El entorno de Errejón exige a Sumar limpiar su imagen ante la denuncia por agresión sexual
El político quiere que Sumar y Más Madrid le protejan tras haber acatado la orden de dejar todos sus cargos
El entorno de Íñigo Errejón quiere que Sumar y Más Madrid respalden a su exdirigente ante la denuncia por presunta agresión sexual presentada por la actriz Elisa Mouliaá. Errejón y Mouliaá declararon ante el juez el pasado jueves, y aunque tanto Sumar como Más Madrid consideran que en su declaración Mouliaá incurrió en algunas «contradicciones», en los últimos días personas de confianza del político se han puesto en contacto con sus excompañeros para exigirles que se haga todo lo posible por defenderle, y que sobre todo se empiece a limpiar la imagen del político. Según deslizan algunas fuentes, el «relato» que se estaría difundiendo desde los medios considerados más afines está preocupando al exdirigente.
Las fuentes consultadas sostienen que Errejón ha admitido sus responsabilidades, aceptando su cese fulminante hace tres meses, cuando se publicaron en las redes sociales los primeros testimonios anónimos que apuntaban a la existencia de presuntos malos tratos y casos de acoso. Pero creen que la manera en la que Yolanda Díaz y la cúpula de Más Madrid se ha lanzado contra él no corresponde a lo que se pactó en el momento de su salida. Ya amenazaron con dinamitar cualquier tipo de armisticio cuando Más Madrid intentó culpar a Loreto Arenillas un presunto caso de acoso ocurrido en junio de 2023. La tensión va in crescendo en las entrañas de ese sector político.
Los afines a Errejón quieren ahora que se salvaguarde su imagen ante una acusación que Errejón califica de «falsa», y que todos esperan que acabe archivándose para no dar más munición a sus detractores. Según explican las fuentes consultadas, el entorno de Errejón se ha puesto en contacto de forma discreta con representantes de Sumar y Más Madrid tras su salida de la política. Ninguna de las partes quiere que el caso se convierta en un auténtico Me too contra Errejón, y sobre todo que el escándalo no acabe con una sentencia judicial en su contra.
Amenaza de Errejón
Para ello, el entorno de Errejón exige a Más Madrid y Sumar hacer todo lo posible para que no se transmita a la opinión pública la imagen de que el político agredió sexualmente a Mouliaá, intentando poner un cortafuegos al escándalo. Y esa petición empieza a convertirse en exigencia. De momento, Errejón ha guardado silencio sobre lo ocurrido. No ha involucrado a ninguno de sus excompañeros ni ha desvelado las reuniones internas que se mantuvieron mucho antes de que explotara el escándalo. Pero avisan de que podría empezar a hablar.
Si Errejón detecta que Sumar y Más Madrid no están ayudando a enterrar el asunto podría empezar a desvelar detalles internos que involucrarían tanto a Yolanda Díaz como a Mónica García. Ambas dirigentes pidieron públicamente su cese, y Errejón decidió acatarlo. Pero ahora exige que se les ayude a frenar el escándalo.
En sus declaraciones antes de entrar en el juzgado, Errejón dijo que venía a defender su «inocencia». «Vengo hoy aquí a defender mi inocencia y eso se hace en primer lugar delante del juez, se hace ahí dentro. Así que como ustedes comprenderán, las explicaciones las voy a dar en primer lugar donde corresponde», afirmó. Ese «primer lugar» sonó a aviso a navegantes de que, si las cosas se tuercen, el exportavoz de Sumar podría dar su versión de los hechos en otros ámbitos, como el mediático, e involucrar a algunos miembros de las cúpulas de los partidos en los que militó. Por ejemplo, desvelando el operativo que llevó a Díaz a intentar aniquilar Podemos después de obtener la vicepresidencia segunda del Gobierno.
Frenar las especulaciones
Tal y como adelantó en exclusiva THE OBJECTIVE en el pasado mes de octubre, tanto en el entorno de Errejón como en el de Sumar y Más Madrid consideran que la avalancha de testimonios contra él ha sido orquestada por Podemos. Y ahora creen que los morados buscan una condena judicial para que otras mujeres presenten más denuncias y el asunto acabe estirándose a lo largo de los próximos meses. Por eso el entorno de Errejón exige ahora que Sumar y Más Madrid tapen el escándalo y limpien su imagen.
Errejón salió del juzgado defendiendo su inocencia y asegurando estar «tranquilo» a la espera de que la justicia le exculpe de las acusaciones. Mouliaá, por su parte, reiteró haber sufrido tres posibles casos de agresión: antes, durante y después de una fiesta privada a la que acudieron juntos en la noche del 8 de octubre de 2021. Después de la declaración de Errejón, los portavoces oficiales de Sumar han preferido no comentar sus declaraciones.
Tal y como adelantó en exclusiva THE OBJECTIVE en el pasado mes de octubre, tanto en el entorno de Errejón como en el de Sumar y Más Madrid consideran que la avalancha de testimonios contra él ha sido orquestada por Podemos. Y ahora creen que los morados buscan una condena judicial contra él, para que otras mujeres presenten más denuncias y el asunto acabe estirándose a lo largo de los próximos meses. Después de la declaración de Errejón, los portavoces oficiales de Sumar han preferido no comentar sus declaraciones.
Sumar y Más Madrid comparten con Errejón la esperanza de que la cuestión se resuelva a corto plazo y que no acabe en una denuncia judicial. Para esos partidos el «juicio político» contra él ya se ha celebrado, y prefieren que el asunto se quede en ese ámbito para que no acabe afectando a otros dirigentes aún en activo. El juez que instruye la causa ha pedido a las dos partes que aporten de aquí al lunes todas las pruebas de que disponen.
Pero Errejón y su entorno están ejerciendo presiones sobre Sumar y Más Madrid para que le defiendan y, sobre todo, que le ayuden a frenar el desgaste que está sufriendo. Lo que en definitiva piden es algo parecido a una protección, so pena desvelar información relevante de ambas formaciones que podría afectar a la trayectoria de las jefas de Sumar y Más Madrid.