Alvise confiesa que cobró 100.000 euros en negro porque Hacienda «es una mafia»
El líder de SALF llama a la sublevación fiscal: «Todo impuesto que podáis evitar pagar, no lo paguéis»
El eurodiputado Alvise Pérez. | Europa Press
El líder de Se Acabó La Fiesta (SALF), Luis ‘Alvise’ Pérez, ha reconocido este jueves que ha recibido un pago en metálico de 100.000 euros del dueño de Madeira Invest Club, Álvaro Romillo, por unos «honorarios privados» por los que no ha abonado el correspondiente IVA.
Alvise ha hecho hincapié en que Hacienda «es una mafia» y ha reiterado su negativa a que el Estado le quite «el 50%» de sus ingresos a base de impuestos. Por ello, ha pedido a sus seguidores que se declaren en rebeldía ante la Agencia Tributaria. «Todo impuesto que podáis evitar pagar, no lo paguéis. Que se acabe la fiesta», ha dicho.
Además, ha dejado claro que no se va a esconder ante la posibilidad de que el Supremo abra una investigación contra él por financiación ilegal y ha sugerido que el Gobierno de Pedro Sánchez ha dejado «huir a Dubai» a su exsocio con las cuentas de criptomonedas, el citado Álvaro Romillo.
Por lo que respecta a él, ha subrayado que sus posibles problemas con la Justicia se podrán solventar «con una complementaria de Hacienda» y ha incidido en que no va a pasar por la política «amordazado porque el sistema te quiera rico y obediente». Y ha concluido su mensaje con el anuncio de que este domingo se celebrará el segundo sorteo de su sueldo como eurodiputado.
El político antisistema se ha visto envuelto en la polémica desde que el dueño de Madeira Invest Club (MIC), Álvaro Romillo, entregó el 19 de septiembre una denuncia ante la Fiscalía General del Estado la que confiesa que entregó 100.000 euros en metálico al líder de Se Acabó La Fiesta (SALF) el pasado 27 de mayo, justo al inicio de la campaña electoral de las elecciones europeas del 9-J.
Romillo es el fundador de esta empresa de inversión en moneda digital que promocionó a Alvise y es conocido en el mundo de las criptomonedas y el blockchain con el seudónimo de Luis Cryptospain. La denuncia va acompañada de diversa documentación así como conversaciones con el líder de SALF que demostrarían la relación y los pagos en mano en Madrid.
La entrega de ese dinero en metálico se produjo poco después de las 16:00 horas de ese 27 de mayo y llevó al activista en redes a enviar un mensaje de agradecimiento: «Todo ok! 100.000 gracias, Luis», le dijo al empresario de criptomonedas. En una conversación previa, Romillo le dijo a su interlocutor a Alvise que se pasase por Sentinel, en cuyas oficinas hay 5.000 cajas de seguridad fortificadas donde se permite hacer intercambios de dinero bajo una promesa de total confidencialidad: a espaldas de Hacienda y sorteando las medidas antifraude a las que están obligadas las entidades financieras.
«Hablo con Dani para que pases hoy a las 16:00 si te va bien por allí», comentó el CEO de MIC. Apenas diez minutos después, el líder de SALF le respondió afirmativamente. «Hecho. (a las) 16:00 estoy ahí». Romillo volvió a retomar la conversación casi una hora después de la cita convenida. «Ya me han dicho que todo ok», a lo que Alvise replicó de inmediato dándole las gracias: «Todo ok! 100.000 gracias, Luis».
Alvise contactó con el fundador de MIC a finales de marzo. Durante semanas hablaron de criptomonedas y de las necesidades económicas y logísticas del líder de SALF para financiar su candidatura. A principios de abril, el líder de SALF le trasladó a Romillo sus «necesidades» de cara a los comicios europeos, entre los que citaba conseguir «fondos que no requieran ser controlados por el Tribunal de Cuentas» para pagar mítines, publicidad y actos de campaña. El 25 de mayo, el empresario le abrió varias carteras digitales o wallets para canalizar las donaciones de sus seguidores. Y dos días después, procedió a la entrega en metálico de los citados 100.000 euros.
La ley de financiación de partidos prohíbe las donaciones anónimas y establece que los partidos políticos no pueden aceptar o recibir directa o indirectamente donaciones procedentes de una misma persona superiores a 50.000 euros anuales, ni tampoco donaciones procedentes de personas jurídicas. Además, todas las donaciones superiores a 25.000 euros deben notificarse al Tribunal de Cuentas por el partido político en el plazo de tres meses desde su aceptación.
