Illa encarga movilizar 50.000 viviendas públicas y gestionar el traspaso de Rodalies
El presidente de la Generalitat pide a Pané mejorar el acceso a la primaria y a Duch trabajar por la oficialidad del catalán en la UE
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, reúne a los 16 consellers de su Govern en unas jornadas de trabajo en el Arxiu Montserrat Tarradellas i Macià del Monestir de Poblet, a 30 de agosto de 2024. | Europa Press
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha encargado a la portavoz del Govern y consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Sílvia Paneque, «ambición para movilizar 50.000 viviendas públicas y garantizar el derecho a la vivienda», y también le ha trasladado que para él es una cuestión clave, textualmente, el traspaso de Rodalies.
Así se lo ha trasladado en el marco de las jornadas de trabajo de Illa y su Govern que han comenzado este viernes en el Arxiu Montserrat Tarradellas i Macià del Monestir de Poblet (Tarragona), en las que el presidente ha entregado una ‘mission letter’ personalizada a cada uno de sus consellers detallando qué espera de ellos y qué objetivos les insta a conseguir.
Illa quiere que la consellera de Salud, Olga Pané, se centre en conseguir «un acceso a la atención primaria de salud en un 90% en 48%» y que impulse la ley de Agenda de Integración Social y Sanitaria y la ley de Formas no Contractuales, ligada a la normativa europea, y le ha pedido a la consellera de Educación, Ester Niubó, que recupere la confianza en el sistema educativo y priorice el diálogo con los docentes.
Al conseller de Unión Europea y Acción Exterior, Jaume Duch, le ha pedido trabajar por la oficialidad del catalán en las instituciones europeas en colaboración con el Gobierno central e impulsar la cooperación al desarrollo para llegar al 0,7% del presupuesto en 2030, y al conseller de Presidencia, Albert Dalmau, le ha encargado la modernización organizativa y tecnológica del sector público y el diálogo con el territorio.
Recuperar «el liderazgo económico»
La consellera de Economía y Finanzas, Alícia Romero, ha recibido el encargo de que Cataluña «recupere el liderazgo económico en España y desarrolle el papel motor que históricamente ha jugado en Europa», mientras que al conseller de Justicia, Ramón Espadaler, le ha pedido centrarse en los servicios de ejecución penal y de justicia juvenil y en la memoria histórica.
Illa ha reclamado a la consellera de Interior, Núria Parlon, controlar «la lucha contra las ocupaciones ilegales, los hurtos, la criminalidad asociada al tráfico de drogas y la multirreincidencia», así como la violencia contra las mujeres, y a la consellera de Derechos Sociales, Mònica Martínez, le ha pedido rediseñar el sistema de protección social y elaborar un nuevo mapa de prestaciones a raíz del traspaso del Ingreso Mínimo Vital (IMV).
El presidente socialista ha encomendado al conseller de Empresa y Trabajo, Miquel Sàmper, el «diálogo social constante» con sindicatos y empresas, y a la consellera de Igualdad y Feminismo, Eva Menor, actuar con contundencia y todos los recursos para erradicar la violencia machista.
La consellera de Investigación y Universidades, Núria Montserrat, deberá trabajar para que Cataluña «se posicione entre las 50 regiones más innovadoras de la UE en 2030» y mejorar el sistema universitario, garantizando la normalidad del catalán como lengua propia, mientras que el conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Òscar Ordeig, tendrá que conseguir la simplificación administrativa y la profesionalización y digitalización del sector.
2% en cultura
Illa ha pedido al conseller de Deportes, Berni Álvarez, que trabaje para mejorar las infraestructuras y equipamientos deportivos de Cataluña, y a la consellera de Cultura, Sònia Hernández, que se centre «en obtener el 2% del total del presupuesto de la Generalitat» para su departamento y en posicionar a Cataluña en la vanguardia audiovisual y digital.
Por último, al conseller de Política Lingüística, Francesc Xavier Vila, le ha instado a «centrarse en la aprobación y ejecución del Pacto Nacional por la Lengua» y también velar por el occitano, el aranés de l’Aran y la lengua de signos catalana.
