El Gobierno acelera las negociaciones con Podemos para sacar adelante la reforma fiscal
El ministro Félix Bolaños ha mantenido una reunión con Ione Belarra antes de la votación del jueves en el Pleno
El Gobierno negocia con Podemos para tratar de llegar a un acuerdo que permita sacar adelante este jueves la reforma fiscal, una vez que los morados hayan amenazado con poder tumbarla si finalmente se elimina el impuesto a las eléctricas. Así, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha mantenido este mediodía un encuentro con la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, para tratar de acercar posturas, según han indicado fuentes gubernamentales y parlamentarias.
La elección de Bolaños como interlocutor no es baladí dado que tiene buena interlocución con Belarra desde la anterior legislatura, cuando ambos fueron compañeros de Gobierno, y ya logró que los morados respaldaran el decreto anticrisis en enero a cambio de una prórroga de la suspensión de desahucios para familias vulnerables hasta 2028.
El Gobierno busca convencer a Podemos para que, al menos, se abstenga en la votación del Pleno de este jueves, donde el voto de Podemos será decisivo. Sin embargo, la aritmética parlamentaria es complicada y un posible voto en contra de Podemos podría llevar a un empate a 175 votos, lo que, según el reglamento de la cámara, desencadenaría dos votaciones adicionales. Si persiste el empate, la propuesta fiscal sería rechazada.
Podemos ya ha advertido al Gobierno que no tolerará engaños en la reforma fiscal y que su apoyo depende de la inclusión del impuesto a las energéticas. Belarra ha reafirmado esta mañana su posición firme, criticando los acuerdos del Gobierno con ERC y Bildu para prolongar el impuesto, mientras que Hacienda confirmaba que su acuerdo con Junts seguía en pie, incluyendo beneficios fiscales para empresas que inviertan en descarbonización.
Los morados han rechazado una oferta similar a la que se ha dado a otros grupos de izquierda, calificándola de «promesa vacía» sin el respaldo garantizado de PNV y Junts. A pesar de esto, fuentes gubernamentales siguen esperanzadas en alcanzar un acuerdo que facilite, como mínimo, la abstención de Podemos. No creen que Podemos esté dispuesto a rechazar medidas fiscales progresivas, como el impuesto del 15% a las multinacionales en el Impuesto de Sociedades o el impuesto a la banca, ambas alineadas con directivas europeas.
Por su parte, Sumar, Esquerra Republicana y Bildu han recordado a Podemos la importancia de aprobar medidas progresivas en materia fiscal. Dentro del socio minoritario de la coalición, se considera crucial este paquete fiscal y se desea que sea más ambicioso, como lo demuestran las enmiendas presentadas para el Pleno. Aunque Sumar confía en que se logrará un acuerdo, también reconocen el coste político que Podemos enfrentaría al votar en contra de la reforma fiscal, describiéndolo como un acto «suicida». Sin embargo, la incertidumbre persiste entre algunos miembros sobre la decisión final que tomará Podemos.