Moncloa cree que Díaz «se ha echado al monte» y niega su versión sobre el salario mínimo
Montero informó a Díaz el lunes por la tarde y este martes se reunieron antes y después de la comparecencia en Moncloa

Yolanda Díaz, Pilar Alegría, Pablo Bustinduy y Sara Aagesen. | Europa Press
El Gobierno se lame las heridas tras el enfrentamiento público de mayor envergadura desde el inicio del gobierno de coalición. Paradójicamente, la misma Yolanda Díaz que sustituyó a Pablo Iglesias prometiendo una mejora de las relaciones internas en el Ejecutivo ha sido quien ha dinamitado la estabilidad interna en el Gobierno, visibilizando públicamente sus discrepancias. Tras la rueda de prensa en Moncloa, fuentes gubernamentales intentaron quitar hierro a las tensiones escenificadas por Díaz y la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, después de la insólita imagen de la portavoz del Gobierno respondiendo en voz baja a la vicepresidenta segunda al afirmar que no había sido informada de la tributación del Salario Mínimo Interprofesional (SMI): «Eso no es así».
Fuentes de Moncloa consultadas por THE OBJECTIVE aseguran que la versión de la vicepresidenta segunda del Gobierno «es falsa» porque Yolanda Díaz fue avisada el lunes por la tarde de que la decisión del Gobierno era gravar finalmente a los perceptores de la subida del SMI con el Impuesto a las Rentas de Personas Físicas (IRPF). En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la propia Díaz denunció que «este debate no existió. Sí le digo que no hubo deliberación en el Consejo de Ministros ni comunicación a ninguna de las partes que componemos el espacio de Sumar en el Gobierno. Y lo digo porque me he ocupado de esto, por tanto, me he enterado por ustedes, por los medios de comunicación».

Desde Moncloa desmienten este extremo y sostienen que no sólo fue informada el lunes por la tarde. Este mismo martes, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, tuvo un ‘aparte’ por la mañana después de la reunión del Consejo de Ministros y antes de su intervención en rueda de prensa en Moncloa junto a la ministra portavoz y los ministros Sara Aagesen y Pablo Bustinduy. Según las fuentes gubernamentales consultadas por este periódico, el objeto de esa conversación fue para solicitar a Díaz que «suavizara» las críticas sobre la decisión adoptada por el ala socialista de la coalición, sin consenso con el socio minoritario.
«Se ha echado al monte»
El contexto de esa conversación fue el malestar de la propia Díaz, toda vez que la noticia sobre la tributación final de los perceptores del salario mínimo se conoció una hora antes de la rueda de prensa en Moncloa, pasadas las 12.00 horas de este martes. Tras la tensa comparecencia en la sede del Gobierno, fuentes de Moncloa aseguran que se produjo una nueva conversación entre Montero y Díaz en el Congreso de los Diputados, donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció ante el grupo parlamentario socialista en el inicio formal del periodo de sesiones. Moncloa revela que Montero volvió a solicitar a Díaz que «rebajara la crítica» después de afirmar que no había sido informada de esta medida.
Lejos de recular, Sumar ha hecho saber que su formación política solicitará una proposición de ley en el Congreso para que no se practiquen retenciones por rendimientos del trabajo de aquellos trabajadores que perciban, en cómputo anual, el SMI. Una iniciativa que también ha anunciado la portavoz de Podemos, Ione Belarra, quien ha calificado de «escándalo» la posición del PSOE. En la misma rueda de prensa de Moncloa, Díaz ha avanzado incluso que «si esta iniciativa llega al Congreso va a contar con la anuencia [sic] de Sumar». Fuentes parlamentarias socialistas avanzan que si esto ocurre «se romperá la unidad de acción de la coalición» porque «el PSOE votará en contra de ello».
Si bien la órbita socialista del Ejecutivo se afanó posteriormente en revestir de «normalidad» las hostilidades vividas durante la rueda de prensa, aireando públicamente sus discrepancias e interrumpiéndose incluso en las respuestas a las preguntas formuladas por los periodistas, en el Ejecutivo existe una honda preocupación por el papel que desempeña desde hace semanas Yolanda Díaz. «Se ha echado al monte», denuncian fuentes gubernamentales a THE OBJECTIVE ante la secuencia protagonizada por Díaz en las últimas semanas. «Ha pasado de llamar mala persona a Carlos Cuerpo a decir que en el Consejo de Ministros hay neoliberales… Y ahora, miente. Sí fue informada». En el trasfondo de todo, el temor a que la pugna con un Podemos cada vez más radicalizado siga arrastrando a una vicepresidenta segunda condenada al exceso por la necesidad de foco mediático y protagonismo.