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Política

Chivite maniobró para no jubilar al cargo clave en las adjudicaciones vinculadas a Cerdán

El presidente de la mesa de contratación que cambió las puntuaciones se debió jubilar en 2021 pero se le permitió seguir

Chivite maniobró para no jubilar al cargo clave en las adjudicaciones vinculadas a Cerdán

María Chivite y Santos Cerdán. | Una ilustración de Alejandra Svriz

El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, está bajo la lupa de la investigación de la UCO por unas conversaciones con Koldo García sobre adjudicaciones de obra pública a la constructora Acciona. Entre las obras señaladas en las que presuntamente habría intervenido Cerdán hay una especialmente sensible: la del desdoblamiento del túnel de Velate (Navarra), con una inversión de 76 millones cuya adjudicación fue denunciada ante la Guardia Civil de Navarra al hallarse multitud de irregularidades en la mesa de contratación. El presidente de esa mesa, Jesús Polo, fue acusado de repartir los puntos a los licitadores conociendo de antemano la puntuación que habían otorgado el resto de miembros del tribunal. Polo debía haberse jubilado por ley a los 70 años, pero el Gobierno navarro de María Chivite abrió un resquicio a través de la Ley de Presupuestos de 2021 para mantenerle en el cargo tres años más.

Una “irregularidad manifiesta”. Así calificaron los miembros de la mesa que adjudicó las obras del túnel de Velate el hecho de que Polo, ingeniero al frente del Servicio de Nuevas Infraestructuras -nombrado por el consejero de Obras Públicas e infraestructuras- conociera de antemano la puntuación que iban a dar a los licitadores sus compañeros. La norma implica que ese reparto de puntos entre empresas debe ser secreto y ponerse en común en el último momento para «no viciar el procedimiento». En la obra de Velate todos cumplieron el requisito… a excepción del presidente de la mesa.

La adjudicación, que se produjo en febrero de 2024, estaba prácticamente decantada hacia una UTE formada por las empresas Mariezcurrena, Comsa y Nortunel. Sin embargo, según fuentes conocedoras de los detalles del proceso, Polo «conoce los votos de los demás, concede los suyos y revierte el resultado de la licitación en favor de Acciona y Servinabar», la UTE que ha levantado sospechas en la UCO por su presunta relación con Santos Cerdán y también con Koldo García. Todo el proceso de adjudicación y las irregularidades detectadas, que también ha reflejado el Tribunal de Cuentas navarro, aparecen reseñados en cerca de medio millar de correos electrónicos que intercambiaron los miembros de la mesa, y que obran en poder de THE OBJECTIVE.

Evitar su jubilación

Jesús Polo abandonó el Servicio de Nuevas Infraestructuras el pasado mes de enero, cuando ya tenía 73 años y había participado en multitud de mesas de contratación de obra pública en Navarra. Sin embargo, en condiciones normales, debió hacerlo mucho antes. Al cumplir 70 años, exactamente, la edad tope que marcaba la ley navarra.

El Gobierno de María Chivite, sin embargo, decidió modificar la ley para permitir prorrogar durante varios años la presencia de Polo en el Servicio de Nuevas Infraestructuras. Y con ello, su presencia en mesas de contratación de obras especialmente significativas y polémicas, como esta de Velate. Lo hizo a través de la Ley de Presupuestos de 2021, en la que introdujo una disposición final tercera bajo el epígrafe «excepción permanencia en servicio activo».

Según el textual de esta disposición, «de manera excepcional, se autoriza la permanencia en el servicio activo por encima de los 70 años de edad del personal adscrito al Departamento de Cohesión Territorial dentro de la Dirección General de Obras e Infraestructuras que ocupen la Dirección de Servicio, por un periodo de un año por necesidades del servicio, falta de profesionales, complejidad técnica de los proyectos u obras de ejecución inmediata que es preciso acometer, de suma trascendencia para el desarrollo territorial de la Comunidad Foral de Navarra, razones en todo caso debidamente justificadas».

Informes de fiscalización

Ese texto fue el que abrió la puerta a que Polo se acogiese a una prerrogativa y mantuviese en activo retrasando su jubilación en 2022, 2023 y 2024 -año clave para la obra de Velate-. Finalmente, y tras estallar la polémica por su adjudicación, abandonó el servicio el pasado mes de enero.

Los informes de fiscalización de algunas de las obras con las que Polo ha estado vinculado muestran la preocupación por ciertas irregularidades halladas. Por ejemplo, en los informes sobre dos contratos de obra pública en Etxarri Aranatz y la mejora de la carretera Leitza-Goizueta-Hernani, los inspectores dejaron el mismo mensaje contundente: «Dado que estas carencias se vienen manifestando en varias de las obras licitadas últimamente por el Servicio de Nuevas Infraestructuras, esta Intervención Delegada insta a la Dirección General de Obras Públicas e Infraestructuras a que establezca los mecanismos necesarios para que los proyectos sean debidamente supervisados previamente a la licitación de las obras correspondientes con el fin de evitar modificaciones no deseadas en fase de ejecución de las obras».

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