El PP de Castilla y León cree que la relación con Vox mejorará tras la caída de Gallardo
Los ‘populares’ señalan a Carlos Pollán, con un perfil más institucional, como su nuevo interlocutor
El exlíder de Vox en Castilla y León, Juan García-Gallardo. y el presidente de la Comunidad, Alfonso Fernández Mañueco. | EP / Claudia Alba
El Partido Popular de Castilla y León y el Gobierno que preside Alfonso Fernández Mañueco están convencidos de que la relación con Vox mejorará tras la marcha de Juan García-Gallardo. Los populares ven en el nuevo presidente de las Cortes, Carlos Pollán, un interlocutor más cercano a su formación política, con una personalidad más institucional que facilitará el contacto, han asegurado a THE OBJECTIVE fuentes del PP. El nuevo marco de relaciones podría garantizar la estabilidad que Mañueco necesita hasta 2026, ya que no tiene previsto un adelanto electoral.
La inestabilidad que en muchos gobiernos autonómicos del Partido Popular provocó la ruptura por parte de Vox de estos pactos abrió un periodo de incertidumbre sobre el futuro político de estas regiones. Siete meses después de este terremoto, las consecuencias han sido nulas. La formación que preside Alberto Núñez Feijóo ha mantenido los gobiernos en solitario y la única consecuencia ha sido la prórroga de los presupuestos. Sin embargo, un elemento nuevo ha irrumpido en una de las comunidades autónomas en las que las relaciones entre PP y Vox siempre han sido más tensas, como es Castilla y León.
Este elemento nuevo ha sido la situación interna de Vox, que ha estallado al expulsar la formación de Santiago Abascal a dos procuradores del Grupo Parlamentario: Javier Teira y Ana Rosa Hernando. Estos dos parlamentarios autonómicos habían criticado la falta de «democracia interna» en el partido. A estas dos salidas se unió pocos días después la del líder de Vox y exvicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, que ha abandonado la política y entregado su acta de diputado por discrepancias con la dirección.
Lo que podía parecer una falta de interlocución y de complicada dirección interna en Vox de cara a la relación con el Gobierno regional no se ve así por las fuentes populares consultadas por THE OBJECTIVE. Los principales dirigentes del PP creen que el actual presidente de las Cortes, Carlos Pollán, al que apuntan de momento como la voz autorizada del partido, tiene una personalidad más institucional y más cercana al PP. «Es una persona muy agradable, se ha institucionalizado y tiene un perfil muy parecido al del Partido Popular», señalan. Desde que dejó la vicepresidencia del Gobierno, Gallardo se había distanciado de Alfonso Fernández Mañueco, con intervenciones muy duras desde la tribuna de las Cortes.
Esta convulsión de Vox no va a provocar ninguna inestabilidad en el Gobierno regional: «No va a influir para nada, es un problema interno gordo que tenía Vox y Gallardo estaba muy señalado porque tenía una ambición que le llevaba a pensar que en un futuro no muy lejano podía ser el sucesor de Abascal. No tenía ninguna mala valoración entre los votantes de Vox y al final se lo han terminado cargando», señalan las fuentes consultadas. En este sentido, desvelan que Vox, cuando amenazó con salirse de los gobiernos autonómicos, solo hablaban de Extremadura y Castilla y León «porque querían quitarse de en medio a Gallardo».
Este nuevo clima de entendimiento contribuirá a que el Gobierno del PP se mantenga en su idea de no adelantar las elecciones previstas para febrero de 2026, ya que afirman que la crisis de Vox no afecta nada a sus planes, una vez que ya han prorrogado los presupuestos: «Al Gobierno no le afecta nada, estamos en prórroga presupuestaria desde hace un mes y trabajando con total normalidad. El año que viene vamos a tener elecciones y no me preocupa nada prorrogar los presupuestos».
Los populares aseguran que su objetivo es cumplir la legislatura y que solo habrá adelanto electoral si el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, decide disolver: «Nosotros vamos a retrasar todo lo que se pueda, salvo que Sánchez convoque. Entonces, allí nos veremos todos y habría que pensarlo seriamente. Si no hubiera nada de importancia para la comunidad, no vemos que haya que convocar elecciones. No hay ningún motivo». El PP no es partidario de que los ciudadanos se queden con la imagen de que eres un aprovechategui, y creen que con el anterior adelanto electoral se pudo haber transmitido esa imagen. Ahora mismo no hay ningún riesgo de moción de censura».
