Sumar rebaja el impacto de la polémica de los mensajes de Sánchez: «No tiene recorrido»
La coalición limita los mensajes a Ábalos a la esfera privada y cree que «si no hay más» carecen de relevancia judicial

Yolanda Díaz con Mónica García. | Europa Press
Sumar observa sin demasiada preocupación la publicación de los mensajes que se intercambiaron el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su ex número dos, José Luis Ábalos. Según varias fuentes consultadas en Sumar y en los partidos que participan de la alianza de Yolanda Díaz, a menos que no salgan nuevos mensajes comprometedores, la polémica «no tendrá recorrido». Esto es, al menos, lo que las fuentes del sector que cogobierna con el PSOE transmiten sobre la publicación de mensajes en los que Sánchez y Ábalos intercambian opiniones sobre la relación con las baronías socialistas.
Emiliano García-Page, Javier Lambán y Guillermo Fernández Vara. Estos tres dirigentes territoriales del PSOE estuvieron en el centro de varias conversaciones privadas publicadas por El Mundo en las que el presidente arremetía contra sus compañeros del partido y pedía a Ábalos intervenir para aplacar el fuego amigo. En una de ellas, Sánchez tildaba a Vara de «petardo», mientras que acusaba a Page de «tocar los cojones». Más relevante fue, tal vez, el comentario que Sánchez trasladó a Ábalos en noviembre de 2021. Entonces, el presidente empleó el término «infundios» para referirse a las primeras informaciones publicadas por THE OBJECTIVE que explicaban las razones de su alejamiento del Gobierno. Sánchez expresó su «solidaridad» a Ábalos, por un caso que acabó siendo judicializado a partir de febrero de 2024, en el marco de la investigación sobre su mano derecha Koldo García.
El PP considera que los mensajes de WhatsApp enviados por Sánchez demuestran que el presidente «lo sabía todo y lo tapó», en referencia a la trama de presunta corrupción por la que Ábalos está siendo investigado. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, acusó el Gobierno de estar «más preocupado» por estos mensajes que por la crisis de los trenes o el apagón del 28 de abril. En 2023, Sánchez confesó a Ábalos «echarle de menos» y dijo valorar su «amistad».
«Conversaciones privadas»
Ese año, Sánchez decidió incluir a Ábalos en las listas de las elecciones europeas, poco antes de que estallara el caso Koldo. Este caso investiga una presunta red criminal que se lucró con contratos públicos de compra de mascarillas durante la pandemia, pero que puede también derivar en otros contratos del ministerio, en el fichaje de personas vinculadas con Ábalos por parte de empresas públicas y con el polémico rescate de la compañía Air Europa.
Sumar ha manifestado oficialmente su crítica por la publicación de mensajes privados en teoría ajenos a la investigación judicial. Así, la coalición de Yolanda Díaz se alinea con Sánchez y cree que se debe investigar sobre la filtración que «jamás debería haberse producido». «No comentamos conversaciones privadas del presidente», zanjó el lunes el portavoz de Sumar y ministro de Cultura, Ernest Urtasun. La ministra de Sanidad, Mónica García, también incidió en la naturaleza privada de los mensajes entre Sánchez y Lambán y en el hecho de que, en su opinión, se trata de conversaciones que «no son realmente transcendentales».
La gran pregunta, no obstante, atañe a las consecuencias que esos mensajes pueden producir dentro del Ejecutivo, el PSOE y sus propios socios. Los dirigentes socialistas aludidos han manifestado su repulsa por el tono de los mensajes. Lamban ha recordado en una entrevista en Onda Cero otras conversaciones con Sánchez, en las que el presidente tuvo «reacciones iracundas», mientras que Page se sorprendió por unos mensajes que en su opinión «terminan saliendo». Page sostuvo que uno de los filtradores de esos mensajes pudo ser el propio Ábalos, en un presunto toque de atención a la Moncloa por las investigaciones judiciales en curso. Sumar amplía ese abanico a Koldo.
Más allá del culebrón que esto pueda protagonizar dentro del PSOE, según el socio de Gobierno de Sánchez, de momento la polémica no tendrá efectos en la estabilidad del Ejecutivo. «Si no sale algo más, no tiene recorrido», explica una fuente consultada, en una lectura que otras fuentes de Sumar y formaciones aliadas comparten. En su opinión, en el momento en que esas conversaciones no entran a formar parte del ámbito judicial, no tendrán demasiado recorrido. Una posición que, cabe decirlo, no comparten desde Podemos. Los morados han exigido este lunes a Sánchez explicaciones por esos mensajes, puesto que «es muy difícil de creer y resulta inverosímil que Sánchez no supiese nada de los tejemanejes de Ábalos, la persona de máxima confianza del presidente, su número dos».