando casi todos decían lo contrario.
R.- Yo fui el primero que lo escribí, porque fui el único que lo ha preguntado a la gente que tenía que preguntar. Es lo más lógico para ERC, que está teniendo un ciclo electoral bajo, pero que ni mucho menos está en una situación desesperada. ERC podría tener la mitad del Ayuntamiento de Barcelona, podría tener la mitad de la Generalitat de Cataluña, si la quiere. Si lo quiere, puede tener influencia. Tiene influencia en el Gobierno central. Todo el mundo piensa que Pedro Sánchez depende de Puigdemont, y es cierto, pero también depende de ERC. A la vez, gobierna dos diputaciones, Tarragona y Lérida, y medio gobierna o gobierna conjuntamente con el PSC, la de Barcelona, que es la más importante. Además, los veinte diputados que retiene en el Parlament de Cataluña son decisivos para hacer presidente a Illa. A mí no me parece que esto sea la situación de un partido a punto de desaparecer. No me parece una situación comparable a Ciudadanos.
P.- Muchas veces, ERC, a la hora de la verdad, se acompleja ante Junts por miedo a que les llamen «traidores».
R.- Es verdad que ha pasado, pero es que ERC tiene ahora la posibilidad de matar a su archienemigo, que es Puigdemont. El archienemigo de ERC no es Rajoy, no es Feijóo, no es Santi Abascal, no es Pedro Sánchez. El archienemigo de ERC es Puigdemont, es Junts per Catalunya. Y ahora mismo, ERC tiene la posibilidad de matar a Puigdemont, por decirlo más exactamente, de jubilarlo, de obligar a Junts a una cierta refundación, a renovar el mensaje y probablemente virar hacia una postura más posibilista, con nuevos liderazgos. Las negociaciones van bien. El día que Marta Rovira volvió, a mí Junqueras me explicó que el pacto está prácticamente hecho.
P.- Parece que la única duda interna en ERC es quién pone la cara, quién se responsabiliza de firmar el pacto con el PSC.
R.- Lo tiene que firmar Marta Rovira, claro. Y lo tienen que refrendar las bases, que son impredecibles, es cierto, pero yo no veo ahora mismo a las bases de ERC votando en contra de lo que le diga la dirección. Además, es lo que dice la dirección, digamos interina, pero es también lo que propone en cierto modo Junqueras desde una cierta dirección moral.
«No veo a las bases de ERC votando en contra de lo que diga la dirección»
P.- ¿Cree que ERC obtendrá el concierto económico para Cataluña a cambio de apoyar al PSC?
R.- ERC necesita presumir de algo muy notable para que sus bases lo entiendan. Se hablaba de la condonación de la deuda pública, pero es que ya se habló de la condonación de 15.000 millones para la investidura de Sánchez, y no se ha condonado todavía… El PSOE se va a comprometer a algo significativo. Otra cosa es si ese algo se va a llevar a cabo, cómo y cuándo.
P.- Bueno, pero a Sánchez ya le han sacado unos indultos, una reforma del Código Penal, una amnistía… ¿No ve probable obtener también un referéndum?
R.- Todas las medidas que ha conseguido el independentismo han sido de perdón de sus propios actos. O sea, no han conseguido que el padre les aumente la mensualidad, solo han conseguido que el padre les levante los castigos. No creo que Pedro Sánchez pueda conceder un referéndum de independencia. No creo que pueda técnicamente. Pérez-Reverte lo dice muy bien: tú crees que Pedro Sánchez está vendiendo a su madre, pero en realidad está vendiendo a la tuya.
P.- Usted ha definido a Marta Rovira como una histérica. Y aun así, cree que se entenderá con el PSC.
R.- Es una histérica. Es una política de corto alcance intelectual, de poco control emocional. Cuando Junqueras tomó las riendas de ERC, dejaron a Rovira la dirección orgánica del partido. Fue una suerte de contrapunto a Junqueras, y ha acabado montando una dirección paralela a Junqueras, que me parece mezquino.
P.- ¿Junqueras se hará de nuevo con el control de ERC después del congreso del partido?
R.- Sí, porque además, tampoco hay nada más. Junqueras tiene el aprecio de una parte importante de las personas que van a votar. De las 9.000 personas que están llamadas a votar, la mayoría está con Junqueras. Es verdad que le falta una idea propositiva de dónde quiere ir.
P.- Nadie en el independentismo tiene una idea propositiva, ¿no?
R.- No, es que si fueran sinceros lo primero que tendrían que reconocer es que han perdido. Y que no es que España no quiera darles la independencia, sino que Cataluña no la quiere. Los catalanes no están dispuestos a un enfrentamiento abierto con nadie, como se ha visto en las elecciones.
P.- ¿Carles Puigdemont va a volver a España?
R.- Cuando no tenga ningún riesgo de ser encarcelado. Para el pleno de investidura no va a volver.
«Tú crees que Sánchez está vendiendo a su madre, pero en realidad está vendiendo a la tuya»
P.- Si volviera por sorpresa antes de la investidura y lo detienen, ¿no cree que saltaría por los aires el acuerdo de ERC con Illa?
R.- Esto es la fantasía de Junts. Llevamos siete años de amagos continuos. Estaba la expectativa de que volviera durante la última campaña. No volvió. Siempre es lo mismo.
P.- Usted procede del espacio nacionalista, y es verdad que hace muchos años que está bastante desencantado. ¿Qué partido hoy día le representa mejor?
R.- El PSC, porque es lo más de derechas que hay en Cataluña con opciones de gobernar.
