Feijóo confirma que denunciarán las cartas con «amenazas» que recibieron diputadas del PP
Miguel Tellado, portavoz del grupo popular, ha asegurado que lo ocurrido es una «vergüenza»
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha anunciado este jueves que su formación denunciará las cartas con «amenazas e insultos» que han recibido diputadas y senadoras de su formación, si bien ha añadido que no les hace falta «porque a las mujeres del PP nadie las va a callar».
«Es grave y repugnante el contenido y, por supuesto, se promoverá la correspondiente denuncia«, ha asegurado Alberto Núñez Feijóo en un mensaje en su cuenta oficial en la red social ‘X’, que ha recogido Europa Press.
Ana Vázquez, portavoz de Interior del PP, ha publicado en su cuenta de X (antiguamente Twitter) una foto de la carta que ha recibido en su despacho de la Cámara Baja, fechada a día 22 de septiembre desde Waterloo y en la que se censura, entre otras cosas, sus intervenciones en el Congreso dirigidas a Marlaska.
En su mensaje en redes sociales, la diputada ha tachado de «cobarde de mierda» al autor de la carta por no atreverse a poner su nombre y ha querido dejar claro que no se va a amedrentar por esa «nauseabunda misiva». «No me vais a callar», ha enfatizado.
También la portavoz del Grupo Popular en el Senado, Alicia García, ha hecho pública esa misiva que, según ha dicho, está «llena de insultos, odio y amenazas». «El acoso, el odio y la violencia no silenciarán nuestras ideas«, ha enfatizado.
Esas cartas también han llegado a otras parlamentarias del PP, como Macarena Montesinos o Noelia Núñez. «Si piensan que esto nos calla a las mujeres del PP, lo llevan claro», ha zanjado Núñez, que es vicesecretaria de Movilización y Reto Digital del partido.
Tellado: «Qué vergüenza»
Feijóo ha confirmado que denunciarán esas cartas «con amenazas e insultos». «Sé que no les hace falta porque a las mujeres del PP nadie las va a callar, pero tienen todo mi apoyo», ha agregado en un mensaje en ‘X’.
De la misma manera, el portavoz del Grupo Popular, Miguel Tellado, ha asegurado que lo ocurrido es una «vergüenza» y ha dicho que no pueden «permitir que el odio y el machismo sigan normalizándose» porque «la democracia requiere respeto y no amenazas cobardes».