200 altos cargos de la Generalitat firman un manifiesto contra la eliminación del teletrabajo
El Govern de Salvador Illa suprime la opción de trabajar en remoto a partir del 29 de enero
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa. | Alejandro Martínez Vélez (Europa Press)
La decisión del Gobierno catalán de Salvador Illa de suspender el teletrabajo para los empleados públicos, implantado con motivo de la covid-19, ha suscitado una fuerte resistencia interna. Unos 200 altos cargos de la Generalitat han suscrito un manifiesto en contra de esta medida porque consideran que «la presencialidad es un modelo del siglo XIX». Este manifiesto ha sido entregado al Ejecutivo de Illa, pero, según fuentes del Govern, no está previsto dar marcha atrás en la decisión.
Unos 200 altos cargos, en su mayoría funcionarios de carrera, han rubricado un manifiesto dirigido al Govern para reclamar que se les permita continuar trabajando de forma telemática dos días a la semana, tal y como han hecho en los últimos cuatro años. Dicho escrito, avanzado por Catalunya Ràdio, se ha entregado al Govern con el fin de que desista en la nueva medida.
Cargos «incompatibles» con el teletrabajo
La instrucción de eliminar el teletrabajo entrará en vigor a partir del próximo 29 de enero y abarca a todos los secretarios, subsecretarios, subdirectores generales y cargos equivalentes de la Generalitat y sus organismos.
En el texto de la medida se esgrime «el elevado grado de responsabilidad estratégica» de estos puestos de trabajo y contempla un impacto directo en la eficacia y eficiencia de las políticas públicas, ya que son los responsables de la planificación, coordinación y ejecución de las políticas estratégicas de cada Consejería.
Por su parte, estos altos cargos explican en el manifiesto que dicha decisión causó «un desconcierto generalizado» y que se habría adoptado sin evaluar su trabajo. No obstante, el Govern considera incompatible «dirigir equipos y recorrer el país» con el hecho de trabajar en casa.
Piden «conciliación» familiar
Los altos funcionarios también lamentan que será mucho más difícil conciliar y que irá «en detrimento del acceso de las mujeres a los puestos superiores». También consideran que hay un elemento de «motivación» en el teletrabajo para «captar y retener talento» en un momento de «relevo generacional por la jubilación masiva de centenares de empleados públicos». Piden una «evaluación independiente» del teletrabajo porque, además, está regulado por decreto.
El documento se ha entregado a la secretaría de la Administración y Función Pública, dependiente de la Consejería de Presidencia.
