Enfado en el PP por la traición de sus socios europeos con el frustrado veto a Teresa Ribera
Dirigentes ‘populares’ aseguran que al menos han conseguido que la ministra salga «dañada» como comisaria
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, y el Partido Popular Europeo, Manfred Weber. | EP / David Zorrakino
El Partido Popular ha recibido con una sensación agridulce la noticia de que el Partido Popular Europeo se abre a apoyar a la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, como vicepresidenta y comisaria de Competencia y Transición Limpia. La reacción de un sector de los populares, según las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE, ha sido de «bochorno» si finalmente los conservadores europeos votan a favor del Colegio de Comisarios en su conjunto. Los 22 eurodiputados de la formación que lidera Alberto Núñez Feijóo votarán en contra. Fuentes del partido aseguran que Ribera saldrá «dañada». Además, han conseguido, según su versión, desacreditar el discurso de Pedro Sánchez que los vincula a la extrema derecha.
El Partido Popular ha pasado de la euforia, al conseguir Feijóo paralizar el nombramiento de Ribera y de todos los comisarios europeos, a la decepción tras el comunicado emitido este miércoles por el Partido Popular Europeo. En plena comparecencia de la ministra ante el Congreso de los Diputados para explicar su gestión de la riada de Valencia, como así lo había exigido el PPE antes de decidir sobre el futuro de Ribera, llegó la noticia de que el grupo conservador europeo se abría a apoyar a Ribera.
El hecho de que se diera a conocer esta información sin ni siquiera terminar la ministra de dar explicaciones sumió en el desconcierto a los populares. Aunque la mayoría estaban convencidos de que este nombramiento no se podía tumbar, esperaban que la manera de gestionarlo no fuera de la forma en la que se produjo. Con Feijóo sentado en su escaño en el Congreso y sin que Ribera se comprometiera a dimitir si es imputada en algunos de los procesos judiciales abiertos contra ella por la riada, el Partido Popular Europeo publicó un comunicado. La diputada Esther Muñoz, que actuó de portavoz del PP en la sesión plenaria, le había lanzado la pregunta clave para desbloquear la Comisión, pero no tuvo respuesta.
Aun así, el PPE se refirió al principio de acuerdo «entre diferentes partidos tanto a izquierda como derecha en el Parlamento Europeo» para justificar este viraje. Un acuerdo en virtud del cual el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, líder de la Internacional Socialista y máximo interlocutor, se habría comprometido a votar a los candidatos a comisarios de la italiana Giorgia Meloni y del húngaro Viktor Orbán, Raffaele Fitto y Olivér Várhelyi, respectivamente. Una negociación que se ha llevado a cabo en Río de Janeiro, con motivo de la reunión del G-20, a la que ha asistido Sánchez, Ursula von der Leyen y Meloni. Los seis vicepresidentes de la Comisión forman un bloque único que quedó en suspenso, tras bloquear el PPE a Ribera. O salían todos o no salía ninguno, fue la respuesta de los socialistas.
Nada más conocerse la noticia, de las filas populares salían comentarios como: «qué bochorno», «el PP debería haber mandado mensajes de que no iba a vender la piel de Ribera tan barata» o «se emocionaron pensando que iban a tumbar a Fitto». Por el contrario, fuentes de la dirección nacional insistían en que, desde el principio de la presión ejercida en Bruselas se era consciente de que sería muy difícil frenar hasta el final la designación de Ribera.
Estas fuentes de la dirección nacional sostienen que los 22 eurodiputados del Partido Popular español votarán en contra del colegio de comisarios en la votación que se llevará a cabo en el Parlamento Europeo, sea cual sea la postura de la delegación del PPE en la que están integrados. Un voto en contra que, según fuentes de los populares europeos, «puede ser muy dañino para los intereses de los eurodiputados españoles».
«No saldrá gratis votar en contra y yo creo que no son buenos este tipo de órdagos porque en Europa siempre priman los consensos. El Partido Popular se apuntará algún tanto ante la opinión pública en España porque es cierto, que si votara a favor, se le echará encima», comentan fuentes populares desde Bruselas. A su juicio, a Sánchez no le pasará tanta factura haber tenido que apoyar a candidatos a comisarios de partidos de extrema derecha, «dirá que ha sido por el bien de todos y que ha salvado a Europa».
Sin embargo, en otros sectores del PP aseguran que gracias a la presión que han ejercido Teresa Ribera «saldrá muy dañada como comisaria» y se felicitan de haber conseguido poner en la picota el discurso contra la extrema derecha de Pedro Sánchez, «que ya no tiene credibilidad al haber pactado en Bruselas y apoyar a sus candidatos».
