Un alto cargo de Defensa renuncia a evaluar un nombramiento para no contrariar a Robles
Críticas al director de Asuntos Económicos por apartarse en la designación de una militar del Gabinete de la ministra
La ministra de Defensa, Margarita Robles, en su último pleno en el Senado. | Foto: A.Pérez Meca (EP)
Crece la polémica en el Ministerio de Defensa en torno al próximo nombramiento del nuevo subdirector general de Contabilidad, un puesto en el que Margarita Robles quiere colocar a una teniente coronel interventor de su Gabinete cuando casi siempre ha estado dirigido por generales del Cuerpo de Intendencia y para el que ahora solo se pide un mínimo de 15 años de antigüedad. El director general de Asuntos Económicos (Digeneco), el general de división José Luis Sánchez Martínez, ha renunciado a evaluar a los candidatos que aspiran a dicha plaza para no contrariar a la ministra, según desvelan fuentes militares a THE OBJECTIVE.
Sánchez Martínez lleva al frente del área económica de Defensa desde octubre de 2022 y proviene del Cuerpo de Intendencia del Ejército del Aire, por lo que en principio debería estar en contra de la maniobra de Robles para colocar en Contabilidad a Ángeles Cano, una teniente coronel que trabaja en el gabinete de la ministra desde hace un año y que antes de ello estuvo destinada en el palacio de La Zarzuela como interventora en el Cuarto Militar supervisando el control del gasto dentro de la Guardia Real. Precisamente, el hecho de que esta oficial sea del Cuerpo de Intervención es una de las causas por la que los intendentes están en pie de guerra ante su posible nombramiento.
La orden de Función Pública del pasado año para la adjudicación de plazas de cargos directivos dentro de la Administración obliga a que se constituya una comisión de evaluación de méritos cada vez que se saque a concurso una plaza de órganos directivos, con el fin de que eleve una propuesta de nombramiento a la ministra tras analizar a los candidatos que se han presentado.
Esa junta evaluadora debería estar presidida por el Digeneco, ya que el próximo subdirector general de Contabilidad ejercerá competencias que dependen de este alto cargo. Sin embargo, el general Sánchez Martínez ha trasladado a la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, su renuncia a presidir dicha comisión, puesto que es consciente de que su propuesta no sería del agrado de la ministra, subrayan las citadas fuentes.
Por ello, instó a su superiora a buscar a otro presidente para la comisión de evaluación. Valcarce ha decidido que sea su jefe de Gabinete técnico, el general Enrique Campo, el que presida la citada junta. Las fuentes militares critican la «cobardía» del Digeneco al apartarse del proceso calificador, renunciando así a ejercer sus competencias y nombrar «al más cualificado e idóneo». Y sobre todo, que le resulte «indiferente» quién va a estar a sus órdenes como subdirector de Contabilidad, un hecho que ha aumentado la «indignación» en el Cuerpo de Intendencia y entre los subordinados del área económica en Defensa.
Las citadas fuentes también lamentan la «sumisión» del general Campo a la número dos de Robles y cuestionan su idoneidad para dicha evaluación al provenir del Cuerpo de Artillería y haber trabajado en la Dirección General de Armamento, una formación militar y un área de trabajo que poco tienen que ver con Intendencia y el mando de la subdirección de Contabilidad que ahora se tiene que cubrir. «El que tiene cualificación para proponer y es su jefe (el general Sánchez Martínez), renuncia. Mientras que el que no sabe (el general Campo), acepta», resumen las fuentes militares.
Por todo ello, varios de los candidatos que se han presentado a ese puesto estiman que la designación del jefe del Gabinete técnico de Valcarce para presidir el comité de evaluación «roza la resolución injusta», ya que, en su opinión, desde la cúpula del ministerio se están adoptando pasos «para tomar una decisión que no está respaldada por el órgano que va a prestar servicio la candidata».
Robles firmó el 28 de octubre el cese del general de división de Intendencia Luis Alberto Castilla al frente de esta subdirección general adscrita a la Dirección General de Asuntos Económicos del ministerio, debido al pase a retiro de este último. Con carácter previo, el pasado 15 de octubre, publicitó en el BOE la convocatoria de este puesto de libre designación.
Una antigüedad mínima de 15 años
En el apartado de observaciones para optar a este puesto de subdirector general de Contabilidad es donde aparece el requisito de tener «una antigüedad mínima de quince años como personal militar de carrera de las Fuerzas Armadas perteneciente a cuerpos y escalas con una categoría equivalente a A1 o como funcionario/a de carrera en el subgrupo A1, valorándose años adicionales de experiencia en la Administración».
Con ello, la citada plaza «la puede pedir casi cualquier civil o militar intendente o interventor con 15 años de antigüedad, incluso un capitán antiguo» cuando este puesto ha estado en manos de generales o, a lo sumo, de coroneles a punto de ascender. Al hecho de que Ángeles Cano no es intendente, sino interventora, se añade la falta de galones de esta teniente coronel, puesto que aún no ha ascendido a coronel -está previsto que ello se produzca en diciembre- y todavía le esperan varios años para optar al generalato.
Si consigue el puesto de subdirectora general de Contabilidad dentro de Defensa, daría instrucciones a los directores de asuntos económicos de Tierra, Aire y Armada: los tres son generales de división en la actualidad. Para más inri, si la elegida es esta militar que trabaja en el gabinete de la ministra, se encontraría en la Subdirección General de Contabilidad con coroneles más antiguos que ella a sus órdenes.
